Destino

Capítulo 3: Encuentro

-¿Dormiste bien momo?- preguntó Asami, mientras el gatito se desperezaba y se acomodaba mejor en la cama
-Eres un perezoso- dijo mientras se levantaba de la cama y se colocaba una bata, hacía bastante frío, por lo que decidió prepararse un café, momo llegó a los pies de Asami maullando
-¿Tienes hambre?- 

Asami buscó el plato de momo y le sirvió la comida que le había comprado el día anterior, después se dirigió a la nevera para prepararse su desayuno, se encontraba comiendo cuando recibió una llamada urgente de la oficina, a pesar de que no trabajaba el sábado decidió ir para resolver el caso que le asignaron a último momento.

-Gracias por venir con tan poco tiempo, debo salir de viaje con urgencia y tenía que buscar a alguien que pudiese reemplazarme en este caso, pienso que eres la persona adecuada-
-No hay problema Lin, además es un honor para mi trabajar en la firma Beifong-
-Me hubiese gustado darte tu propio despacho, pero como puedes ver aún estamos remodelando, ven sígueme-
Lin llevó Asami por el pasillo pasando la cafetería  hasta dar con una puerta de madera a mano derecha, tocó dos veces antes de entrar
-Buen día Kya, te presentó a Asami Yamamoto estará trabajando con nosotros como abogada y asesora en la firma-
-Mucho gusto- dijo Kya extendiendo su mano para estrechar la de Asami
-Kya trabaja con nosotros desde hace seis meses, es psicóloga y trabajadora social nos ayuda con los casos de familia en especial donde hay niños involucrados, es muy buena en su trabajo-
-No me halagues tanto Lin o pensará que me coqueteas- dijo de forma pícara
Lin se sonrojo y se puso un poco nerviosa 
-A Kya le gusta bromear como puedes ver, bueno debo irme regresaré de viaje en 3 días, lo que necesites pídeselo a Kya, sé que harán buen equipo- dijo retirándose de la oficina, después de cerrar la puerta Asami escuchó un leve suspiró provenir de Kya, el cual prefirió ignorar y fue acomodarse en su nuevo escritorio.

-Entonces ¿Asami verdad?, No parece que eres de aquí-
-No de hecho me mudé hace una semana, este es mi primer fin aquí-
-Vaya, entonces Lin te arruinó los planes de hoy-
-Bueno no tenía algo en concreto, quería aprovechar a conocer un poco más de la ciudad, -
-Podrás hacerlo tan rápido levantemos el informe ¿Lin te menciono de que trata el caso?-
-No, solo me dijo que el lunes en la mañana es la audiencia-
-Este es el expediente de nuestro cliente, ahí podrás encontrar todos los antecedentes registrados- dijo Kya mientras le entregaba una carpeta y continúo - Empezaré a redactar el informe sobre la custodia del hijo, una vez termines de leerlo puedes agregar tus comentarios antes de enviarlo al juzgado-

Asami asintió y comenzó a leer el expediente, pasaron un par de horas cuando Asami se acercó a Kya con un cuaderno que contenía un par de anotaciones
-¿Terminaste?-
-Sí, tengo una par de comentarios que podrían ayudar a defender la posición de nuestro cliente-
-¿Puedo leer?- preguntó Kya
Asami asintió  entregando el cuaderno a Kya, quién con una mano en su mentón comenzó a leer, asintiendo cada cierto tiempo, mientras Asami esperaba con atención a cada expresión que surgía de Kya
-Vaya, ya veo porque Lin te escogió para reemplazarla, eres muy buena, con esto creo que ganaremos el caso-
-¿Enserio?-
-Sí-
Ambas se pusieron a redactar el informe que debían presentar hasta que quedaron conforme con lo que se plasmó en el documento, Kya lo imprimió y mandó por mensajería el mismo. 

-Fue un mañana bastante productiva y divertida diría yo,¿Y dónde irás hoy?-
-Bueno te iba a preguntar ¿Tienes algún sitio o actividad que me recomiendes en esta época?-
-Mmm...en invierno la mayoría de las actividades son al aire libre, bueno hoy será el alumbrado navideño en el centro y también escuché que abrieron una pista de patinaje, además de muchos puestos de comida, podrías empezar conociendo ahí-
-¿Enserio? De niña me encantaba patinar, creo que me daré una vuelta esta noche-
-Seguro te divertirás, si mañana estás libre puedo llevarte a conocer el museo y después ir al centro comercial-
-Sería excelente- dijo Asami 
Ambas intercambiando números y luego Asami se dirigió al apartamento para comer y ponerse algo más cómodo

**
-Haru apúrate, Mako no demora en llegar-
-Mamá ¿Por qué tenemos que ir con él?- dijo Haru apareciendo en la sala
-Porque es un buen amigo, vamos busca tu abrigo vas a ver que te vas a divertir-

