Para aquellos amores que nacieron predestinados, como aquel hilo rojo que une sus vidas, no importa cuánto se enrede o cuantas dificultades pasen, el vínculo que tienen nunca se romperá y tarde o temprano terminarán encontrándose.
Esta es un fanfic...
-Ya estoy lista- anunció Asami acercándose, al ver que Korra mostraba un semblante de confusión dirigió su mirada hacia el libro que tenía en sus manos, lo tomó y sin tomar mayor importancia lo colocó en su lugar diciendo -Fue un regalo de una vieja amiga de la infancia, pasó hace mucho tiempo, tanto que ni logró recordar- Al escuchar estás palabras Korra dio unos pasos hacia atrás llevándose la mano a la garganta sentía como un sabor amargó, pasaba a través de ella, enserio quería decirle todo de una vez, pero no podía articular palabra alguna.
Asami pensó que había malinterpretado la situación -No quiero que pienses que estoy saliendo con otra persona, solo tengo ojos para ti- dijo tomando por sorpresa a Korra quién esbozó una sonrisa y Asami continuó -¿Nos vamos?- preguntó dándole un beso en la mejilla, Korra solo asintió, en su mente no paraba de pensar que fue lo que ocurrió realmente hace más de 5 años ¿Por qué Asami no recuerda nada?
Se dirigieron a la casa de Su, en el camino Korra estaba callada lo que inquietaba un poco a Asami, pero cuando le preguntaba respondía que no sucedía nada. Finalmente llegaron donde Su -¿Por qué no pasan a comer?- -Ya te hemos molestado bastante- respondió Korra -Tonterías, hice estofado ¿Qué dices Asami?- -Estaría encantada- -No te dejes convencer- dijo Korra -No me puedo negar a un rico estofado- respondió Asami -No sé diga más pasen- dijo Su llevándolas adentro, Haru apenas las vio entrar salió corriendo -¡Asami!- dijo saltando hacia ella -Hola campeón ¿Te portaste bien?- -Sí, bien hasta estuve dibujando, ven te muestro- dijo jalando a Asami hasta el comedor -¿Y yo estoy pintada?- preguntó Korra a Haru, pero este ni le prestó atención Asami solo volteó a verla con una sonrisa de complicidad -Ya te reemplazaron- dijo Su molestando -Si me doy cuenta- -Ven, me ayudarás a servir la comida-
Ambas entraron en la cocina, mientras sacaban los platos y servían, Su notó a Korra muy pensativa -¿Pasa algo?- -...No…- -¿En serio Korra?- preguntó de brazos cruzados, a lo que Korra suspiró y antes de hablar se aseguró de qué Asami no escuchará nada -No se te escapa una ¿verdad?- -No, asique empieza hablar- -¿Ves la conexión que tienen?- -Sí, no se puede negar que se llevan muy bien- dijo echando un vistazo hacia ellos -Es porque es su madre- -Korra ¿Estás segura?- preguntó mirándola a los ojos, esta asintió diciendo -Antes de venir pasamos por su departamento y encontré un libro que le regale para nuestro aniversario tenía la dedicatoria que yo le escribí- Korra tomó aire antes de continuar -Cuándo Asami se dio cuenta de qué había leído el libro lo tomó como si nada y dijo que una amiga de la infancia se lo había dado, cuando fui yo quién lo hizo- -¿No lo recuerda?- -...Al parecer…- -¿Le preguntaste?- -...No pude… tengo tanto miedo de perderla de nuevo, el que esté aquí ahora conmigo y nuestro hijo es un milagro- -...Korra… lo entiendo, pero no sabemos lo que pasó con Asami ni porqué está aquí ahora- -...Cada día entiendo menos todo esto…- dijo Korra llevando sus manos a la cabeza, Su con gentileza se acercó tocando su hombro -Ambas han sufrido y merecen ser feliz- Con estas palabras Korra no pudo evitar que se le salieran las lágrimas, por lo que Su la abrazó -Tomate tu tiempo, me alegra verte tan feliz después de tanto tiempo- -¿Mamá por qué lloras?- preguntó Haru al llegar colgado de los brazos de Asami, quién tenía una cara de preocupación -...Porque estoy feliz...- dijo Korra limpiándose las lágrimas y extendiendo sus manos, Haru se abalanzó hacia ella para abrazarla. -¿Todo está bien?- preguntó Asami -Sí, todo está perfecto- dijo sonriéndole de vuelta, Asami se acercó dejando un pequeño beso en la sien de Korra y se unió al abrazó. Su se quedó un momento apreciando la escena y dijo -Vayamos a comer o se enfriará la comida-
