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Sábado 11:30 am
Ya íbamos aterrizando en Antofagasta,la Anto durmió todo el viaje,y seguía durmiendo ,así que me toco despertarla. -Amor-. Dije moviéndola suavemente. -¿Ah?-. Respondió aún dormida. -Ya despierta,llegamos-. Reí. Abrió los ojos de un golpe y se los restregó. -Ya-. Rió de vuelta.

Al bajar del avión,hubieron niños que me reconocieron y me pidieron fotos,saludos y autógrafos. También me encontré con gente que conocía desde la infancia. Había vuelto a mis tierras. Luego de sacar todas las maletas y pasar por PDI,salimos a tomar un taxi que nos dejara en el hotel. Obviamente no le podía pedir a mi familia que me vinieran a buscar al aeropuerto porque se perdería la gracia de la sorpresa. Afortunadamente agarramos un taxi súper rápido y ya estábamos instalados en el hotel. Quedaba más o menos lejos de mi casa,así que desarmamos maletas y nos fuimos rápido para allá,con la intención de llegar a la hora de almuerzo.

-Ahora yo estoy nerviosa flaco-. Dijo la Anto tomándome la mano. -¿Ves lo que se siente?-. Le saqué la lengua. -Ya pesado,tú lloriqueaste por 1 mes entero,yo recién me puse nerviosa-. Me sacó la lengua de vuelta. Tenía razón,estuve los dos meses pasados histérico por conocer a su familia,pero como les dije antes,salió todo bien. -Aquí es ¿Cuanto le debo?-. Le pregunté al taxista. -¿Erick Pulgar?, no te reconocí-. Dijo evadiendo mis dos preguntas. -¿Podrías mandarle un saludo a mi hijo? Es muy fanático tuyo-. Agregó. -Claro-. Le regale una sonrisa y este sacó su celular para grabarme.

Toqué la puerta y nadie abrió,esperé unos segundos para volver a tocar. -VOOOY-. Escuché que gritó alguien,era la Sherry. Podía notar en la cara de la Anto que se moría de vergüenza así que acaricié su espalda intentando aliviar la tensión. -ERICK-. Gritó mi hermana lanzándose a mis brazos. -Hola sherry-. Besé su frente. -¿Que haces acá?-. Preguntó sin siquiera notar la presencia de la Anto. Cuando se percató sonrió y la saludó. -Hola preciosa-. La abrazó. -Hola-. Sonrió la Anto. -Sherry..esta es mi polola-. Presenté a mi enana.

-No te creo,al fin hermanito...pasen po-. Sonrió. Ambos entramos y noté que no había nadie en la casa. -Llegan en un rato más,fueron a comprar-. Agregó la Sherry. -Ya ahora cuéntenme todo-. Dijo sentándose. Para no alargarles la historia que ya conocen,le conté todo. -Ay anto,no puedo creer que hayas hecho todo eso por este cabro,cuídala Erick weon,mira que cualquier mina no hace eso por amor-. Me pegó un codazo. -Si se oh-. Reí devolviéndole el codazo. Me encantó que la Anto y la Sherry se habían llevado súper bien. Ahora solo faltaban los otros tres,la que más miedo me daba era la Paola,que es media celosa conmigo.

Sentí que la cerradura de la puerta giró,eran ellos. A penas entraron todos se quedaron congelados mirando hacia el sillón en donde estábamos sentados los tres. -Hijito. Mi amor-. Dijo mi mamá soltando las bolsas del súper. -Hola mamá-. Me levanté del sillón. -ERICK-. Gritaron los dos cabros chicos al unísono. -Hermanito-. Agregó el Jeans Pool. Caminé hacia ellos y los saludé uno a uno con un fuerte y cálido abrazo. -Hola mijita ¿Como le va?-. Preguntó mi mamá refiriéndose a la Anto. -Hola Tia,¿Todo bien y usted?-. Se paró del sillón y se dirigió a ella para saludarla. El Jeans la miró de pies a cabeza y me levantó las cejas. Tan mujeriego este weon. -¿Quien es ella?-. Preguntó la Paola. -Ella Pao,es mi polola-. No tenía muchas expectativas sobre cómo podría reaccionar.

-Ay que bacan,soy la Paola,¿Tú como te llamas?-. No podía creer que haya reaccionado tan bien. -Hola Pao,me llamo Antonia-. Le regaló una sonrisa. -Tienes unos ojos maravillosos Anto-. Le dijo abrazándola. Nunca me imaginé que la Paola sería tan cariñosa con ella. -Gracias Paolita-. La abrazó de vuelta. -Hola,soy el Jeans Pool,encantado hermosa-. Se acercó a saludarla mi hermano. -El gusto es mío-. Sonrió ella. -Yo soy el Cristobal-. Saludó el enano. -Encantada Cris-. Le regaló la preciosa sonrisa que tiene.

Nuevamente tuvimos que contar toda nuestra historia. Todos quedaron encantados con la historia,pero sobretodo con la Anto,la amaron y la Paola se había vuelto su regalona,pasaban sacándose fotos juntas. Todo estaba saliendo perfecto,tal cual como lo había soñado.

-Es preciosa tu polola Erick-. Dijo la Sherry mirando atentamente a la Anto. -Lo sé-. La abracé. -Hijito,cuídela mucho,vale demasiado-. Sonrió mi mamá. No alcancé a responder cuando me interrumpió el Jeans. -Si no me quedo yo con ella-. La anto rió y yo le pegué una patada por debajo de la mesa al desubicado de mi hermano.

El día se nos había pasado volando entre conversar y reír. Todos amaron a la Anto,sobre todo la vivaracha de la Paola. Había tenido un día perfecto junto a mi familia pero ya era hora de irnos. Quedamos de acuerdo para salir a almorzar mañana en la playa,a pesar de que ya no estábamos en verano,no hay nada más rico que almorzar y escuchar el sonido de las olas.

Llegamos al hotel agotados. Nos tiramos en la cama y ni siquiera nos sacamos la ropa que llevábamos puesta. Quedamos frente a frente mirándonos a los ojos. -Te dije que todo saldría bien-. Le sonreí a la enana. -Amo a tu familia Erick,gracias por todo-. Se apegó a mi y me abrazó.

Desde que te vi ~Erick Pulgar~Donde viven las historias. Descúbrelo ahora