One-Shots

Magical Girl -Parte 3

Me encuentro situada arriba del techo de unos almacenes, viendo como una urvan blanca se estaciona en un almacén. Yo, EX-Plosion, estoy en espera de que la camioneta sea la que mi equipo vino a buscar, un vehículo con distintas drogas y armamento.

—Setenta —empiezo a hablar con el tatuaje volador de Setenta, el cual estaba cerca de mi—, estoy en el techo de un almacén, espero actividad sospechosa de las personas de la urvan.

Mientras descargan mercancía poco a poco, se confirma que son el objetivo de la misión. Debo esperar al equipo, al menos hasta que mi paciencia se termine, pues es mejor tener asegurado toda la mercancía así como capturar a todos los delincuentes. Solo son dos personas de la urvan y van desarmadas, en cambio los que salen del almacén llevan fusiles de asalto.

—Es una flojera tener un equipo con personas que apenas conozco. —susurro para mi misma.

¿Qué? ¿Qué pienso de las demás? Realmente nada, solo unas cuantas cosas superficiales.

Setenta y cuatro, una chica mágica bonita —aunque todas son así—, callada y que hace lo que le piden, parece un robot. Su traje de soldado es bastante genial, me gustaría tener un traje así, pero su actitud indiferente no es de mucha ayuda a la hora de entablar una conversación, sin embargo he podido llegar al punto en el que me dice EX en vez de mi nombre completo y eso es algo que no hace con las otras dos.

Angel... uhm, es normal. Es fácil hablar con ella, es atenta a las cosas, es tranquila y tiene sinergia con Kitty a la hora de combatir. Su sueño, al menos eso fue lo que nos dijo cuando apenas nos conocíamos, es tener un país mejor, libre de corrupción y con poca delincuencia, un lugar atractivo para vivir; Un buen sueño pero difícil de conseguir y más en este país de porquería.

Ella viste una mezcla rara entre una armadura y un vestido de color azul junto a unas botas que le llegan hasta las rodillas, no sabría explicar como esta vestida, a esto agrégale un cabello largo y rubio mas una tez de miel y tendrás a una modelo como guerrera. Su poder mágico consiste en un escudo cambiante que tiene distintos hechizos según la forma que obtiene el escudo. Según ella, los tiene que desbloquear según las experiencias que tiene y que por el momento tiene menos de diez escudos.

Kitty, ella es tímida y bastante adorable, aunque es divertida y muy graciosa a mi parecer. Siento que ella es la que une al equipo, pues trata de mantener la conversación grupal cuando esta inicia, además de ser la que intenta suavizar cualquier tipo de fricción entre nosotras. Ella viste una armadura ligera, protección de acero en sus hombros, pecho, rodillas y codos. Tiene un escudo pequeño al igual que una espada corta. Tiene experiencia en karate y taekwondo por lo que es buena peleando en combates cuerpo a cuerpo.

Su poder mágico consiste en dos cosas, armadura y armas bastante resistentes y, el poder más importante, el tener la capacidad de aumentar su fuerza física al recibir daño, esto hace que se vuelva más fuerte mientras más daño reciba. Kitty es tímida, retraída y tranquila, pero todo eso se va cuando empieza a pelear y sin duda es de temer.

Veo mi celular mágico, las chicas están tardando. Estaba lista para ir a la batalla cuando escuchó unas pisadas detrás de mí. Doy un salto el cual me lleva al otro lado del techo —ya saben, cosas de chicas mágicas, fuerza y sentidos mejores que el de una persona promedio— y encuentro a una mujer de traje negro, tez pálida y cabello corto y blanco.

—¿Quién eres? —pregunto.

—La pregunta correcta aquí es ¿Quién es usted? —comenta la mujer misteriosa—... No deberías estar aquí a estas horas.

—Lo mismo le digo, señorita. ¿Puede ser tan amable de irse y dejarme en paz? —esto solo me está distrayendo.

—Lamentablemente —la mujer me responde—... yo estoy a cargo de cuidar que nada salga mal en este trabajo, por lo que usted debe ser desplazada de aquí.

—¿Eh? Entiendo, lo lamento.

Había cargado mis guantes explosivos durante esta pequeña charla por lo que ya tenían la capacidad de explotar y matar a una persona normal.

—EX-plosion, hemos llegado a la entrada de la zona de almacenes —comenta el tatuaje de Setenta.

—¡Entonces lleguen de una vez! —grito, aun con mi mirada fija en la mujer de negro.

—Eso no pasará.

Algo a lo que podría llamar como un tentáculo negro, es disparado en dirección al tatuaje y atraviesa a este. Un grito suena del tatuaje y este desaparece mientras que el tentáculo se retrae hacia atrás de la mujer.

—¿Una chica mágica? —pregunto, sorprendida.

Sin pensar dos veces, me acerco rápidamente a la mujer y un puñetazo explosivo es dado en su cara... o al menos es lo que pensé.

—Niña, necesitaras mas que eso para dañarme.

—¿Qué? ¿Más tentáculos?

Cuatro tentáculos detuvieron mi golpe, justo delante de su cara formaron una barrera y detuvieron la explosión. Al parecer, estos tentáculos tienen raíz en su espalda y son bastante resistentes. Los cuatro tentáculos toman mi brazo y me avientan al suelo.

—Esto será divertido. —una sonrisa en su rostro y ahora se dirige hacia mi.