No te pertenezco

6. ¿Cenicienta?

- ¡Estoy lista para la aventura! - grité al salir del café bar "Ciudad sin nombre" extendiendo mis brazos para mostrar a mi nueva amiga lo fabulosa que estaba con mis jeans azules ajustados con agujeros en la rodilla y mi blusa a cuadros del mismo tono.

- ¡¿Lista así?! - preguntó incrédula - ¡Oh, no amiga! No vas a ir a espantarme los pretendientes. ¡Ven vamos a mi casa a prestarte algo decente! - dijo determinada

- Oye esto es lo más decente que tengo en mi clóset - dije ofendida, pero en realidad solo jugaba con ella. De hecho tenía un par de vestuarios más que me había prestado mi mamá para las entrevistas de trabajo.

- Vas a tener que esperarte un poquitín más, Meg - declaró ella

- ¡Vale! Vamos a tu casa - dije suspirando, convencida de que no podía haber nada mejor que lo que tenía puesto en su armario. Pero me equivoqué, como obviamente lo hago siempre.

Descubrí que Jesica es una estudiante de moda que trabaja en la cafetería bar porque necesita pagar sus estudios y materiales para sus diseños. Vive independiente en un departamento cerca al negocio, en realidad a unas dos cuadras de ahí por lo que ahorra mucho en transporte. Asimismo, Sam contribuye a su economía ofreciéndonos la comida a un buen precio, casi regalada en realidad.

- ¡Gua! Esto es increíble. Tienes unos diseños súper únicos, Jesica. No tenía ni idea del talento que tienes mujer - exclamé efusivamente al ver los vestidos que parecían de una boutique carísima. Era vestidos con bordados hechos a mano en el busto, otros tenían piedrería que lo hacían ver muy costosos y al ladito había uno sin mucho adorno pero que se veía único por su increíble combinación de texturas y tonos.

- Ese vestido lo hizo mi mamá para mí - dijo ella mientras me pilló observándolo - ¿Es hermoso verdad?

- Es totalmente diferente a lo que he visto antes - exclamé porque así lo era. De hecho era un vestido muy diferente a los demás de la habitación, por lo que me quedé pegada viéndolo. Pero más que destacar por los lujos, este lo hacía por los contraste que tenía y los tonos pasteles entre esa combinación.

- Mi mamá lo hizo para mi graduación - mencionó mientras giró a buscar algo en el clóset de su armario

- ¿Y dónde está tú mamá? - pregunté mientras seguía haciendo el recorrido - debe extrañarte mucho - dije pensando en lo que me costaría algún día separarme de Emma

Voltee a verla porque se había quedado en silencio y pensé que no había llegado a oírme así que tomé aire para volver a preguntar, pero ella me interrumpió.

- ¡Lo encontré! - exclamó Jesi emocionada, mientras levantaba una falda larga que tenia una gran abertura al lado.

- ¿Tú... acaso quieres explotarme sexualmente? - solté al ver la prenda reveladora

- solo quiero que saques a relucir tus atributos boba... acaso no haz visto que tienes unas buenas piernas ¿por qué lo ocultas en el jeans gastado ese? - respondió señalando con desdén mis jeans favoritos

- ¡oye! No la insultes puede que se vaya a sentir ofendida por tu comentario - conteste susurrando - pero, vale... me pondre la fald a que escogiste para mí - dije algo incómoda esperando que eso fuera todo, pero no. La mirada maquiavélica de mi más reciente amiga me dio a entender que tenía otros planes para mí...