Por el corazón de Amanda

Epilogo 6

El destino actuaba de modo muy misterioso, pensó Amanda mientras veía caer la tierra sobre el sobrio ataúd. Julia había fallecido en la madrugada , en paz y en silencio con su buen amigo a su lado, Amanda sentía que había aguantado solo para verla una vez más, y después abandonó su sufrimiento en paz.

No podía evitar sentirse algo triste , ni una sola  alma debería  despedirse de este mundo en tan triste soledad, pero por otro lado le daba alegría saber que esa pobre mujer supo que la había perdonado.

Una ligera brisa movió la falda de su sobrio vestido negro, haciéndola tiritar un poco, de inmediato siento los fuertes brazos de su padre rodearla para compartirle un poco de su calor.

-Gracias Julia- dijo Jared en un susurro que solo pudo escuchar su hija, Amanda lo miro extrañada sin entender del todo - gracias por darme a Amanda- término mientras abrazaba más fuerte a la chica.

Emily se acercó al otro lado de Amanda y dejó caer una sobria rosa blanca en la tumba.

-Descansa Julia- dijo despidiéndose de esa pobre alma, pidiendo para ella el descanso y la gloria eterna.

El sacerdote terminó el sencillo oficio, solo estaban la familia Brown y el señor Peyton, y tan pronto terminó se despidió de los dolientes y los dejo a solas.

-Descansa querida, te veré pronto- dijo el señor Peyton mientras derramaba un poco de brandy sobre la tumba , un viejo gesto romaní que hizo sonreír a Amanda , nadie creería que el sobrio señor Peyton tuviera algo de sangre gitana en sus venas.

-Creo que es momento de retirarnos- dijo Emily mirando al señor Peyton - tomaremos la diligencia esta tarde para regresar a casa.

- Ha sido un placer Señor Peyton, si algún día va a Bluetowns , será bienvenido en nuestra casa- se despidió Jared con un apretón de manos.

-Muchas gracias Señor Brown, señora - dijo haciendo una suave reverencia a Emily - aunque creo que un alma vieja como yo ya no puede esperar más aventuras, solo me queda esperar el momento de reunirme de nuevo con mi querida amiga- dio una última mirada a la tumba antes de dar la vuelta y salir del cementerio en compañía de los Brown- si me permiten tengo algunas cosas que entregarles, Julia dejo algunas instrucciones  para sus objetos personales y su deseo es que los recibiera usted señorita Amanda.

-No es necesario señor Peyton- hablo rápido Amanda un tanto apenada.

-Por favor- suplico el señor Peyton- es lo último que le pedire.

Amanda miro a sus padres buscando un consejo y estos asintieron en apoyo, salieron en silencio del pequeño cementerio y se dirigieron de nuevo a la residencia del señor Peyton.

Julia le había dejado todas sus joyas , que eran bastantes, así como algunos enseres, muebles y algunos miles de dólares que se resguardaban en el banco;  era tanto que Amanda se sintió abrumada.

-No puedo aceptar todo esto- sollozo aferrada a su madre cuando la situación la sobrepasó, Jared entendió la mirada de su esposa y las había dejado solas.

-Cielo si es lo que quieres, no ti nes que aceptar banda que no quieras- la tranquilizó su madre - pero debo ser muy honesta contigo , esas joyas pueden darte la oportunidad de una mejor vida , se que tú padre nunca te lo haría saber , pero la vida no siempre es fácil , a veces las cosechas no maduran y el ganado no crece lo suficiente, tener un respaldo económico es algo con lo que pocos pueden contar- limpio sus lágrimas con delicadeza- no te sientas mal por recibir algo así ,estoy segura que Julia lo hizo de corazón, te da una oportunidad en la vida.

Amanda intento calmar los sollozos y medito las palabras de su madre , tenía mucha razón, ese dinero podría ayudar de muchas maneras , podría pagarle la educación a sus hermanos, podría ayudar a su padre , había mucho en lo que podría ayudar.

-Además, podemos usarlo para tu ajuar- le sonrió Emily- cuando uno se casa es bueno estar preparado.

