Nos dicen de pequeños que los lazos mas fuertes son los que tienes con tu familia, pero ¿Qué sucedería si ese lazo es lo que mas deseas destruir?
Adrien era un chico que paso la adolescencia deseando algo que se le era prohibido, mientras que Marine...
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Mesonge
—Celos de hermano mayor.
—¿Eh? —parpadee varias veces al escuchar su respuesta—. ¿Que...?
Por un momento, pensé que saldría corriendo a un lugar muy lejano donde no seria capaz de alcanzarlo. Sentí que volvería a perderlo si no lo sujetaba entre mis manos. Volvería a perder la oportunidad de tener a mi hermano de regreso. Pero sus palabras me descuadraron mi pensar, como si algo dentro de su respuesta no calzara del todo en mi mente.
—¿Celos de hermano mayor? —lo mire incrédula, mientas el sonreía indiferente. Podía verlo en su mirada—. ¿Qué diantres significa eso? ¿De verdad esperas que me crea eso? En primer lugar... —lo señale con el índice—. ¡Ni siquiera te has comportado como uno!
—Puedes verlo como "Oh, Adrien. Eres un hermano sobreprotector" —cito, alzando sus hombros sin preocupación.
"Hermano" los huevos que no tengo
Se alejo unos centímetros de mí, guardando ambas manos en el bolsillo de su pantalón.
—Es tal y como dijo Luka —comento, tratando de desviar mis reclamos—. No queríamos que nadie se te acercara y te hiciera llorar como la bebe sentimental que conocemos. Eres demasiado ingenua y sensible para aguantar que jueguen con tu corazón, Marinette.
Lo mire extrañada. Algo dentro de mí, me decía que había una pieza que estaba perdida en este inmenso rompecabezas. Sin embargo, si Adrien no me la iba a entregar... no había mucho que hacer. Secretos entre nosotros siempre habrá, aunque volvamos a ser esos hermanos unidos cuando éramos niños las cosas no serian fáciles. Adrien era alguien quien mentía con esa sonrisa encantadora en su rostro.
En el fondo... no era muy de fiar, siempre escondiendo lo que de verdad siente.
¿Qué ocultas, Adrien...?
—¿Qué es lo...? —no pude terminar. Pero los primeros segundos de mi silencio no se debieron a su continuación. Fue por lo que estaban viendo mis zafiros en este momento.
Esa sonrisa... otra vez
Una sonrisa vacía y sin sentimientos de por miedo. Buscando esconder lo qye pedía a gritos su corazón. La imagen de mi hermano mayor en el pasado estaba frente a mi y no me gusto para nada.
—Herma... —mi voz se escucho cortada y llena de temor.
—Eso es todo, Marinette —me interrumpió, evitando que prosiguiera. Como si fuera intencional, desviando su mirada por un corto segundo. Luego, simplemente volvio a conectar sus esmeraldas con mis ojos y sonrió de aquella manera que nunca me había gustado—. Esa es la verdad. Ya no es necesario que busques más allá, donde sabes que no puedes llegar —una sonrisa torcida e indiferente, junto a palabras que llevaban nuevamente a un distanciamiento entre nosotros. Llenas de mentiras y protección al mismo tiempo. Una sonrisa que odie desde pequeña y que sigue torturándome hasta el día de hoy.
