Hanagaki Takemichi es un beta de 23 años al que no le ha ido bien en la vida. Incluso aunque tiene la capacidad de oler las feromonas de alfas y omegas así como saber sus estados de ánimo, tampoco es como que sea la gran cosa. Siendo sinceros, a vec...
Holi~ tal vez algunos ya se hayan enterado en mi perfil peeero ya ando en proceso con dos historias, una larga y una corta! Ah~ que bonito! Es que ya ando preparándome para cuando termine este fic, aún faltan como 10 capítulos y el extra con escenas ya saben 7u7r. Pero siempre es bueno ya estar lista, además de que una la subiré muuuuy lentamente en lo que termino esta jajaja y la otra corta de Mikey Yandere será toda de golpe :v.
Oh recuerdan que dije que haría un dibujo de Mikey? Pos listo! No soy la mejor dibujante y se me dan más los chibis xd pero toy orgullosa :'v.
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
En fin! Iniciemos con el cap!
...
Chifuyu se sentó junto a Draken.
– Hola, un gusto Chifuyu, soy Hanagaki Takemichi – Si bien lo había llamado con el mote que prácticamente era su nombre con otro tono, era probable que no conociera realmente como se llamaba
– Lo sé – respondió con una sonrisa.
– Cierto, supongo que ya lo sabes – ¿Que acaso todo Toman lo conocía?
– ¿Quién no conoce al héroe que salvó a Draken hace años cuando casi muere? Eres muy famoso Takemicchi – Era verdad lo que decía. Últimamente era uno de los chismes dentro de la organización ¿habrá vuelto con otras intenciones? ¿Draken se enamoró a primera vista ahora que conoció a su salvador? Chifuyu tenía muchos chismes con los cuales entretenerse.
– ... ¿Gracias? –
El rubio estaba conforme con la respuesta.
– Si, de nada – Se acomodó mejor en su lugar y prosiguió – Oye ¿Te gusta Draken? –
Takemichi había dudado de lo que escuchó ¿Acaso había hecho algo para que Chifuyu creyera eso? Vamos, que apenas este ha sido su tercer o cuarto encuentro con Draken. De cuándo acá podría haber hecho que otros malinterpretaran su relación. Al escuchar el tema tan extraño con el que había salido su compañero, Draken no pudo evitar tener un tic en la ceja y golpear casi de forma automática la cabeza de Chifuyu.
– No andes diciendo tonterías, no te hablé para que hablaras de cosas sin sentido – Draken ya sabía por qué el rubio había hecho esa pregunta. No era tonto como para no darse cuenta de los rumores que lo rondaban, algo que a su parecer no tenía sentido.
– Draken, es un buen momento para poner fin a mis dudas existenciales, así que deja que Takemicchi me responda – Chifuyu habló con seriedad pero cuando volteó a ver a el más alto, notó una clara molestia en su rostro – ¿Por favor? Prometo que será lo único fuera de lugar que pregunte –
– Tch, ya es cosa de Takemicchi si quiere contestarte – Decidió ignorar al chico y seguir comiendo.
Chifuyu en cuestión de un segundo dirigió su mirada al chico de ojos azules. Ya había obtenido la aprobación, ahora sólo era cosa de que le contestaran.
