SABOR - 맛이 나다 **Jikook / Taejin / Kookmin / Jintae Fiction**

Come y calla 🍽️

Corono la hamburguesa con unas rodajas finas de pepinillo agridulce, para después salsear la pequeña torre de ingredientes con mi salsa especial de tomate especiada con chile. Cubro los ingredientes con la parte superior del pan de hamburguesa que he creado y horneado yo mismo, un pan brioche mezcla de trigo y maíz, impregnado de mantequilla casera y espolvoreado con semillas de amapola. Cómo no, le doy un último toque de plancha a toda la hamburguesa para que todos los ingredientes se atemperen y tomen la temperatura adecuada. Cuando el queso cheddar comienza a escurrirse sobre la deliciosa carne, sé que es el momento de retirarla del fuego.

Deposito la hamburguesa sobre un plato normal, uno barato, de los de hacer pruebas, y se lo tiendo al nuevo, que lleva mirándome con los ojos como platos sin despegar la boca desde que comencé a cocinar sin parar de darle explicaciones sobre las mezclas de ingredientes y la importancia del equilibrio entre sus sabores.

Lo sé, soy intenso cuando se trata de comida. Quizá le he abrumado con tanto detalle, pero lo siento, así soy yo y este es mi trabajo. Y mi pasión. Así que debe acoplarse a mi ritmo cuanto antes si quiere seguir en esta cocina y aportar algo al grupo.

- ¡Voilà! Y esta es la famosa hamburguesa "Amapola". Espero que te guste - le digo con una sonrisa limpiando mis manos en el mandil, ansioso por ver su reacción al degustarla.

Es una de las cosas que más me gustan en este mundo. Observar a las personas que prueban mi comida, ver su cara al sentir los sabores, sus gestos al notar las explosiones de sabor en su boca, o notar como los recuerdos de sus vidas vuelven a sus mentes gracias a que vuelven a sentir un sabor en concreto después de mucho tiempo. O notar su sonrojo al percibir un sabor que les activa sin poder evitarlo sus deseos más profundos. Hay miles de reacciones, y todas ellas me encantan.

Pongo toda mi atención en él, tomo uno de los dos taburetes que tenemos en la cocina y me siento frente a él, dispuesto a registrar cada uno de sus gestos para después utilizarlos para mejorar la receta (si es que hay algo que mejorar).

Park observa la hamburguesa, sus ojos brillan al verla, y podría jurar que está salivando más de la cuenta. Pero no la toca. Finalmente, aleja la vista de ella y la posa sobre mí:

- ¿Vas a quedarte ahí mirándome? - me pregunta educadamente, pero claramente incómodo bajo mi escrutinio.

- Eso pensaba ¿por? - contesto con naturalidad.

- Me siento como un animalito de los que aparecen en los documentales de National Geographic. ¿Tienes que estar tan atento? Me da vergüenza comer esto tan enorme con alguien mirándome tan fijamente... lo siento - dice sonrojándose de nuevo.

- ¿Enorme? ¿Crees que es incómoda de comer? ¿no sabes por dónde empezar? - entro en modo profesional al instante, tratando de descubrir qué fallo tiene mi hamburguesa para que no quiera comerla.

- No es enorme, es una hamburguesa... Pero no me gusta que me vean comer, especialmente esto, tiene pinta de que se me va a escurrir todo por la barbilla en cuanto le dé un bocado - dice tímidamente.

- ¿Eso es importante? Es una hamburguesa, eso va a pasar si es buena y tiene algo dentro - digo cruzándome de brazos frente a él.

Jimin resopla, y finalmente responde:

- ¿En serio tienes que mirarme? -

- ¿Eso es lo que te preocupa? ¿Qué te vea comer? Veo comer a mucha gente cada día -

- Pero apenas te conozco, me da vergüenza -

- Vergüenza es robar, niño. Come y calla, no me hagas desesperar - digo con mi mejor tono dictatorial. ¡Qué tontería es esta! que coma y me deje verlo, por favor.