𝑵𝒐 𝒎𝒆 𝒎𝒊𝒓𝒆𝒔 𝒄𝒐𝒏 𝒆𝒔𝒐𝒔 𝒐𝒋𝒐𝒔 -𝓑𝓪𝓴𝓾𝓰𝓸𝓾 𝓗𝓪𝓽𝓼𝓾𝓴𝓲

ℭ𝔞𝔭𝔦𝔱𝔲𝔩𝔬 𝐼𝐼𝐼

—Disculpa Kobayashi-san; me podrias decir, ¿en qué consiste tu quirk? —preguntó apenado Midoriya.

—Claro que sí —se callo por unos segundos tratando de dar la mejor explicación posible.

—Sí, por favor —dijo mientras sostenía su bolígrafo y libreta para tomar sus notas.

—Mi quirk es flora, soy capaz de crear cualquier tipo de flora, ya sabes cualquier tipo de vegetación; en los 3 estados de la materia: líquido, sólido o gaseoso.

—Y en el entrenamiento de parejas, ¿cómo hiciste para dejar a Kirishima y a Sero estáticos? —intervino Iida moviendo sus manos como un robot.

—Ocupe una mezcla de plantas, que se llama curare. Es un veneno y lo produci en su forma gaseosa. 

—¿Curare? —pregunto confundida Uraraka.

—Veneno que produce parálisis en todo el cuerpo comúnmente usado en animales para poder cazarlos —definió Iida.

—Supongo que si se ocupa en personas puede ser muy peligroso —murmuró el peliverde mientras hacía sus anotaciones.

—Entonces eso quiere decir que tienes mucho autocontrol sobre tu quirk Kim ¡Genia! —la felicito Uraraka.

—No, no creo que sea tan genial como parece, pero a veces es útil.

—Creo que tu quirk es genial, no por nada eres una estudiante recomendada —comentó Uraraka con un brillo en su mirada.

—Bueno yo no pienso así —empezó a sonreír nerviosa—, hay dones mucho más poderosos y geniales; no como crear unas cuantas plantas —le hecho una rápida mirada a Todoroki.

❁ ❁ ❁

En esta ocasión al grupo 1-A les tocó el ensayo de rescate.

Y para suerte o desgracia de Kiyomi le tocó sentarse junto a Bakugou.

—De cierto modo me siento un poco cansada… ¡Ah, Bakugou! Si quieres puedes dormir, te despertaré cuando lleguemos —dijo alegre, mientras tomaba asiento, a su lado.

—Tsk —dijo enojado desviando la mirada a la ventana mientras se acomodaba para dormir.

—Tranquilo, puedes confiar en mí —levantó el pulgar en señal de confianza.

Después de 1 minuto:

«¿¡Enserio!? No dormí nada, estúpida flor», pensó Bakugou enojado, mientras la cabeza de la florecilla estaba sobre su hombro plácidamente dormida.

Aún así, él no hizo nada para quitarla de su hombro, ni parecía molestarle.

Otra vez ese olor, era un olor dulce, pero no empalagoso era algo...adictivo. Le recordaba al olor de una flor, por lo tanto, le puso florecilla, ya que, ni se acordaba de su nombre «¿"Kim"? Tal vez…», pensó Bakugou, recordando que así la llamaba él "pelo de mierda" y la "ojos de mapache".

—Bakugou siempre está enojado por lo que no será muy popular —dijo la chica con don de rana.

Esas simples palabras lo sacaron de su trance.

Y con una suma delicadeza, que él desconocía de sí mismo. Movió la cabeza de Kiyomi de su brazo al lado opuesto.

Todo eso para no despertarla; cosa que no funcionará después.

—¡¿Eh?! ¿¡Qué porquería de vocabulario es ese!? ¡Te voy a matar! 

Ese grito había despertado a Kiyomi quien para callar los gritos del cenizo lo agarró del brazo y lo sentó a la fuerza.

—Callate, Bakugou —dijo somnolienta; mientras volvía a poner su cabeza apoyada en su hombro.

—Ya casi llegamos, siéntense bien.

❁ ❁ ❁

Al llegar, Número 13 explico unas cosas a los maravillados alumnos de la clase 1-A. Y al terminar su pequeño discurso, los alumnos observaron una pequeña mancha negra que cada vez se hacía más grande y que al final de ella salían personas ¿Eso era parte del entrenamiento?

«¿¡Por qué estoy temblando tanto!?», se cuestionaba la pelirrosa mientras retrocedía unos cuantos pasos hasta taparse con el pecho de alguien.

Era Bakugou, quien la sujetó por los hombros y la acerco un poco más a él, notando en eso, que la flor era un manojo de nervios y tenía una cara como si estuviera apunto de llorar. 

No le gustaba para nada esa cara.

—¡Júntense en un solo lugar y no se muevan! ¡Número trece protege a los estudiantes! 

—¡No se muevan ellos son Villanos! —gritó el profesor mientras se lanzaba a por los villanos.

—Me pregunto si él aparecerá si matamos a todos estos chicos —dijo el villano cuya cara estaba cubierta por una mano.

En ese momento la nerviosa Kiyomi sintió como Bakugou la sostenía de la mano y la ponía detrás de él.

Todos estaban corriendo a la entrada para poder salir, sin embargo, los detuvo la misma aura negra.

—Me temo que no puedo permitirlo. Saludos, somos la alianza de villanos, pido disculpas, pero nos tomamos la libertad de entrar a la academia y ver si podíamos exterminar al símbolo de la paz.

En eso Kirishima y Bakugou se lanzaron a golpearlo.

—Ustedes serán dispersados, torturados y asesinados —dijo el villano mientras extendia su humo negro alrededor de todos los estudiantes.

❁ ❁ ❁

Cuando por fin pudo reaccionar se encontraba en la zona en ruinas.

—¡Aquí hay uno! 

Se escuchó el grito de una voz masculina un tanto rasposa y ansiosa.

Cuando se puso en pie se dio cuenta de que estaba rodeada por varios villanos

—Pero que linda chica, no me imaginaba toparme con una chica tan dulce y hermosa —dijo un villano mirándola de arriba abajo.

«Que asqueroso», pensó Kiyomi.

La pelirrosa alzó sus brazos, en señal de rendición, mientras mantenía un semblante de terror y miedo con unos ojos llorosos.

—No me hagan daño por favor —dijo suplicante con ojos llorosos.

Sus acciones dejaron desconcertados a los villanos, la chica se mostraba tan vulnerable y frágil que no mostraron nada de cautela, jamás hubieran pensado que se encontraban frente a frente con una de los 3 estudiantes recomendados de la UA.

Ese grito tembloroso, hizo reaccionar a Bakugou quien se encontraba dentro de un edificio en ruinas junto a Kirishima. Desde ahí se podía ver con claridad a la florecilla, quien estaba rodeada por siete villanos; ella era la que había gritado.

—¡Quien la agarre primero se la queda! —exclamó un eufórico villano sonrojado.

Sin más, todos los villanos se abalanzaron hacia ella, sin embargo, ella no se movía y seguía en la misma posición y con más lágrimas que antes.