Atte: Emily

DOCE

Querido Dylan:

Al parecer esto de las cartas tristes se volverá nuestra pequeña nueva tradición.

Porque aquí estoy una vez más, llorando y escribiéndote.

Pero esta vez, te escribo en mi cumpleaños, así es, estoy llorando en mi cumpleaños.

Me quedé despierta hasta muy tarde, esperando tu llamada, felicitándome a media noche, como todos los años, pero, después de una hora, me di cuenta que no llamarías...

Odio que esto pase, odio quedarme esperando tus mensajes, llamadas o visitas, y luego darme cuenta que te has ido para siempre. Y me odio a mi misma porque ya han pasado 6 meses, y sigo aquí esperando que regreses.

En general mi día ha ido bien, excepto por las partes en que he llorado. Mi mamá me despertó con un delicioso desayuno, y luego he llorado de nuevo, fuimos a comer junto con mis abuelos para celebrar mi cumpleaños, obviamente no podía faltar el pastel, de chocolate, y he llorado porque era de chocolate y era tu favorito —muy patético para ser real—, también hemos visto películas hasta que se hizo de noche, y bueno aquí estoy, llorando de nuevo, y con eso son 3 veces que he llorado en mi cumpleaños, bueno 4 si agregamos la vez que llore al darme cuenta que tu llamada anual de media noche no iba a suceder.

Feliz Cumpleaños a mi supongo.

Adiós.

Atte, te extraña:
-Emily