Capítulo 14. Cuenta cuentos.

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--Minnie, Castillo de Disney--

-Lo siento, Minnie. Supongo que me iré un poco más.

Minnie contuvo un suspiro. Ella no estaba enojada. O incluso molesto. En realidad. Esto sonaba muy importante y esperaba que Sora fuera él mismo pronto. Ella solo estaba ...

Decepcionada.

Tenía la esperanza de que, después de que se ocupara de este hombre llamado Xehanort, Mickey tuviera tiempo para descansar, algo que no había hecho en al menos 3 o 4 años, aunque si era honesta, no había descansado adecuadamente desde que se convirtió en un maestro de la llave espada y se había enterado de que venía con el trabajo.

-¡Está bien, Mickey! Vuelve a salvo.- Ella le ofreció una sonrisa. -Espero que tengas éxito en volver a armar a Sora. Por su bien y el de todos los demás.- Ella había visto a algunos de los amigos de Sora desde su desaparición y decir que estaban tristes sería quedarse corto.

Especialmente Riku. Aunque había pensado que Kairi y Sora estaban vinculados sentimentalmente, la amistad de su esposo con el chico de cabello plateado había significado que ella llegó a conocer a Riku. Y eso significó no solo escucharlo contar historias sobre su mejor amigo, sino también observar los silencios en el medio. Las silenciosas miradas de nostalgia y el dolor escondido justo detrás de la risa.

Bueno, ella sabía cuando alguien estaba profundamente enamorado. Solo podía esperar que, pasara lo que pasara en el futuro, el corazón de Riku no se rompiera por eso. Ella no pensó que lo haría. Parecía demasiado fuerte para eso.

-¿Minnie?-Mickey preguntó, y con un sobresalto, se dio cuenta de que él había hecho una pregunta.

-¡Lo siento!- Ella se rió.- Estaba ... perdida en mis pensamientos.

-UH Huh.- Mickey le devolvió la sonrisa, acostumbrado a sus fantasías. -¿Solo estaba preguntando qué planeabas hacer mientras no estaba?

-¿Como si mi horario girara en torno a ti?- Ella bromeó, riendo cuando él se sonrojó. -Estaba planeando reorganizar la biblioteca. Lo que en realidad será útil si no estás aquí. A alguien no le gusta revisar sus libros.

Mickey sonrió tímidamente. 

-Nunca se sabe cuándo puede resultar útil.

-No necesitas la tercera edición de un libro de texto cuando no solo tienes la quinta, sexta y séptima versión actualizadas, sino que también tienes el doble de cada una.- Ella suspiró. -Solo los voy a trasladar a la biblioteca auxiliar de la ciudad.

-Uh, cierto.- Mickey asintió.

Luego se despidieron, Minnie le envió un beso al aire y Mickey lo "atrapó".

Dejó escapar un suspiro cuando colgó el teléfono y lo colocó en su escritorio.

-Lo siento, su majestad se ha ido todo el tiempo.

-¡Oh!- Se sobresaltó por la voz, mirando a su alrededor en busca del joven de cabello plateado. Mickey no había dicho que Riku vendría.

No fue hasta que vio la pantalla parpadeante que se dio cuenta de que la voz provenía del interior del gummiphone. 

-¿Riku?

-Uh, lo siento. No exactamente.

Miró hacia abajo y se dio cuenta de que era el pequeño asistente virtual, apodado "Data-Riku" por Chip y Dale, quien había hablado. 

-Oh, está bien cariño.- Le pareció un poco extraño hablar con la versión de datos del amigo de su esposo, pero Data-Riku también había sido de gran ayuda para desarrollar sus habilidades con el nuevo teléfono. Ahora podía hacer algo más que contestar llamadas telefónicas, ¡también podía hacerlas!

Fs & Wtft [SoRiku]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora