12| ¿Damon?

2K 222 283
                                    

Dulce

— ¿Qué dices?

La pregunta de Marco sonó a reproche. El no entendía la actitud de Alex y yo menos.

La postura de Alex cambio, junto a su semblante aún más serio, sin embargo trató de disimular su molestia con una sonrisa.

— ¿Acaso estas sordo, amigo? —recalcó la última palabra con cierto tono de burla.

—Es que no me lo creo, tú no decides donde se queda o no Dulce —lo retó marco.

—Ella vino conmigo ¿No sería lógico que regrese a mi lado? —soltó el castaño, lleno de ironía.

—No, claro que no. —exclamó Marco para segundos después mirarme con aquella sonrisa tranquilizadora suya. —Que Dulce decida.

Ah no, a mí no me metan.

—Bien, que ella decida —ambos individuos me miraron.

Los mire atenta y cansada a la vez, pasé de mirar a Alex y de él a Marco, que dolor de cabeza, solo quería relajarme, no importa si era por hoy. Además ver a Alex celándome solo aumentó mi enojo hacia él ¿Quién se creía? Si minutos antes miraba a otra chica.

Así que decidida y a la vez un poco confundida, me coloqué al lado de Marco haciéndole frente a lado bipolar de Damon, Alex.

—Iré con Marco, amigo —declaré ganándome su mirada confusa.

—No puedes...—soltó con rapidez —Vinimos juntos.

—Sí y ahora me voy sola. —expresé seria.

—No te dejare ir con un extraño —trató de acercarse a mí pero retrocedí.

—No es un extraño, es un amigo —recalqué la última palabra — Me iré con él.

—No.

— ¿Acaso me estas celando, Alex? —sonreí irónica.

—No pero eres mi amiga y...

—Si, a la mierda que sea tu amiga, los amigos no se celan, así que, querido amigo, yo me voy...

—Mierda. —lo oí maldecir a mis espaldas.

Caminaba con Marco a mi costado, no sabía ni lo que hacía pero había disfrutado molestar a Alex, acaso ¿Mi lado malvado había comenzado a surgir?

No me importaba.

—Dulce...—la voz de Marco me detuvo, al parecer se había detenido pasos atrás así que voltee a verlo más tranquila sabiendo que la situación de antes ya había acabado.

— ¿Pasa algo?

— ¿Ese no es Damon? —lo miré inquieta.

¿Cómo lo conocía? Ah, bueno, Dulce la distraída me dicen.

Había olvidado que Marco conocía a Damon o al menos lo había visto por una única vez cuando me sacó de aquel bar...mierda.

—Es un amigo...—me resumí a decir.

—Tiene un extraño parecido a Damon...—soltó —Pero es imposible que sea él porque...

—Damon está muerto —termine por él mientras lo miraba fijamente para preguntar lo que más me causaba interés. — ¿Cómo lo sabes?

—Bueno, las noticias corren a la velocidad luz y más cuando se trataba del primogénito de la familia Vans.

—Bien...—me mordí la lengua —Creo que debería irme a casa.

Él no pareció impresionado por mi respuesta. En realidad creo que se lo esperaba.

—Sabía que no te quedarías...

Prohibido Amar a Dulce ©Donde viven las historias. Descúbrelo ahora