Protégeme [Zayn Malik]

Capítulo 11: 'No soporto verte coquetear'

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Cuando Zayn llegó a la dirección que decía la tarjeta, vio que Vinny estaba delante de la puerta, recibiendo a la gente. Cuando aparcó el coche, Samanta se bajó sin darle la oportunidad de abrirle la puerta. Samanta caminó hacia Vinny, y lo abrazó, cosa que le dolió a Zayn, pero él estaba ignorándola, no podía mostrar signos de celos.

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Pasaron bastantes horas, la fiesta cada vez se ponía mejor, y Samanta estaba cada vez más borracha. Zayn la seguía a todos lados, ignorando las miradas asesinas que ella le mandaba. Cuanto más borracha estaba Samanta, más ganas tenía de besar a Zayn, pero ella no podía hacer eso, si no, su plan de ignorarlo, y alejarlo de ella; como al principio, saldría mal.

Vinny se acercó a ella cuando Samanta estaba bailando, la agarró por detrás, y empezaron a bailar. Samanta sentía el alcohol por sus venas, y se sentía un poco mal, pero no quería irse ya, se conocía a ella misma, y estar a solas con Zayn no le convenía en ese momento.

Zayn observó todo desde una esquina. Veía a Samanta muy pegada a Vinny, y a él restregarle las manos por todo el cuerpo. Eso le dolía, y ya no aguantaba más, ignorarla no iba con él.

Se armó de valor, y empezó a caminar hacia ellos, pero entonces, vio como Vinny agarraba la cara de Samanta con sus dos manos, y sonreía. Entonces, Samanta se fue con Vinny por unas escaleras. Zayn sintió como su corazón empezaba a latir a mil. Sin dudarlo, caminó rápidamente hacia las escaleras. Subió, y cuando llegó arriba, vio a Samanta y a Vinny entrando en una habitación, y cerrándola detrás de ellos.

Zayn se quedó allí, congelado, sin saber qué hacer, su corazón se había frenado en seco, y unas ganas de ir y tumbar la puerta lo invadieron de repente. Empezó a respirar tranquilamente, para controlarse, no podía hacer eso, o Samanta lo despediría, y no la volvería a ver nunca más, y él, no podía permitir eso. Tenía que verla todos los días.

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Samanta empezó a abrir los ojos lentamente, y frunció el ceño, ante el dolor repentino que apareció en su cabeza. Se tapó la cara con las manos, y suspiró.

Mierda, en vez de mostrarle a Malik quien soy, me puse a beber como una idiota, y ahora tengo una resaca de los mil demonios.

Samanta se quitó las manos de la cara, y entonces, se fijó que no estaba en su habitación. Abrió los ojos todo lo que pudo, y vio a Vinny durmiendo en el sofá, enfrente de ella.

— ¿Vinny? —Él se removió un poco, y abrió los ojos.

—Buenos días, borrachita—Ambos sonrieron, y Vinny se levantó, sentándose al lado de ella.

— ¿Qué pasó anoche, Vinny? —

— ¿No lo recuerdas? —Preguntó él frunciendo el ceño.

—No... —Dijo Samanta en un hilo de voz.

—Bueno, anoche me dijiste que me amabas, y ahora estamos en Las Vegas, recién casados—Samanta parpadeó, y Vinny rompió en una carcajada sonora. Samanta sonrió un poco, y se sentó en la cama.

—No juegues, Vinny, ¿qué paso anoche? Y lo de verdad, no lo de tus sueños—Vinny sonrió, y asintió.

—Estábamos bailando, cuando me dijiste que si te daba una vuelta más, me vomitarías encima—Vinny sonrió más—Te dije de llamar a tu guardaespaldas, del cual no sabía el nombre, y tú te burlaste de eso, y me dijiste que se llama Malik. Bueno, después de eso, me dijiste que no querías irte a casa. Entonces decidí subirte a dormir a mi cuarto...Subimos, te acosté, y yo me fui al sofá—Samanta se tapó la cara con las manos, y gruñó.