•4•
Blanca y fresca. Así veía la nieve que caía en pequeños copos.
Una taza de chocolate caliente reposaba en mis manos mientras observaba la nieve desde la ventana de mi cuarto.
Un poco más de un mes había pasado desde la noche que admití estarme enamorando de Caín. Un mes en los que mis sentimientos se hicieron más intensos, al punto de que ya no era necesario fingir que no sentía nada, cuando mi amor por él brotaba de mis poros.
Pero todo no es tan fácil.
Aún seguíamos siendo amigos, no habíamos dado el siguiente paso, ya que, él sabía lo que sentía pero solo se burlaba.
Si, muy cruel.
Quisiera decir que me aleje cuando eso paso, pero no, no pude y no quiero.
La pantalla de mi celular se iluminó con una llamada, el nombre poniendo mi corazón a latir rápido.
—Hola —conteste con el celular pegado en mi oreja.
—Claire, necesito que salgas de casa ahora —su voz se oía agitada.
—¿Qué? ¿Por qué? ¿Pasa algo?
—No preguntes y solo sal.
—¿Saliste? ¿Con nieve?
—Sí, hacía demasiado frío, pero eso no impidió que saliera por Caín —observe el café a mi lado, recordando la taza de chocolate.
—Pudiste resfriarte.
—Lo sé, y eso no me importo.
Mis pies se hundían en la suave nieve, mis dientes castañeteaban, un largo abrigo cubría mi cuerpo.
Había llegado a la dirección que Caín me envió, a mi alrededor solo había autos viejos.
Empecé a temer cuando no veía llegar a nadie, el frío me estaba desesperando y ya no sentía mis pies.
Una mano se enrollo en mi cuello apretando, lo que me hizo soltar un grito.
—Te atrape —susurraron en mi oído.
—¡ Pero, ¿ qué te pasa?! —exclamé furiosa soltándome de su agarre.
Era Caín, lo reconocí por su voz apenas me susurro, tenía una mirada divertida y una sonrisita estúpida.
—¿A que te asuste?
—Pero claro, es un lugar en la nada, idiota.
—Ya, ya, mejor vamos —me ofreció su mano.
—¿A dónde? —Indague mirando con desconfianza.
—Solo toma mi mano y vamos.
Cedí después de unos segundos, mis pies aún dolían, hacía demasiado frío, él caminaba rápido y seguro, como si conociera ese lugar.
—Mira —señaló al frente, había una luz que sobresalía al fondo.
Era una cabaña, con faroles que iluminaban el lugar.
—¿Una cabaña?
—Sí —él asintió guiándome hacia ella—. Es de mi familia, pero nunca vienen, porque solo yo y mi padre sabemos dónde está.
Era comprensible, la cabaña quedaba detrás del lugar de autos viejos, casi en un terreno baldío.
—Bueno, ¿Y para qué vinimos? —pregunté cuando llegamos al porche de esta.
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CAÍN [Engaños #1]✔
Mystère / ThrillerClaire Manson llevaba una vida lo suficiente vacía y rutinaria. Ella no conocía el cariño. Ella no sabía lo que se sentía ser querida. Ella vivía oculta. Él llegó como la luz en un túnel oscuro, pero una luz engañosa. Él fue su verdugo. Su nombre q...