Padre Soltero - Izuku x Nejire -

[TREINTA Y CINCO]

Nejire se encontraba realizando el papeleo en su oficina pero había algo que faltaba, Izuku aún no había llegado. Pasaron dos horas desde la hora acordada para que llegara y nada.

Nejire: ¿Se habrá dormido tarde?

Ella se comenzaba a preocupar, se decía a si misma que debió quedarse con él y así no dejarlo solo.

Nejire: ¿Se siente mejor?

Izuku: Tal vez, no lo sé.

Al final la curiosidad le ganó y se levanta de su escritorio para comenzar a salir.

Nejire: Ahora vuelvo.

Tamaki: ¿A dónde vas?

Nejire: Por un café.

Ella solo tomó el elevador dejando a algunos trabajadores en duda.

Iida: Pero tenemos cafetera.

Tamaki: ¿Cómo es que eres nuestro mejor empleado?

Nejire solo se subió a su auto para así dirigirse a la casa de Izuku, lo primero que hizo fue preguntar con Bakugo.

Bakugo: ¿Deku?

Nejire: Si, no llegó a trabajar y supuse que tal vez estaría contigo.

Bakugo: No, incluso dejó a Eri dormir conmigo y vengo de dejarla en su escuela.

Nejire: ¿En serio?

Bakugo: Él me dijo que le habías dejado un trabajo importante y debía estar solo para eso.

Nejire: ¿Trabajo importante?

Al rubio le llegaron muchas posibilidades de lo que se refería su amigo hasta que llegó a una conclusión.

Bakugo: Oh no, el R2-D2.

Nejire: ¿Qué tiene que ver Star Wars con esto?

Bakugo: Solo ve a su puerta, ten la llave de repuesto.

Nejire: Está bien, iré a ver.

Ella se fue dejando al rubio solo.

Bakugo: Oye, ¿todo está bien?

Izuku: Sí, fue un día estresante pero todo está bien.

Bakugo: ¿Cómo no me di cuenta?

Nejire después de un rato llega a la puerta de Izuku, lo primero que hace es tocar pero no recibe ninguna respuesta. Lo vuelve a intentar y nada, por lo cual usa la llave para así ingresar.

Nejire: Mid... Izuku, ¿está aquí?

No recibió ninguna respuesta, solo siguió caminando hasta que termina chocando con algo. Al ver qué era se fija que era una botella de licor vacía, seguido de eso vio otra y otra.

De forma brusca comenzó a buscar por toda la casa hasta que lo encuentra debajo de la mesa de la cocina.

Nejire: Izuku, Izuku.

El peliverde se levanta con un terrible dolor de cabeza y al ver que era Nejire quien estaba a su lado empezó a levantarse.

Izuku: Llegaré tarde al trabajo.

Nejire: Al diablo eso, usted bebió, ¿verdad?

Izuku: Si, pero solo fue una.

Nejire: ¿Una botella o una noche?

Izuku: Ambos, creo.

Nejire: ¿Por qué lo hizo?

Izuku: Me entraron las ganas de hacerlo, mi resistencia bajó después de tantos años. Ya entiendo a mí yo de joven.