Capítulo 21

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Durante todo el camino, nadie dijo una sola palabra. Ron manejaba el auto, viendo de vez en cuando a Ginny por el espejo retrovisor y de reojo a Hermione que estaba a un lado suyo.

— Demonios – exclamó Ginny tomándose la cabeza.

— ¿Qué pasa? – le pregunto Ron.

— Olvide mi bolso.

— ¿Qué llevabas ahí? – le pregunto Hermione.

— Solo dinero muggle, mi perfume y mi lápiz labial.

Por fin llegaron a casa de Ginny, con un solo "hasta mañana" salió del auto y caminó lentamente hacia la puerta.

Harry la esperaba en la habitación. Después de jugar con la pequeña Lily, darle de cenar y bañarla, la dejó completamente dormida en su cuna. Leía un libro mientras veía constantemente el reloj. Ron le había prometido que la misión terminaría a media noche, así que esperaba a Ginny tranquilamente.

Justo antes de entrar a la habitación, Ginny dio un gran suspiro. Tenía que decirle la verdad a Harry, ya no quería que entre los dos hubiera secretos ni malos entendidos.

— ¿Ginny? – dejó Harry el libro en la mesa del buró.

— Si, amor, ya llegue – entró Ginny a la habitación.

— ¿Cómo les fue?

— Muy bien – dijo entusiasmada – pudimos avanzar mucho en la investigación.

— Esa es una gran noticia.

— Estoy muy cansada – dijo quitándose los tacones – quiero darme un baño.

— Sabía que ibas a llegar cansada – se levantó Harry y empezó a desabrocharle el vestido – te preparé la tina de baño.

— Eres un amor, es justo lo que necesito.

— ¿Me invitas?

— Sabes que no necesitas invitación para bañarnos juntos.

Ginny estaba recostada en el pecho de Harry dentro de la tina, perdida en sus propios pensamientos de cómo decirle a Harry lo ocurrido en la fiesta, mientras él le platicaba las novedades que había hecho Lily durante la noche.

— No quería darle chocolate, después no se iba a poder dormir...

— Harry – lo interrumpió — supongo que Ron te va a dar toda la información acerca de lo que pasó hoy.

— Si ¿Por qué me lo dices?

— El líder del narcotráfico muggle es un mago – le dijo Ginny volteando a verlo.

— ¿En serio? ¿Están seguros? – Ginny asintió – bueno, mañana hablaré con Ron para ver cómo vamos a proceder con eso. No quiero hablar de trabajo en casa y mucho menos cuando estamos en la tina desnudos.

— Se llama Draco Malfoy – Harry abrió los ojos sorprendido — ¿lo conoces?

— Sí, bueno, no personalmente. Sé quiénes son los Malfoy, ellos estuvieron apoyando a Voldemort. Según tengo entendido, una prima de Sirius es madre de Draco Malfoy. Es una familia peligrosa – Ginny tragó en seco – habrá que trabajar con mucho cuidado.

— Pero ¿no se supone que el ministerio sabe cuando un mago hace magia frente a un muggle?

— Sí, pero Voldemort tenía a muchos seguidores en todas partes, incluyendo el ministerio. No dudo que los Malfoy hayan modificado su permiso para hacer magia frente a muggles para no ser detectados. Después de Voldemort, tal vez nadie se haya dado cuenta que aun sigue así – Harry suspiro y acaricio el cabello de Ginny – Ron y yo tenemos mucho trabajo, si los Malfoy están haciendo eso, tal vez, otros también.

¿Te utilizo, Te necesito?Donde viven las historias. Descúbrelo ahora