Seventeen % ＃SHOTS . . . 💭 - editando.

35 - Mingyu

Habías dado vueltas y vueltas toda la noche

El segundo trimestre de tu embarazo acababa de comenzar hace unas semanas y definitivamente no estabas preparada para el nuevo conjunto de desafíos que traía, especialmente cuando intentabas dormir, estabas constantemente orinando, volteando de un lado, a la espalda, al otro lado.

No solo eso, sino que era difícil conciliar el sueño en general.

Recuerdas que Mingyu había mencionado algo al respecto hace unos meses, estaba leyendo un libro sobre cómo navegar por un embarazo saludable mientras preparabas té en la cocina.

— ¡Ah! jagi, dice que probablemente deberíamos comprarte esta almohada especial cuando comiences el segundo trimestre — dice, abriendo ya su computadora portátil para buscar diferentes almohadas.

— ¿Eh? ¿para qué? — preguntas, sentándote a su lado en el sofá

— Se llama insomnio durante el embarazo, aparentemente se supone que es muy difícil para ti conciliar el sueño y esta almohada te ayuda a sentirte más cómoda — responde mientras recorre los sitios web en busca de la almohada con las mejores calificaciones.

Lentamente cierras su computadora portátil, te mira con una expresión tan ofendida en su rostro que no puedes evitar reír.

— Gyu, no lo necesitaré, siempre he podido dormir bien.

— ¡Pero mira! dice que es común !! — insiste, mientras señala la frase de su libro que lo dice precisamente.

— Te lo prometo, estaré bien — dices y le das un beso en la mejilla.

Acostada en la cama, recordando (y deseando haber escuchado a Mingyu y haberle dejado buscar la almohada), suspiras y te levantas de la cama.

Caminando hacia la cocina mientras te frotabas la cara, tratando de despertar del poco sueño que tenías, comenzaste a oler el dulce aroma de los waffles.

— Cariño, ¿estás haciendo... — te interrumpes cuando doblas la esquina para ver la mesa del comedor adornada con bandejas de gofres y frutas

Sonriendo, agarras una fresa y te la pones en la boca cuando Mingyu entra con dos tazas de jugo de naranja en la mano

— Jagi, buenos días — sonríe y se acerca para darte un beso en la mejilla.

— ¿Que es todo esto? — preguntas mientras él saca tu silla para ti

— Sabía que básicamente estuviste despierta toda la noche anoche, así que pensé que te haría el desayuno — responde alegremente mientras te sirve un gofre.

— Bueno, gracias — dices, agarrando suavemente su mano y dándole un ligero apretón.

— Por supuesto — responde. — ¡Oh espera! ¡Olvidé cortar el melón!

Comienza a levantarse para ir a la cocina, pero tú te paras diciendo: — ¡No, yo lo hago!

Mientras entras en la cocina y tomas un cuchillo grande y afilado, Mingyu te sigue y te lo quita, — No, yo lo haré.

Dejando escapar un suspiro, respondes: — Mingyu, solo estoy embarazada, no estoy indefensa.

— Lo sé — dice, levantando la mano para empujar tu cabello detrás de la oreja. — Quiero protegerte a ti y a nuestro bebé

No pudiste evitar reír — Eso es muy dulce, pero ¿qué crees que pasaría?" es solo cortar melón.

— ¡Exactamente! — él continúa. — Tienes que usar un cuchillo muy afilado para cortar el melón y ¿qué pasa si se resbala o algo así y te apuñala en el vientre?

Riendo aún más fuerte, lo atraes para un abrazo — Ohh, eres el chico más dulce, te quiero mucho.

— Ah, yo también te amo... ahora siéntate y disfruta de tu comida, estaré allí en un segundo — dice, plantando un beso en tus labios.

Te sientas a la mesa, preparas tu gofre con todos los ingredientes que quieras y pronto Mingyu se une a ti

— Así que estaba pensando que tal vez podríamos ir a las tiendas hoy y comprar algunas cosas para bebés — dice mientras come un tenedor lleno de comida.

Asintiendo con la cabeza, respondes: — Sí, es una buena idea. probablemente deberíamos seguir adelante y comenzar con la guardería... lo hemos estado posponiendo durante demasiado tiempo.

— Vi una tienda en línea que vende ropa de cama linda, podemos ir a echar un vistazo allí.

Una vez que ambos terminaron de comer, limpiaron los platos juntos y luego empezaron a prepararse para su día fuera espectacular. Una cosa acerca de quedar embarazada es que simplemente no tenías la energía para maquillarte tanto como solías hacerlo. Todo lo que hiciste ahora fue ponerte un poco de polvo y rímel y estabas lista para comenzar, después de probarte numerosas camisetas y sudaderas, todo se sentía demasiado apretado.

Aparentemente tu barriga debe haber crecido rápido porque recordaste que esta ropa te quedaba bastante bien no hace mucho tiempo. Suspirando y pasando tus manos por tu cabello con frustración, vas al lado del armario de Mingyu y te pones una de tus camisetas favoritas. estaba lo suficientemente suelta para que te sintieras cómoda.

Caminando de regreso a la habitación, ves a Mingyu acostado, desplazándose sin pensar en su teléfono — Está bien, estoy lista — dices, buscando en la habitación las cosas que necesitas poner en tu bolso.

— ¿Esa es mi polera? — dice mientras se levanta de la cama

— Sí, es posible que tengamos que pasar por una de las tiendas de ropa de maternidad... todo lo demás se ha vuelto un poco apretado.

— Espera, espera, déjame conseguir algo — se aleja hacia el armario y vuelve a salir con uno de sus blazers. — Ponte esto, se verá bien... además hace un poco de frío, necesitarás algo más que una polera.

Le sonríes y te encoges de hombros en la chaqueta y él tenía razón, se veía bien, mirándote en el espejo, dices: — Guau, quién diría que podría estar a la moda y cómoda durante el embarazo.

Mingyu viene detrás de ti y envuelve sus brazos alrededor de tu cintura. — Ahh, deja de ser tan linda.

Dándote la vuelta para mirarlo dices — Ya sabes, no hay nadie más en el mundo con quien prefiera formar una familia que tú.

Soltando una risita emocionada y atrayéndote para un fuerte abrazo, él responde: — Estoy tan contento de que podamos hacer esto juntos.

Te ríes mientras él continúa — Ahora, vamos a buscarte algo de ropa que te quede... aunque me encanta verte con mis camisas.

Caminan de la mano hacia la puerta, sabiendo que se tienen el uno al otro a su lado a través de este nuevo capítulo en sus vidas.