The end of the world | Jean Kirschtein

11: La titan de ojos azules.

11

57° expedición más allá de las murallas: "la titan de ojos azules."

Sus nervios se notaban a kilómetros si la conocías, tan solo en sus movimientos podías darte cuenta. La forma en la que sus manos agarraban fuerte las correas del caballo, como parecía estar completamente perdida en sus pensamientos, incluso cuando no bromeo con Sasha y Connie. Cualquiera se daría cuenta de lo nerviosa que estaba. Pero ella no estaba nerviosa por los titanes, ella estaba nerviosa por su hermano. Si la operación salía mal y Eren mostraba que no era útil, los de la policía militar lo matarían. Y Selene no quería quedarse sin hermano. A su lado Armin la miraba con cierto temor, nunca en su vida había visto a Selene con ese grado de nerviosismo, ni siquiera cuando Eren le había contado una historia de terror y no podía dormir en las noches. Era sumamente distinto, ella no dejaba de temblar.

— No te preocupes.— dijo Armin apoyando su mano en la de Selene.— Eren estará bien, esta con el equipo élite y el soldado más fuerte de la humanidad.

— Aún así no puedo quitarme los nervios. Si la expedición sale mal será el fin de Eren. Y aunque es un poco pronto para salir, es nuestra primera expedición.— suspiró.— dime Armin, ¿En verdad estamos seguros luego de lo que paso con los titanes para experimentos de la líder Hange? Porque yo no lo creo, si no, más bien esta es una expedición de prueba. Al cejotas no se le escapa nada, y te puedo asegurar que trama algo. Solo nos falta averiguarlo. Es un hombre muy inteligente y se que no arriesgaría a Eren por algo tonto. ¿Qué es lo que descubrió? Todo esto es una locura.

— Tienes razón, pero lo más probable es que lo descubramos cuando salgamos. Lo mejor será dejar nuestra mente en blanco.— le sonrió.— regresemos con vida, Sele.

Selene le devolvió la sonrisa y miro decidida al frente, busco con la mirada a sus amigos. Con la primer persona que cruzo miradas fue con Connie, el cual se llevó una mano a la cabeza y fingía que se peinaba, río un poco y le sacó la lengua. Luego observo a Sasha que estaba muerta de los nervios, quería alentarla pero estaba muy lejos como para hacerlo. Y por último sus ojos celestes se cruzaron con esos extraños ojos marrones con amarillos de Jean. El chico le sonrió y le asintió con la cabeza, tratando de demostrarle que todo estaría bien. Selene imitó el gesto y después beso la pulsera que le había regalado su hermano buscando la suerte. Se asombró un poco al ver a la señora Jones despedirse de ella entre la multitud, le devolvió el saludo con emoción. No sé veía del todo bien, pero los ojos marrones brillaban un poco más del día que se fue dejando la noticia.

— ¡Empieza la 57 expedición más allá de las murallas! ¡Adelante!

Con la indicación del comandante salieron de la muralla Rose, así entrando en territorio de la muralla María, del que un día fue habitado por personas hasta que el caos sembró en esas tierras. Pasar por las casas destruidas como si fueran habitadas por fantasmas le causo causó escalofríos. Saber que en algún momento tendrían que regresar a Shiganshina le daba mucho temor, aún debía prepararse para ese día. Sus ojos solo miraban el frente, sabía que se pondría nerviosa al ver a soldados intentando acabar con los titanes. Y aún mentalmente no estaba preparada para ver a nadie morir.

Cuando finalmente se apartaron de la ciudad se separaron y entraron en territorio de titanes. Selene no estaba detrás de todo pero si lo suficientemente cerca, por lo que debía estar alerta de los titanes. En cuanto pasaban los minutos Selene se empezó a alertar, hacia bastante tiempo no veía señal de humo roja, era un hecho imposible. Se suponía que estaban en territorio de titanes, de ser así ¿por qué no había señal de alguno? Trato de mantener la mente concentrada en todos lados hasta que sintió unas fuertes pisadas detrás de ella. Y en cuanto se dio vuelta logró ver a un titán rubio, parecía ser una mujer y pudo notar como había lanzado a una persona por los aires.