Amanda asintió para no seguir llorando, su madre no sabía lo que había pasado con David y no quería preocuparla , ya habría tiempo para hablar del tema. Con un último abrazo Amanda acepto lo que Julia había dejado para ella.

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David se sentía vacío por dentro, sentía como si le hubieran arrancado el corazón con una cuchara.

Unos días atrás había regresado tarde a su casa para encontrarse con la sorpresa de que los hijos menores de los Brown pasarían unos días con ellos, al parecer el señor Brown , su esposa y Amanda , habían salido de improviso del pueblo y le habían pedido a sus padres que cuidarán a sus retoños.

David no se sentía muy feliz con esto, no soportaba a los gemelos después de tantas travesuras pero debía admitir que de habían comportado bien hasta el momento, todo había estado en relativa calma el primer día hasta que los escucho hablar del motivo del viaje de sus padres.

-Espero que Amanda este mejor- dijo Jake  a su gemelo mientras ayudaban a la señora Geller a recoger el patio trasero- se veía algo triste cuando se fueron.

-Claro qué va a estar bien - contestó Alex presuroso- mamá está con ella.

-Ya se , pero es una ciudad extraña , y de seguro más grande , podría asustarse- dijo Jake muy serio.

David intentó no meterse en la plática pero al escuchar el nombre de Amanda no pudo evitarlo.

-¿Amanda está bien ? - pregunto serio a los niños que se encogieron un poco al verlo, se supone que no debían hablar del motivo del viaje de su hermana, aunque sus padres no les habían dicho mucho les pidieron que no lo comentaran con nadie.

Los chicos de pusieron algo nerviosos sin saber que decir, pero afortunadamente alguien llegó a salvarlos.

-Amanda fue a conocer la escuela de Lucy- dijo una vocecita cerca de ellos, Sophie se había acomodado cerca de ellos y leía un pesado libro- está pensado ir a estudiar con Lucy un tiempo.

-¿Irse ?- dijo David horrorizado - No puede irse.

-Mamá dice que es un buen lugar para prepararse y conseguir un buen marido- dijo Sophie como no queriendo la cosa y mirando fijamente al joven soltó- Amanda puede conseguir un buen matrimonio ya que no está comprometida con nadie.

David sintió como si hubiera recibido un golpe en el estómago y por un momento se quedó sin aliento, a su mente regresaron las duras palabras que le había dicho a Amanda. Había sido el enojo quien había hablado , un orgullo herido pero no dejaba de horrorizarse al pensar en perder a Amanda.

Desde esa plática , David había estado totalmente decaído, hacia las cosas sin pensar demasiado y actuaba mecánicamente, no dejaba de pensar en lo imbécil que había sido, Amanda era el ser más maravilloso del mundo , ninguna chica podía compararse con ella, cualquier hombre sería afortunado de tenerla a su lado.

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Esa noche regreso tarde a su casa , había ido a llevar un encargo de su padre y cuando regreso ya había cerrado el almacén.

-¿Eres tú David?- lo llamó su padre cuando entró a  la trastienda - ¿Cómo te fue ? .

-Bien padre-contestó el joven - conseguí todo lo que me pediste- le dijo mientras veía a su padre acomodar las últimas mercancías.

-Ve a descansar hijo- le dijo su padre- tendrás toda la habitación para ti solo - dijo el hombre mayor con una sonrisa.

-¿Solo? ¿Y los gemelos ?- pregunto extrañado , los últimos días había compartido su habitación en el ático con los pequeños Brown.

-Brown vino por ellos hace un par de horas- contestó su padre tranquilamente.

-¿Ya regresó? ¿ Todos volvieron?- pregunto ansioso , quitándose por completo la pereza del cuerpo.

-Pues claro que todos volvieron , la señora Emily y Amanda venian con el- dijo el señor Geller como quien no quiere la cosa- ve a atender a tu caballo para que descanses.

Y sin decir más dejo a su hijo solo con sus pensamientos.

Sin pensar realmente en la hora que era, David salió de prisa de su casa y tomó camino hasta la granja Brown, tenía que verla lo más pronto posible.