Capítulo 1

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— Lo sentimos mucho, señor Jones. — el doctor agachó el rostro con pena. — Hemos hecho todo lo posible pero... no ha resistido.

Un nudo se instaló en su pecho y aquel ardor se extendió por su garganta. Sus ojos se llenaron de lágrimas y las piernas le temblaron hasta caer al suelo.

— No.... no... — repetía mientras las lágrimas caían por su rostro. — No... mamá no puede estar muerta. — negó con fuerza.

— Betty... — Jughead se arrodilló junto a ella tratando de consolarla.

— No, ella no puede estar muerta. — alzó el rostro. — ¡Ella lo prometió!— se aferró a la camisa del chico.

— Betty, cálmate por favor. — pidió Fp tratando de contener las lágrimas.

— ¡¡Dijo que no me dejaría!!— gritó con dolor. — ¡Dijo que se quedaría conmigo!

— Betty... por favor... — Jughead, aunque intentaba consolarla, lo cierto es que ver a la pequeña rubia rota entre sus brazos le partía el corazón, por lo que las lágrimas también abandonaban sus ojos.

— Juggie... — ella se aferró a él — No es cierto ¿verdad? Dime que es una mentira... dime... que mamá está bien ¿verdad?

Jughead escondió el rostro. — Lo siento...

— No... — negó colocándose se pie. — ¡No es cierto! Porque si ella ha muerto... nunca la perdonaré.

— Betty... — Fp intentó tomarla del brazo.

— Nunca la perdonaré por dejarme. — negó antes de salir corriendo.

Jughead la siguió rápidamente.

— ¡Betty, espera!— la persiguió hasta las afueras del hospital

Betty corría a toda prisa, así qué, sin darse cuenta atravesó la calle y un coche la atropelló.

Jughead se paralizó observando el cuerpo de la niña inconsciente en el suelo.

Pronto una multitud se hizo presente a su alrededor.

•Bughead •

— ... Por lo que, con el poder que me otorga el juzgado he determinado que la custodia de Elizabeth Cooper pertenecerá a su padre biológico. El señor Hal Cooper. — el juez dictó sentencia provocando un incomodo silencio en la audiencia.

Betty dirigió la vista a Fp y Jughead quienes parecían paralizados al lado de ella.

— Cariño... — su padre, Hal se acercó hasta ella tomándola de los hombros. — Iras a vivir conmigo ¿Estas feliz?

— ¿Por qué no puedo quedarme con ustedes?— preguntó observando a los Jones.

Fp soltó un suspiro y forzó una sonrisa. — Es complicado, Betty. Pero puedes estar tranquila, tu padre se hará cargo de ti. — señaló.

Betty desvió la mirada a Hal.

Recordaba a su padre. Pasó alrededor de tres fines de semana con él antes de que su madre volviese a casarse con Fp. Entonces se mudó a Toledo junto a los Jones. Y desde entonces había vivido con ellos.

Los amaba. Consideraba a Fp como su padre y Jughead era su mejor amigo. Pensó que tener un hermano era lo más parecido a su relación con Jughead.

Luego, su madre había enfermado de Cáncer y su condición fue deteriorando.  Tanto, que su padre comenzó a frecuentarla después de diez años de no haberse visto.

Una vez escuchó que él y su madre discutían y su nombre se colaba en la conversación. Luego, fue sometida a una serie de preguntas por varios "abogados"

Su madre le explicó que su padre quería que fuese a vivir con él, pero ella le prometió que mientras ella estuviese con vida, nadie las separaría. Prometió quedarse con ella.

— Despídete de los Jones, cariño. — pidió Hal.

— ¿Cuando volveré a verlos?— preguntó con desconcierto.

— No lo sé. Nos mudaremos a Riverdale  ¿la recuerdas?— Hal sonrió.

— Pero me gusta aquí. Voy al colegio con Jughead  — explicó.

— Iras a un colegio en Riverdale. — asintió Hal.

— Pero ¿Podré ver a Jughead, cierto?— preguntó a su padre.

Hal asintió  — Seguro. Puede venir a casa cuando quiera. — señaló.

Jughead se acercó. — De todas maneras, te veré mañana en el colegio ¿bien?— sonrió.

Betty asintió.

— ¿Nos vamos? — Hal comenzó a guiar a su hija a la salida.

•Bughead•

— No entiendo por qué tengo que irme con él. — se quejó mientras se columpiaba con suavidad.

— Es tu padre ¿No?— Jughead permanecía de pie junto a los columpios.

— Uno al que no veo desde los cuatro. — indicó frenando. — ¿Por qué no puedo quedarme con ustedes?— alzó una de sus cejas.

— Estudiaré Leyes y entonces te lo explicaré. — sonrió con burla.

— Tenemos doce ¿Cuánto crees que debo esperar para eso?— se quejó.

— Dijo que podría ir a visitarte. — sonrió.

— ¿Lo harás?— alzó una de sus cejas.

— Por supuesto. Y si no eres feliz... iré por ti. — asintió.

— Eres un mentiroso. — Betty río negando.

— Claro que no. — asintió. —Iré a buscarte. Y si es necesario, huiremos juntos. — señaló.

— ¿A dónde?— Betty lo observó intrigada.

— A donde no puedan encontrarnos. — se colocó tras ella para volver a columpiarla.

— ¿Lo prometes?— Betty se colocó de pie antes de que él la empujara.

Jughead sonrió y asintió.

— Hablo enserio, Juggie. — se cruzó de brazos. — No quiero... no quiero que seas como mamá.

Jughead soltó un suspiro y se acercó a ella para poder abrazarla. — Lo prometo. De verdad.

Betty soltó una pequeña sonrisa y correspondió al abrazo del chico.

Pero incluso, cuando tienes buenas intenciones, un corazón honesto y un alma dispuesta, las cosas no salen como querríamos.

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Gracias por leer. ❤ Esta es una historia Bughead pero quiero dejar bastante claro que NO actualizaré con regularidad porque además de ser una persona que mantiene un empleo de lunes a viernes con nueve horas dedicadas a él, también tengo una vida fuera y me gusta disfrutarla por lo que, pido su paciencia y comprensión, porque aún si amo escribir también amo mi tiempo para mi misma.

Además, la historia principal por ahora en mi cuenta es IN MY VEINS que si aún no la has leído quizá te gustaría pasar a darle un vistazo 😉

No pretendo que todo sea color de arcoíris... esta historia tiene varias heridas para mostrar.

Dale tu amor dejando una estrellita para este capítulo y un comentario para saber que opinas 👀❤

Yo lo agradecería.

Con 💘

Young Hearts  - BugheadDonde viven las historias. Descúbrelo ahora