Destino

Capítulo 19: Kairos

-Jmm...Buen día...- dijo Asami entrando a su despacho al ver a Kya a Lin besándose, al escucharla se separaron inmediatamente 
-...Bu- Buen día… - dijo Lin nerviosa y continuó -será mejor que me vaya a revisar unos documentos, nos vemos más tarde- mencionó dedicándole una mirada a Kya antes de salir, Asami no pudo contener la risa 
-¿Es así siempre?-
-...Siempre, aún le cuesta actuar con  naturalidad en la oficina…-
-A mi no me incómoda siempre y cuando no utilicen mi escritorio para otros fines- dijo entre risas 
-Me acabas de dar una idea interesante- dijo Kya con sonrisa pícara y continuó- Estás de mejor humor que el viernes que fuiste a mi casa ¿Pasó algo?-
Asami no pudo evitar sonreír, sentó en la silla de su escritorio y lanzó un suspiró 
-La encontré-
-¿A la chica, cómo?-
- Recién yo había comenzado a trabajar, en la salida y por casualidades del destino conocí a un niño del cuál me hice amigo, había quedado de verlo el domingo y cuando llegué …la sorpresa que me llevé al saber que era el hijo de Korra…-
-Tiene un hijo-
-Sí, un pequeño de 4 años llamado Haru, tienes que conocerlo es encantador-
-¿Y qué hiciste?- Preguntó Kya acercándose a Asami con curiosidad
-Traté de disculparme ...al principio fue algo caótico… Korra estaba molesta conmigo y sin querer me confesé, le dije que no paraba de pensar en ella-
-¡Qué! ¿Y después qué pasó? No te quedes callada-
Lanzó un suspiró y dijo -Para mí desgracia apareció el "novio", al parecer habían tenido una pelea o algo, no sé muy bien qué pasó entre ellos dos, pero Korra lo despachó rápido y él se despidió diciendo que estaría lejos unos días por trabajo-
-Entonces es tu oportunidad, están peleados y no estará, debes aprovecharlo-
aprovecharlo-
-Pues sí, hoy no veremos para tomar el café que le debo-
-¡Perfecto!-
- Si la verdad es que estoy muy emocionada, aunque hay algunas cosas que quiero aclarar con ella y me pareció extraño algo que me preguntó-
-¿Qué cosa?-
-...Me preguntó ¿Cuándo fue la primera vez que nos vimos? y cuando le respondí en la pista de hielo se puso triste… fue algo que no entendí-
-...Sí… es extraño, pero al menos las cosas salieron bien si decidió tener una cita contigo, después de haberla dejado plantada-
-¡No la dejé plantada!-
-Ya, ya está bien mejor sentemos a ver tus pendientes, salieron unos casos de muerte cuando te fuiste sin Lin no hubiese podido-
-Al menos eso les ayudó-
-No tienes idea me siento como en un sueño a su lado-

**
Por su parte Korra había tenido un día ajetreado en el trabajo, su jefa cada día se ponía más exigente y eso la llevaba al borde, pero a pesar de todo el día transcurrió bastante rápido y no iba a dejar que le arruinarán sus planes, Korra salió de la oficina para recoger a Haru de la escuela y llevarlo con Su, quién lo cuidaría mientras tendría su cita con Asami.

-¿Por qué no puedo ir? también quiero ver a Asami-
-Porque vamos hablar cosas de adultos-
-¡No es justo!-
-Vamos no te pongas bravo, te prometo que después podrás verla- dijo mientras entraban a la librería de Su
-¿Por qué estás molesto con tu mamá?-
-...Yo también quiero salir con Asami...- dijo haciendo puchero
-Tú mamá va a salir a una cita, por eso no puedes ir- dijo Su a lo que Korra se sonrojo 
-¡No es una cita!-
-¿No? y ¿Por qué estás tan nerviosa?-
-¡No lo estoy!- dijo Korra y luego se inclinó hacia Haru - Te portas bien y te veo más tarde-
Haru asintió resignado dijo -Después me toca salir con Asami- lo que sorprendió a Korra y a Su - Vaya, pero todos se pelean a esa chica tendré que conocerla pronto- continuó  dirigiendo a Haru - Anda arriba pon una película mientras subo- 
Haru hizo lo que Su le pidió y cuando se fue esta se dirigió a Korra -¿Estás segura que es ella?-
-Aún no lo sé, traté de contactar a Izumi ayer y hoy, pero su celular está apagado-
-Bueno pasando tiempo con ella sabrás la respuesta, pero ten cuidado no quiero que tu corazón sufra de nuevo-
Korra asintió, se dieron un abrazo y se dirigió hacia el café, desde la ventana pudo ver la silueta de Asami en una de las mesas, su corazón empezó a latir con más fuerza, no sabía cómo hasta ese momento había resistido estar tan cerca de ella y no besarla