Breaking the Mask: The Damn Secret (Hyunknow)

Capítulo 17: Bomba de tiempo.

Minho realmente hizo mucho esfuerzo ignorar aquella voz y dormir con normalidad, lo logró a pesar de tener cada uno de los vellos de su cuerpo erizados. ChangBin llegó un rato después de haber pasado un rato con los otros individuos que habitaban en el departamento explicándoles algo que ni el podía entender

 MinHo había cambiado, normalmente no se enojaba con regularidad o por lo menos no lo hacía de forma seria, solo pequeñas discusiones que no llegaban a ser realmente fuertes, pero últimamente MinHo estaba muy irritable con las demás personas, la desaparición momentánea de Chan y las demás cosas que sucedieron terminaron por alterarlo

Se quedó dormido luego de haber observado a MinHo por unos pequeños momentos, estaba realmente preocupado por lo que le pasaba a su amigo al igual que Chan. La diferencia es que el mayor de cabellos plateados si estaba enojado y dolido, eso también lo mantenía inquieto, no quería que hubiera un problema familiar durante su estadía en la casa de los vampiros.

Esa mañana, todo fue demasiado rápido, y muy aterrador, básicamente la bomba de tiempo había comenzado la cuenta regresiva antes de estallar

MinHo reaccionó al día siguiente muy temprano, estaba sentado en medio de la cama, era un poco extraño porque se supone que debería estar recostado, pero no le tomó mucha importancia ya que pensó que había sido un reflejo o movimiento inconsciente mientras dormía. 

Se levanto con un dolor leve en la espalda dispuesto a darse un baño para comenzar con su rutina, pero algo llamó su completa atención, era una mínima mancha, super pequeña, como un rastro de aquel espeso líquido carmesí que ya empezaba a ver normal gracias a la cocina de los Vampiros, la sangre resaltaba un poco sobre las pulcras sábanas grises. 

MinHo frunció el ceño y las sacudió un poco para ver si habían más manchas y efectivamente había algunas más pequeñas, era un pequeño rastro. Se revisó el cuerpo rápidamente buscando el origen pero no lo encontró, no tenía ninguna herida visible

Instintivamente se llevó una mano al cuello, pero tampoco había nada. Por lo que aún extrañado se dirigió al baño, luego les preguntaría a los chicos si sabían algo acerca de eso

En el baño lo primero que hizo fue ponerse frente el lavabo sin mirar al espejo y abrió la llave para tomar un poco de agua entre las manos, y mojar su cara. Después de dicha acción volteó a ver al espejo por primera vez esa mañana, ahí se dio cuenta y abrió los ojos sorprendido y horrorizado.

El rastro de sangre en la cama venía de sus manos, las puntas de sus dedos estaban destrozadas, habían algunos dedos que ni siquiera tenían uñas, estaban a carne viva. Se alejó estupefacto del espejo aún viendo sus manos destrozadas, hasta que chocó con la puerta del baño. El frío de esta lo hizo reaccionar y salió corriendo hasta ChangBin al que removió con fuerza aún sin soltar ninguna palabra, congelado del miedo.

ChangBin despertó agitado y alerta dispuesto a preguntar que diablos pasaba sin embargo, un grito fuerte lo interrumpió, así que volteó a ver a Minho asustado. El mayor se sorprendió al ver los ojos del metamorfo cristalizados y su cabello azul así que aún más asustado y con la piel translúcida salió de la cama corriendo velozmente hacia al lugar de donde provino el grito, seguido por un aturdido y asustado MinHo

 Fueron escaleras abajo y lo que encontraron los dejó estupefactos; el grito provenía de WooJin, que estaba viendo fijamente la pared del costado de la sala, la más grande. A su costado estaba Chan igual de consternado que su novio, los demás también estaban presentes, Seungmin y Jeongin sobre sus cabezas

A pesar del sonido de sus pasos que advertía sus presencias, ninguno volteó a verlos, y con justa razón. 

MinHo y ChangBin también quedaron observando lo mismo que los demás. La pared de la sala había sido completamente despejada, el televisor que anteriormente estaba colgando de ella estaba destrozada tirada cerca de la cocina, los cuadros corrían con la misma suerte, pero lo que más daba terror era el hecho de que en la pared habían cientos de palabras escritas