capítulo 8

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Otro día más acá.

No sé cuánto pasó, pero en definitiva hace un re frío, Lorenzo tenía razón. Manotee la frazada de Nicole y me la puse encima.

—Me hubiese traído una cobija al menos —digo para mi mismo. Anoche cuando fuimos a patrullar con Harry encontramos unas cobijas pero las dejamos ahí, se supone que nadie tiene que saber que estuvimos ahí.

—¿Dijiste algo? —me pregunta la rubia mal teñida.. tendríamos que teñirla de nuevo.

—Nada, tengo frío nomás.

—Aww, ven aquí. Te mantendré caliente —iba a tirar un comentario pero siguió hablando— ¡Este es el servicio especial de Judy exclusivo para ti!

Camina hasta donde estoy con los brazos abiertos y me abraza con fuerza. Y la verdad tiene razón, se siente calentito.

—¡Ohmaigo! Tus servicios son mejor que las frazadas estas llenas de mugre... podríamos quedarnos así toda la noche.

—Bueno, ¿podrías soportar esto toda la noche?

—¡AHH HIJA DE PUTA! —la forra puso du mano helada en mi nuca. Peleamos un toque e hice que deje de hacerme eso diciéndole que iba a hacer lo que ella quisiera.

Y me mandó a patrullar la muy gila.

Hoy le tocaba con Sue así que acá estamos los dos patrullando a las nueve de la mañana.

Algunos de los pibes ya se fueron a lo que sería el centro de la ciudad a buscar comida porque ya estamos que nos comemos entre nosotros y no en la forma que me gustaría.

—Oye, es nuestra primera vez siendo compañeros —pensé que Sue era callada así como Ethan pero enseguida empezamos a hablar de todo.

Es muy minuciosa en lo que sería la parte de la búsqueda de cosas para usar o para ver si hay algo que tengamos que arreglar. Se me re hace que era la delegada de su clase.

Y para nuestra suerte o desgracia, no había nada para reportar.

Escucho unos pasos y veo a Ethan cerca de nosotras. Cuando me mira le sonrío porque acá es clave mantener las amistades. Al principio me daba un toque de cagaso porque el flaco anda de acá para allá con un bate de fierro lleno de sangre y para colmo apenas habla.

Aunque bueno ahora que lo conozco mejor sé que es un pancito que le arranca la cabeza a los muertos.

—Todo bien de este lado, ¿tu patrulla qué onda?

—Estuvo bien —contesta como cuando volvíamos de las excursiones de la escuela y la pregunta del tp es "¿cómo estuvo el viaje? Responde brevemente" y mira para la ventana.

—No te preocupes compa, ya van a venir —seguí su mirada hasta la pierna de salida principal e intenté animarlo. Aunque no hable se le nota que está ahí medio preocupado.

—Estoy seguro de que lo harán. Siempre lo hacen.

—Sí osea, es el equipo perfecto. Onda, está el comelibros que se sabe todas, el malote que tiene una tubería más grande que yo... —me río y le golpeó el hombro con el mío, puedo ver cómo sonríe pero casi no se nota.

Y ante de seguir hablando veo que los pibes entran por el portón del patio con cara de que acaban de ver a un muerto.. ahre

Igual si estaban re cagados, entraron y yo corrí hasta la puerta del salón para abrirles.

—¿Qué les pasó? —pregunto a Ethan antes de abrir la puerta.

—¿Qué pasa? ¿Ocurrió algo? —pregunta Jay mirándolos preocupado. Están los tres jadeando e intentando recuperar el aire.

Si Mati fuese el protagonista de dangerous fellowsDonde viven las historias. Descúbrelo ahora