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Después de ese encuentro con Taemin, el enojo que sintió cuando escucho a ese alfa minimizar a los omegas, luego el pánico al escuchar que aquel molesto omega casi lo delato hacía que se sienta sensible sin entender la razón teniendo en cuenta que siempre supo controlar muy bien sus emociones.

Por alguna razón se estaba volviendo loco por ir a verlo, quería sentirlo, su omega aullaba por él, un desespero incontrolable para que lo abrace, para que lo bese, por ser mimado un poco.

Pero sobre todo era una clara señal que ya no tenía tiempo, su rostro ya iba a empezar a recorrer los medios, debía decirle la verdad ahora, por mas difícil que sea.

Se dirigió directamente a la oficina toco y abrió lentamente captando la atención del mayor quien estaba sentado detrás del escritorio perdido en cien tipos de obligaciones.

—Solo por hoy... ¿Puedes abrazarme?— pidió dudoso, teniendo en cuenta su comportamiento en los últimos días, debía ser un descarado para ir a pedir aquello, pero se sentía como un drogadicto pidiendo un poco de su adicción.

Tenía la intención de mimarse un poco antes de que todo sea revelado.

—Ven aquí— respondió abriendo los brazos.

El omega corrió para abrazarlo se sentó sobre su pierna y al instante todo su cuerpo se relajo cuando sintió ser envuelto amorosamente con los fuertes brazos, inundándose con el aroma de su alfa.

Su omega le agradeció y sintió que volvía a vivir después de esos días difíciles.

Inhaló fuertemente ese aroma que tanto amaba preparándose para lo que sea que venga después de revelar su verdad.

Jungkook abrazó a Jimin protectoramente sintiendo su ser volver a tener vida, beso su cabeza e inhaló esa aroma que tanto extraño.

Pero la esencia de Jimin estaba mezclado con el olor de otro alfa lo que causo que automáticamente se irritara.

Sus celos y posesividad se hicieron presentes en ese instante, nublando su juicio y cuando casi empujo para reclamar al menor se controlo y apretó fuertemente la quijada.

La última vez reacciono de una manera muy violenta que lo lastimo y sobre todo fue injusto con él, tal vez esto sea algo parecido.

Jimin sintió al mayor tensarse y su agarre en sus caderas lo apretó más que dolió, se separo un poco para mirarlo— ¿qué pasa?— pregunto sintiendo un nudo en la garganta.

—Te extraño— dijo el alfa atrapando sus labios, Jimin gimió al ser tomado de esa forma tan bruta y sorpresiva, aceptaba todo lo que el alfa le estaba dando porque lo necesitaba, pero por alguna razón dolía.

Jungkook no le estaba besando como siempre, no era un dulce beso, ni amoroso y mucho menos delicado, era un beso apasionado y cruel.

Había un poco de verdad de sus palabras, lo extrañaba, desesperadamente extraño abrazarlo, su delicado cuerpo en sus brazos, sus dulces labios, lo anhelo desde que se separaron aquella noche en la casa de Yoongi, pero también era una forma de contener su actitud impulsiva y celosa, estaba cansado de preguntar y no tener respuestas, estaba enojado, después de días sin hablarse cuando regresa a sus brazos venia oliendo a otro alfa y eso lo enfurecía.

Un gemido doloroso los hizo separarse, Jimin lo miro asustado y se separo lentamente manteniéndole la mirada.

Jungkook pudo ver las lágrimas empezar a juntarse en sus ojos y quiso redimirse, fue bruto, sus manos, sus besos, y lo peor de todo es que su omega le tenía miedo, podía ver el pavor reflejado en sus ojos, y su aroma aterrado lo confirmaba.

Omega Valiente (Kookmin)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora