*S2*59*

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Al fin había llegado el gran día de la boda de Zoé.

-Arriba- aplaudi para levantar a Miguel

-Vamos que hoy te conviertes en un hombre casado- lo movi

-Unos minutos más- se quejó

-Para nada, ve a ducharte porque hoy te casas- no se si yo estaba más emocionado que él

-Por dios que no dormí anoche- subí mis hombro s

-Que importa- lo saque de la cama

Lo empujé dentro del baño mientras yo me colocaba mis pantalones.

Ya me había bañado así que me tocaba hacerle su último desayuno como soltero.

-Si me ibas a tratar así me hubiera casado desde antes- me ríe mirándolo

-Déjame darte tu último desayuno como soltero- sonreí

-Lo acepto- se sentó en la mesa

-¿Estas nervioso?- lo mire y él asintió

-Realmente estoy muy nervioso, pienso en ocasiones que no seré un buen esposo- negué

-Tranquilo se que ustedes se aman mucho y lograran superar todo juntos- asintió

-Además estuviste junto a ella cuando más te necesito- comente

-No pensé que me casaría- coloque su desayuno frente a él

-Tampoco pensé que te casarías y menos con mi hermana- me senté frente a él

-Tengo que mostrarte algo- sonreí buscando mi cajita de terciopelo

-No te creo – me miro sorprendido

-Llevo tiempo con él, pero quería pedirlo en la fiesta de tu boda si no te molesta- él negó rápidamente

-Claro que no me molesta, por Dios creo que tu madre será feliz siempre nos comentaba a nosotros que quería verte casarte con Karo- sonreí

-Yo no quería hacerlo sin que ustedes no fueran testigos- mire el anillo

-Será una gran noche- asentí

-Bueno termina tu desayuno que primero pasearemos antes de ir a la boda- asintió comiendo

Quería hacer muchas cosas con Miguel antes de llevarlo a su vida.

Sentía que entregaba a mi mejor amigo a mi hermana.

Me mire en el espejo de tener mi camisa bien puesta.

Luego de unos 10 minutos los dos ya nos encontrábamos fuera de su apartamento.

Conduje mi auto viejo que tenía en la universidad.

-Aquí tenemos demasiados recuerdos juntos- asentí riendo

-Demasiado-

-¿A dónde me llevaras?- pregunto curioso

-Ya verás-

Tenía planeado una sorpresa antes de que él se convirtiera en hombre casado.

Conduje con cuidado hasta la primera locación.

-¿Enserio?- asentí para bajarme del auto

Frente a nosotros teníamos nuestra escuela superior.

-Aquí tuvimos muchos recuerdos- cerré el auto para entrar

Era como entrar a nuestra memoria.

Frente a nosotros pasaban todos los momentos felices y tristes que tuvimos.

Un Cambio de ContratoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora