Damon
Camino apresuradamente concentrado en los papeles que tengo entre las manos.
Pero el cuerpo de alguien chocando contra mí me hace perder el equilibrio más logro maniobrar y mantener el equilibrio, más la otra persona falla cayendo estrepitosamente.
Bajo el las carpetas para observar al idiota que se me cruzo encontrando un rostro desconocido.
Mis sentidos se alertan empujándolo de nuevo con mi pie al suelo pisando con todas mis fuerzas su pecho.
—¿Quién eres? -le pregunto buscando alguna familiaridad en su rostro.
El chico se mueve bajo mi bota intentando zafarse pero no se lo permito imponiendo más fuerza.
—No lo preguntare dos veces —vuelvo a hablar.
—Luck, Luck Brown —responde y es cuando me doy cuenta de quién es.
—Ah ya, el hermano de la desaparecida —digo fingiendo desinterés, como si el tema no llevara asfixiándome semanas.
El chico levanta su mano como si buscara apoyo para levantarse —¿pero este que me cree, su bastón?— lo miro mal para después seguir mi camino ignorando su ser.
—Ey espérame, necesito que me guíes —pide alcanzándome y de nuevo se gana una mala mirada de mi parte.
—Acaso tengo cara de guía turístico —cuestiono con una sonrisa sarcástica.
—No, solo acabo de llegar y no sé dónde están mis tíos, ya recorrí medio edificio, me gane varias reprimendas por entrar a cuartos que no, e interrumpir entrenamientos o juntas —me explica como si me interesara.
—Si crees que perderé mi tiempo ayudándote estas muy equivocado.
—No te hará daño ser un poco amable.
Me detengo abruptamente ante su comentario, volteando a verlo serio.
—Brown, no estoy de humor, no me conoces, ahórrate tus estúpidos comentarios y largo de mi vista.
El da un paso atrás claramente incómodo y algo atemorizado por mi reacción.
No soporto me juzguen de esa forma, puedo ser amable si quiero y ahora que estoy de tan mal humor prefiero estar solo, pero él no lo sabe e igual abrió la boca.
—Ey, tranquila bestia feroz —habla Liam llegando de quien sabe dónde, genial —discúlpalo últimamente su humor se basa en ser grosero y sarcástico, la mini Brown es como una patada en las bolas para él, si no es como cuando éramos como sus niñeros es porque ya no lo es y ahora esto, es un volcán esperando explotar —empieza a divagar recargandose en mi.
—Liam cierra la boca —le digo quitando su brazo de mis hombros, otro que me cree bastón.
—Soñar es gratis —sonríe burlón para luego dirigir su atención a Luck— anda, yo te guío.
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Metanoia
Teen FictionHan pasado casi cinco años del cambio tan enorme que tomó la vida de Gretchen al momento de perder a sus padres, tiempo en el que inició de cero en un nuevo lugar siendo al fin feliz luego de tanto. Pero lo bueno dura poco y esto toma sentido para e...