Domingo 9:00 am -Despierta que se va a acabar el desayuno-. Sentí que me dijo la Anto mientras me sacudía como saco de papas de un lado a otro. -Amor-. Dije tapándome la cara con una almohada. -No nada de amor,dúchate y bajemos-. Siguió insistiendo. Amaba a mi Anto pero aveces se pasaba para ser hincha pelotas. -VOY-. Grité y le pegué un almohadazo. Esta solo rió y me pegó de vuelta. Me bañé lo más rápido que pude porque era verdad lo que decía la Anto,iban a quedar las cosas más malas para desayunar,y no gracias.
-Estoy listo,vamos-. Dije cuando me terminé de vestir,tomé de la mano a la anto y nos dirigimos al comedor del hotel. Aún quedaban bastantes cosas así que nos armamos un desayuno muy rico.
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Subí una historia del desayuno y recibí muchas respuestas a la historia. Me dio flojera responderlos en el momento pero prometí que después respondería uno por uno.
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Domingo 12:30 pm Entre comer y conversar,nos dieron casi las una de la tarde así que decidimos subir a la habitación para poder arreglarnos tranquilamente para el almuerzo con mi familia.
-Apúrate-. Le dije a la Anto,con la intención de molestarla y devolverle la mano. -Eres tan pesado Erick Antonio-. Me sacó la lengua. -Lo sé bebé-. Sonreí. Pasaron unos minutos y la anto me dijo: -Ya,estoy lista,vamos-. Se veía preciosa,todo lo que se ponía lo lucia espectacular,me tenía enamorado hasta las patas. -Eres hermosa-. Dije. -Gracias amor-. Me regaló una sonrisa y tomó la tarjeta de la habitación. Salimos del hotel y tomamos un taxi. -Al restaurant Macao,por favor-. Le dije al taxista. -¿Erick Pulgar-. Dijo mientras miraba por el espejo. -El mismito-. Reí. -Eres un grande,te admiro mucho-. Continuó hablando. -Muchas gracias-. Sonreí. La Anto también tenía una sonrisa en su cara,cuando me miró,pude notar en sus ojos lo orgullosa que estaba de mi.
[....] -Son 3.500 pero por ser Erick Pulgar se lo dejo en 3.000 nomas-. Dijo el taxista amistosamente. Obviamente no dejaría que me cobrara menos por ser un futbolista "reconocido",debería ser al revés,así que le pagué 5.000. Se fue con una sonrisa de oreja a oreja y yo me fui satisfecho por haberlo hecho aunque sea un poquito feliz. -Que eres lindo Erick,no sabes cuanto te admiro-. Dijo la Anto mientras íbamos caminando hacia el restaurante. -Te amo enana-. Apreté su mano.
Al llegar,ya estaban todos,solo estábamos faltando nosotros. Luego de lo eterno que se hace saludar persona por persona,nos sentamos a esperar a que nos atendieran. -Ay Erick Pulgar-. Dijo la mesera acercándose a la mesa. Otra vez no,dije en mis pensamientos. -Hola-. Sonreí. -¿Nos podemos tomar una foto?,al tiro les tomo su orden,habló refiriéndose al resto. Todos asintieron y yo me paré para que nos sacáramos la foto. En vez de ser una foto,terminaron siendo como cien,prácticamente el 90% de la gente que estaba en el lugar se acercó a la mesa a felicitarme y a pedirme fotos o cosas así. En ningún momento fue una molestia para mi ya que amaba que pasaran estas cosas,sobretodo en mi Antofagasta querida.
Terminamos de comernos nuestros platos y llegó la hora del postre,la única que no quiso nada fue la Anto. Esta niña tenía el estómago del porte de una hormiga o qué. -¿Amor te dejo un poquito del mío?-. Le dije. -No amor,tranquilo-. Sonrió. -Mijita,usted no come nada-. Rió mi mamá. Todos reímos al unísono. -Por eso teni ese físico envidiable,desgraciada-. Dijo la Sherry tirándole un beso. La Anto solo río. -Tu igual eri regia tarada-. Le devolvió el beso. Todos reímos por cómo se trataban,aunque fuese de cariño era muy chistoso.
-¿Van a pasar a la casa...o se van?-. Preguntó la Paola haciéndole ojitos a la Anto. La cual me miró a mi esperando a que yo respondiera,tan linda. -Ya oh,vamos un rato-. Ambas gritaron y la Anto tomó en brazos a su regalona. Lo que más risa me daba de todo el asunto,es que la Anto tenía 11 años mas que la Pao y la pasaba como por 5 centímetros. Parecían hasta de la edad.
Al llegar a la casa,nos sentamos todos en la terraza a conversar. -Anto,Anto,Anto-. Dijo la Pao. Con que iba a salir hora esta cabra chica. -Dime guagua-. Respondió la Anto. -¿Hagamos una sesión de fotos?-. Preguntó. -Bueno enana,vamos. Permiso chicos,vuelvo en un ratito-. Nos dio una sonrisa a todos. Estuvieron sacándose fotos como por 20 minutos. Yo solo las miraba y me reía. Mirando a la anto,me di cuenta de que sería una súper mamá si llegásemos a tener hijos en un futuro cercano. -Volvimos-. Gritó la Pao.
-Oigan..y ustedes..¿Piensan ser papás?-. Preguntó el Jeans. La Anto soltó una risa. -Si,en algún momento-. Respondió mirándome para ver mi reacción. -Si fuera por mi,yo tendría ahora,pero depende de la señorita-. Solté sin miedo al éxito. En una de esas se animaba. -Cuando se sientan preparados mis niños-. Agregó mi mamá. Ambos asentimos.
El día se nos pasó volando y ya íbamos de vuelta al hotel. -Es tan linda tu hermana-. Dijo la Anto. -Nunca esperé que fuera así contigo,es súper celosa conmigo-. Me encogí de hombros. -Es que,yo soy bacan po-. Rió. -Muy-. La besé tiernamente. -Llegamos,serían...4.000-. Dijo el taxista. Casualmente nos llevó el mismo que nos había llevado a la ida. -Muchas gracias-. Bajamos ambos del taxi y entramos al hotel.
-Amor en serio amo a tu familia-. Dijo la Anto tirándose a la cama. -Son bacanes ¿O no?-. Me tiré al lado de ella. -Yyy..sobre lo de tener hijos-. No me dejó terminar cuando dijo: -Si quiero amor,cuando tú quieras empezamos a practicar-. Rió. -¿De veras?-. Pregunté sorprendido. Nunca esperé que quisiera tan pronto porque aún era súper joven. -Si es contigo,si. Pero,sigo con el efecto de la inyección ya que la otra dosis me tocaría si no mal calculo..el próximo mes. Así que,no me la pongo ¿verdad?-.
-No po,¿Entonces ahora podemos sin..?-. Fue lo único que atiné a preguntar. La anto se largó a reír y asintió. -Aleluya señor Jesús-. Dije riendo. -Tonto-. Me dio un codazo. -Tonto y todo,te tengo loca-. Le devolví el codazo. -No lo niego wachito rico-. Se dio vuelta y quedó encima mío. No se demoró ni un segundo en juntar nuestras bocas,se venía una larga noche..