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Capítulo 26

Capítulo 26: "Me niego a detenerme"

Autumn Heaven

Me pase todo el maldito día declinando llamadas del mal nacido de mi exnovio, creo que pude haber invertido mejor mi tiempo si no fuera por tal motivo.

¿A quién quiero engañar? Mi día se resume en combatir las malditas voces en mi cabeza, voces que solo recalcan lo malditamente rota y jodida que estoy. Solo me dicen cosas que ya sé, cosas que desearía olvidar y enterrar.

Enterrar la puta verdad sobre la muy rota; Autumn Heaven.

Recordar cómo me expuse tan fácil frente a Ashton, me hace darme cuenta de que soy más débil de lo que creí. Un par de cosas reconfortante y ya estaba soltando todo mi trauma.

¡Ja! ¿Qué clase de burla soy?

Ese chico destruyó cada uno de mis muros sin siquiera intentarlo, así de fácil. ¿Por qué? ¿Por qué tuve que ir a verlo? ¿Por qué tuvo que hablarme en el retiro? ¿Por qué salió a buscarme en el hospital de noche? ¿Por qué fui a esa fiesta de Halloween? ¿Por qué le conté todo? ¿Por qué aún siento el impulso de dejarlo que me haga cenizas si eso quisiera?

Y lo más importante ¿por qué permití que pasara?

¿Cómo sucedió? ¡¿Por qué estoy tan confundida?!

Ashton Novan

—¿Y cuánto tiempo tendrá que pasar aquí para ese estudio?

Mi padre se cruza de brazos para ocultar su nerviosismo. La doctora Ross nos sonríe mientras me da mi camiseta y me pide que me siente en la camilla de su consultorio.

—Es un estudio clínico, Kol — carraspea y se corrige — señor Novan.

—¿Cree que funcione? —le pregunto con la esperanza de que me responda con sinceridad y no con la falsa positividad a la que estoy acostumbrado a escuchar.

Ella suspira —No voy a decirles que es la cura mortal para la FPI — mi padre resopla — pero, hasta el momento, se han tenido muy buenos resultados de la droga en los sujetos de prueba. Y si les recomiendo tal estudio, es por el mero hecho de que Ashton califica para ser tratado.

Le enarco una ceja, escéptico.

—¿Y Ash tendría que quedarse en el hospital? —vuelve a preguntar mi padre.

La doctora Ross asiente mientras termina de anotar mis resultados del chequeo de hoy.

—Estará en el ala de investigación, junto a otras nueve personas que ya aceptaron tal estudio — explica con una sonrisa algo mecánica — Podrás venir a verlo los sábados y te mantendré al tanto de su progreso.

—¿Qué progreso? — susurro entre dientes, cosa que ninguno de los dos adultos frente a mí se da cuenta.

Empiezo a ver los carteles de las paredes, contengo mi amarga risa. Me fijo en el espejo que hay frente a la camilla, me veo jodidamente enfermo, pasaría por cadáver si me encontraran durmiendo.

—¿Esto afectará en su puesto en la lista de trasplantes? —pregunta mi padre y apuesto que en su cabeza está repitiendo un mantra o miles de oraciones para que no sea así.

—Claro que no, Ashton sigue en segundo lugar para recibir los pulmones — él suelta el aire que ha estado conteniendo por la preocupación.

Ahora mi padre se voltea a verme y me toma del hombro.

—¿Qué opinas? — no logro contener mi acto y termino volteando los ojos.

Antes de que me recrimine algo, me corrijo y trato de excusar.