Después de comer, Asami ayudó a Su a lavar los platos mientras Korra alistaba a su hijos, luego se despidieron de Su y los tres se dirigieron a la pista de hielo, Korra prefirió quedarse sentada mientras veía como Asami le enseñaba a Haru hacer un par de trucos en hielo. Realmente estaba muy feliz de verlos juntos, el sonido del celular la sacó de sus pensamientos, tenía un mensaje de Mako, se quedó por unos instantes mirando la pantalla y finalmente decidió no abrirlo, regresó su mirada hacia su familia, era todo lo que necesitaba en ese momento. -¿Me viste mamá?- -Sí, estuviste genial en la pista- respondió Korra -¿Te divertiste?- preguntó Asami -¡Sí, gracias!- dijo abrazándola -¿Qué les parece si hacemos un muñeco de nieve?- preguntó Korra, Haru asintió feliz -Suena divertido- dijo Asami con una sonrisa
Entre los 3 armaron el muñeco de nieve, Asami fue a puesto cercano para comprar la zanahoria que serviría de nariz, Korra le colocó un sombrero de lana que traía y utilizaron unas piedras para los ojos y botones. -Muy bien solo falta colocar la nariz- dijo Asami sacándola de la bolsa y dándosela a Haru -¿Quieres hacernos el honor?- -¡Sí!- Korra lo cargó para que alcanzará el rostro -¡Listo!- dijo alegre -¡Bien póngase para una foto!- dijo Asami sacando su celular, los tres posaron con el muñeco, Korra volteó admirando al muñeco -Nos quedó muy bien ¿No crees?- preguntó -Yo creo que nos falta algo- dijo Asami -¿Qué cosa?- -¡Esto!- respondió lanzandole a Korra una bola de nieve al rostro -¡Pelea de nieve!- gritó Haru bajándose y persiguiendo a Asami con una bola de nieve, Korra no dudó en unirse a ellos.
Entrada la noche se dirigieron a la casa de Korra, Asami se despidió de Haru con un beso en la cabeza mientras esté veía televisión en pijamas. -Sí que tiene energía- -A veces es todo un reto, pero lo amo- -Y como no hacerlo es adorable, por cierto ¿Será posible que me prestes el cuento del otro día el que escribiste?- -¿Porque?- -Me pareció increíble, quisiera leerlo denuevo- -De acuerdo- dijo Korra trayendolo para luego acompañarla hasta la puerta -Mañana tengo una audiencia a primera hora, será mejor que me acueste temprano- -Sí, debes estar cansada- -Un poco- dijo Asami bajando las escaleras, Korra bajó un par de escalones de la entrada tomó su mano y se la llevó al rostro -Gracias por todo, disfruté cada minuto- -Yo también lo disfrute- dijo con una sonrisa en sus labios
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-...Queria preguntarte si no tenías planes para navidad… ¿Si querías pasarla con nosotros?- -Me encantaría- -¡Perfecto! Le diré a Su que me ayude a preparar el jamón- respondió animada -¿Puedo darte un beso de despedida?- preguntó Asami -Eso no lo tienes que preguntar- respondió Korra acercando a Asami y plantando un beso en sus labios
-¡¿Qué significa esto?!- Ambas se apartaron de golpe ante la voz, cuando Korra alzó la mirada vio que se trataba de Mako, miraba confundido de Korra a Asami y de vuelta -¿A qué estás jugando?- cuestionó acercándose a Korra -¡Oye! Tratala con respeto- dijo Asami -¿Me hablas de respeto? ¡Tú te aprovechas que no estoy para estar con mi novia!- respondió encarandola -¡Ella no es tú novia!- réplico -¡Alto los dos!- dijo Korra interponiendose ente ambos, miró a Mako diciéndole -Sé que te debo una explicación - y luego miró a Asami -Por favor, ve a casa- -No te dejaré con él- -Estaré bien, solo hablaremos- -...Korra…- - Confía en mí, luego te llamó- respondió Korra sosteniendo su mano, Asami se mordió el labio inferior ante la impotencia, pero no podía traicionar la confianza de Korra -Estaré esperando tu llamada- dijo plantadole un beso en la mejilla para luego mirar con ojos de furia hacia a Mako.
Asami se dirigió a casa con un nudo en la garganta y los celos carcomiendo su cabeza pensando en todo lo que ese idiota podría decirle para convencerla de que volvieran -¡Maldición!-
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