En ese momento sonó el timbre de la casa, Korra se adelantó abrir la puerta
-Hola Mako-
-Hola Korra te traje esto- dijo mostrando unas flores blancas que escondía en su espalda
-No tenías que hacer esto-
-Bueno, pasé por una florería de camino y al verlas pensé en ti-
-Gracias, las pondré en agua y nos vamos-
Korra se dirigió a la cocina, Mako se quedó mirando por donde se fue hasta que el pequeño Haru llamó su atención haciendo una seña con las manos y lo punto como diciendo "Te estoy vigilando", a lo que Mako quedó algo sorprendido y a la vez confundido.
-¿Haru ya saludaste a Mako?-
-Sí mamá- dijo de forma inocente
-Bueno ya estamos listos ¿Nos vamos?-
Mako asintió y los escoltó hasta su auto, se subieron para dirigirse al centro.

Al llegar caminaron alrededor del enorme parque que tenía un árbol gigantesco en el centro, Haru se adelantó y se unió a otros niños que se lanzaban bolas de nieve, esta vez Korra no le perdía la mirada de encima, después del susto que le dio.
-¿Cómo te ha ido?-
-Sigo trabajando como diseñadora gráfica en la revista local-
-¿Enserio? Pensé que no te gustaba-
- La verdad es que no, pero es lo que paga las cuentas y todo lo de Haru, ya sabes-
-Korra si necesitas ayuda económica puedes contar conmigo-
-Lo sé, pero estoy acostumbrada a ganarme las cosas por mí misma- dijo sonriéndole 
-Si, esa es una de las cosas que me encantan de ti-
Korra se sonrojo y rápidamente cambió de tema -¿Y a ti como te va?-
-Ya terminé mis prácticas de vuelo, pronto tendré mi certificación y podré volar sin supervisión-
-Eso es una gran noticia Mako-
Mako le sonrió y cuando estuvo a punto de decir algo, Haru abrazo las piernas de Korra
-Mamá tengo hambre- 
-Al final hay unos puestos de comida ¿Vamos?- dijo Mako
Korra asintió tomando a Haru de la mano mientras se dirigieron a uno de los puestos de comida, Mako les compró un hotdog a cada uno el cual disfrutaron. 

Ya empezaba a anochecer, por lo que a través de los parlantes del parque anunciaron que se llevaría a cabo el alumbrado de navidad, los tres se dirigieron hacia el gran árbol, estaba abarrotada de gente por lo que Mako cargó a Haru sobre sus hombros para que pudiese ver, entre todas las personas iniciaron el conteo regresivo
¡ ...5,4,3,2,1…!
Todo el parque se iluminó con diferentes colores navideños, Haru y Korra no podían contener la cara de emoción, todo era mágico. En ese momento Haru alcanzó a ver una pista de patinaje
-¡Mamá mira!- dijo señalando 
-¿Una pista de patinaje?- preguntó 
-¡Sí, sí vamos!- dijo emocionado saltando sobre los hombros de Mako
-Tranquilo o te puedes caer- le dijo luego miró a Korra -¿Vamos?-
-Está bien-

Alquilaron unos patines y entraron en la pista, Korra al inició se agarró de la barrera -Hacía mucho que no patinaba- dijo con temor de caerse
-Tranquila, eso no se olvida- respondió Mako sosteniendo su mano
-Mamá, vas muy lento- dijo Haru que dominó rápidamente la pista, Haru se acercó y sostuvo la mano libre de Korra, él también quería ayudar a su mamá a patinar. Esta escena le pareció bastante graciosa, dieron un par de vueltas hasta que finalmente Korra empezaba a dominar un poco más la pista, en un momento se apoyó de la barrera y en el instante que alzó la vista vio a lo lejos la figura de una mujer que patinaba con gran destreza hasta realizaba giros como una profesional, se quedó hipnotizada viendo en su dirección hasta que Haru se acercó diciéndole que tenía hambre denuevo  y quería unos churros que había visto antes.

Mako se ofreció a ir por ellos, pero Haru insistió en acompañarlo para asegurarse de comprar lo que él quería, Korra alzó la vista y la misteriosa mujer había desaparecido por lo que decidió dar una vuelta más a la pista antes de salir, sin antes encargarle a Mako que mantuviese vigilado a Haru. Los dos salieron de la pista entregando sus patines y se dirigieron a la zona de comidas, Korra se quedó mirando en su dirección hasta que desaparecieron en la multitud, tomó aire y separó de la barrera tomando impulso, pero no logró afianzar bien el pie tambaleándose, por instinto cerró los ojos esperando el golpe, estuvo a punto de caer cuando sintió que la tomaron por la cintura 
-¿Estás bien?-