Oh sí, la chica misteriosa podía ser encantadora… además de cruel.
Y Jennie no necesitaba que Jisoo le dijera lo peligrosa que eso la volvía.
Todas las personas llevaban en su ADN el conocimiento instintivo de lo peligrosa que podía ser una mujer así. Y también lo increíblemente irresistible.
La sonrisa que acompañaba su disculpa mostraba unos dientes blancos fuertes y sus ojos brillaban con un brillo de luz.
Y tuvo el efecto de dejarla sin aliento e iniciar una estampida de pequeños movimientos excitantes de mariposas en el estómago.
Pero el dolor que ya le había causado había dejado su marca… como un moratón en una piel clara, y su cerebro le advertía que tuviera cuidado con aquella mujer.
La chica le masajeaba la piel, acariciando el lugar donde el pulso le latía con violencia, pero, lejos de calmarla con su contacto, eso solo incrementaba su agitación.
Debía huir lejos de esa chica mientras pudiera. Era peligrosa, y Jennie no estaba preparada para lidiar con ese peligro.
—Tengo que irme, dísculpa.
Su voz sonaba calida y delicada.
—He pedido el té. Ya lo trae la camarera.Dos camareras se dirigían a la mesa, una con té y la otra con la cuenta de Jennie.
Esta última le sonrió y dijo con cortesía:
—Perdone, señorita Kim. Creía que quería la cuenta.Así que era una chica reconocida. No podía ser otra manera con aquel apellido. Y tampoco era un apellido corriente y común.
A Lisa le resultó irónico que compartiera el apellido de su rival en el contrato que tanto anhelaba, un apellido por lo demás relativamente reconocido.
Quizá fuera un presagio o designio de la vida....
La cuidadora que fué, madre adoptiva voluntaria, que la había criado después de la muerte de su madre, junto con otras huérfanas y niñas no queridas, era una mujer llena de supersticiones y de creencias, pero a Lisa se le hacía difícil cree.
Después de todo, era una mujer moderna.
—¿Te hospedas en este hotel? —preguntó.
Sacó una silla para Jennie con la mano libre y la guió con firmeza, sin dejarle otra opción que la de permanecer en la mesa junto a ella.
Resultaba aún más magnífica, más linda de cerca de lo que había sido a distancia.
—Sí —contestó Jennie a la pregunta de Lisa —. Mi hermana Jisoo tiene reservada una suite aquí para cuando está en Londres de negocios.
Su media hermana aunque tenía reservadas suites similares por todo el mundo y su dirección más permanente era un apartamento pequeño al que consideraba su hogar.
Jennie no estaba segura de si había introducido a su hermana en la conversación para avisar a Lisa de que no estaba sola y desprotegida, o para recordarse cómo juzgaría Jisoo su comportamiento si llegaba a enterarse de que habló con ella.
Jisoo, que pensaba que Jennie estaba al cuidado de la ahora jubilada directora del colegio femenino al que había asistido y a la que su hermana había contratado para que se quedara con ella en su ausencia.
Pero la pobre directora había tenido que ir al hospital aquejada de apendicitis y se recuperaba en aquel momento de una operación en una residencia privada a la que Jennie había insistido que fuera para curarse del todo.
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Designio Fallido (Adaptación Jenlisa G!P)
FanfikceLa empresaria Lalisa Manoban tenía una rival, la multimillonaria Kim Jisoo. Por suerte, Jisoo tenía un talón de Aquiles: Su hermana Jennie, a la que protegía a toda costa. El plan ideal de Lisa era seducir a la encantadora Jennie Kim y, cuando hubi...