The end of the world | Jean Kirschtein

09: A través del viento.

09

La noche antes de la contraofensiva: "A través del viento."

Todo se veía en calma, la muralla Sina estaba completamente tranquila. Podías observar a las personas con ropa sumamente cara. A las mujeres con sus largos vestidos y paraguas cubriéndose del sol sujetadas del brazo de un hombre. A algunas amigas ancianas paseando, incluso a los niños salir de la escuela. Ya habían pasado dos días desde la tragedia y ahora Selene caminaba a la casa Jones, para dar la triste noticia. Miraba el cielo azulado tratando de meditar como daría la noticia, pues no sabía cómo iba a poder dar la cara. Si tendría el valor suficiente. Tardarían un par de días para dar los nombres de quienes murieron y de algunos su familia quizás ni tendría sus cuerpos. De esa forma ella quería darles la noticia con la carta que Chloe le había preparado a sus padres.

Se detuvo en una gigantesca casa, era de dos pisos y por fuera estaba pintada de azul pastel y blanco. Una puerta grande blanca esperaba a que ella la tocara. Observo el segundo piso y no pudo evitar mirar esa ventana de la cual sobresalía una fina cortina blanca. Pero lo que más la conmocionó fue el reflejo de Chloe sonriendole atráves de la ventana. Negó con la cabeza y camino hasta la puerta. Allí suspiró, aún podía oír la voz de su mejor amiga en su cabeza, o más bien sus últimas palabras. Aún en ese momento lleno de caos pudo sentir el calor que le transmitió cuando tocó su mejilla. Y como así en sus últimos momentos nunca dejó de pensar en Marco, en su amor tan puro e inocente, lleno de personas interviniendo en el. Incluso podía recordar su última conversación, donde ella le había dicho que buscaría la libertad como se la llevaba el viento.

Suspiró y pasó sus manos por su larga pollera intentando tranquilizarse. Simplemente cuando obtuvo el valor con sus dedos corazón e índice golpeó la puerta dos veces. En menos de un minuto la inmensa entrada de la casa fue abierta por una mujer rubia. Selene quedó anonadada, era igual a Chloe, era su versión adulta. Supo rápidamente que se trataba de su madre. La esplendida sonrisa y el porte de paz que transmitía era igual de como su mejor amiga la había contado esa tarde llena de sol en la que hablaban debajo de un árbol. La mujer frente a ella la analizó de pies a cabeza. La señora Jones había pasado su vista por su camisa mangas larga blanca perfectamente abotonada; luego por su larga pollera verde y por último en sus botas marrones de cuero para volver a conectar con sus ojos. No podía soportar saber que pronto la sonrisa que portaba pronto la vería desvanecer.

— Dejame adivinar.— no solo su porte era dulce, si no que su voz también lo era.— Eres Selene Jeager, con esos hermosos ojos celestes cristalinos podría reconocerte de aquí hasta Rose. Mi hija siempre habla de ti. Ven entra a casa.— con delicadeza la mujer tomo su mano y la adentro a la inmensa casa. Todo en ella era demasiado caro, la llevo hasta lo que suponía que era la sala de estar y se sentó a su lado en el sillón.— No puedo creer que te tenga aquí, no veía la hora de conocer a la tan famosa y brillante Selene. Sos la inspiración a seguir de mi hija. En toda las cartas que nos envía siempre habla de ti, es una lástima que se tengan que separar ahora, pero se que se seguirán comunicando. Que raro que no hayas venido con ella. ¿Cómo está? Desde su graduación no hemos hablado más.

Selene bajo la mirada, durante todo el camino se había mentalizado para hacer esto, pero ahora simplemente no podía. No podía romper las ilusiones de esa adorable mujer. Aún así se levantó de sillón y se paró firme frente a la mujer. Su mano derecha con el puño cerrado fue a su corazón y la otra la dejó por detrás de su espalda. Había venido con una intención y estaba decidida a hacerlo. Porque estaba segura que así lo hubiera querido la pequeña rubia, ella querría que diera la noticia a sus familiares. En eso recordó la conversación que tuvieron bajo la lluvia en donde ella liberó a todos los monstruos que la atormentaban. El día en el que Chloe Jones puso absolutamente toda su confianza en ella, Selene Jeager. Por eso era ella la que debía darle el descanso eterno que necesitaba, ella se lo diría su familia y de esa forma ella estaría en paz y se iría a disfrutar de su libertad.