Breaking the Mask: The Damn Secret (Hyunknow)

Capítulo 44: Estúpido o ciego.

— ¿Me estás diciendo que un Arcángel con ayuda de nuestro profesor de astronomía, confundieron un espíritu antiguo del infierno y lo adhirieron a Minho, que es hijo de uno de los príncipes del infierno? — Preguntó Chan, la palidez de su cara haciendo juego con su expresión de horror —

La respiración de Minho se agitó, comenzó a caminar alejándose de las sillas cómodas donde los demás estaban sentados bajo la mirada atenta de todos.

Podía recordarlo, las clases, los comentarios amables, las veces en que el profesor Madok se detenía un momento en los pasillos para hablar con él. La traición le estaba golpeando como nunca antes

Su espalda ardió, pero Minho no hizo ni una mueca, solo llevó sus manos hasta su cabello, tirando de éste con violencia mientras sentía el enojo cubrir sus venas, viéndose negras y aterradoras en el lugar donde estaban

— ¡Fue en la enfermería! — Gruñó Minho de forma agresiva mientras caminaba en círculos, sus dientes fuertemente presionados — Cuando toda esta mierda comenzó, me desmayé en la escuela, seguramente allí tomó mi sangre —

— Ese bastardo — Dijo Felix en voz baja, su boca abierta en una perfecta "O" —

— Todo este maldito tiempo, él lo supo, él fue el culpable — Murmuró Minho con voz entrecortada, el suelo reflectante bajo sus pies crujió, las grietas abriéndose paso por el material, rodeándolo lentamente —

— Minho... — Comenzó Jisung con un toque de advertencia mientras se levantaba, Minho negó con la cabeza de forma frenética —

— ¡Es su culpa! — Gritó con fuerza, su piel adquirió un tono rojizo brillante y sus ojos cambiaron de nuevo a esa aterradora mezcla de rojo con negro. La estrella viéndose agresiva en ellos —

Los príncipes del infierno se levantaron al ver la reacción de Minho. Éste volvió a gritar mientras sentía algo rasgar lentamente su espalda, las gotas de sangre oscura y espesa bajando por ella, manchando su camisa húmeda

— Minho, necesitas calmarte — Dijo Hyunjin con las palmas extendidas acercándose a Minho con seguridad. El metamorfo alzó una de sus manos hacia él cuando lo escuchó —

Miles de susurros, gritos, lamentos y súplicas. Llantos de dolor mientras gritaban su nombre, pidiendo que se detuviera. Pudo sentir los latidos que se expandían por las paredes rocosas, calientes y frías del infierno

Pudo sentir los gritos de regocijo de los demonios al sentirlo cerca. Todos, gritaban su nombre

— Aléjate — Le dijo a Hyunjin mientras cubría sus oídos con las manos, aquellos sonidos desgarradores, los latidos y el recorrido de los ríos de sangre y almas perdidas, todo estaba grabándose en su cerebro —

Minho volvió a gritar cuando su espalda volvió a rasgarse, el dolor expandiendo las venas negras que subían por su cuello.

— ¡Alejate! ¡Voy a lastimarte! — Le gritó a Hyunjin cuando éste volvió a acercarse con preocupación, su piel estaba ardiendo y había un extraño halo de energía a su alrededor. Esa energía parecía repeler a los presentes, no quería lastimar a Hyunjin —

— ¡Minho! — Gritó Changbin cuando Minho cayó de rodillas en el suelo gritando, las voces volviéndose cada vez más fuertes, los latidos de las paredes acelerándose al mismo ritmo de su corazón —

¡Minho! ¡Minho! ¡Minho! ¡Minho!

Eso era todo lo que escuchaba, el llanto desgarrador de mujeres y niños, hombre gritando por las torturas. Pudo escuchar los gritos de las personas clavadas en cruces de madera mientras aquellas aves monstruosas y negras les clavaban su pico mortal por toda la eternidad, prolongando su estadía en el noveno círculo del infierno.