Nothing is easy

Cartas a Leah

Mierda, era lo único que podía repetirme en mi cabezota, estaba en shock, jamás lo esperé de Axel, quiero decir, sabía que vivía con ese miedo, pero no creí que me fuera a dejar una última carta o algo parecido.
Si bien estaba ansiosa por abrirla, tambié estaba nerviosa, aún más que cuando abrieron su testamento, esto era diferente, está la había escrito el, con sus propias palabras, el sólo, sin mirones, quizá en esta oficina.
Quién se atreva a decir que debería estar calmada, se merece ser golpeado hasta que vomite sangre, definitivamente.
-¿Leah? -Dijo Jess sacándome del trance- ¿te encuentras bien?
No podía moverme, era pesado respirar, un par de lágrimas escurrían por mis mejillas. El me había escrito una última carta, pensó en mi para hacerlo.
-Leah, mi amor no llores -se acercó a limpiar suavemente mis lágrimas con sus pulgares, me costó un trabajo enorme poder levantar la mirada hasta encontrarme con la suya, estaba preocupada, creo que mi cara era un poema en ese momento.
-yo... estoy bien, sólo... no quiero ser grosera pero ¿me podrías dar un momento?- no tengo idea de como salieron palabras de mi boca, pero habían salido con mucha dificultad.
-claro, cualquier cosa que necesites estoy en el pasillo si?
-está bien- me acerque a darle un beso, tenía la esperanza de al menos calmarla con eso.
Jess caminó lentamente hasta el marco de la puerta, donde paró y me miro tiernamente con una pequeña sonrisa
-¿segura que estarás bien?
Bien, esto derribo mis defensas, quería afrontar esto sola pero no puedo sin ella, necesito un poco de apoyo.
-Jess... He cambiado de opinión, quédate conmigo. te necesito.
-¿segura?
-bastante-comencé a rodear el escritorio en busca de la enorme silla giratoria de cuero.- siéntate aquí conmigo.
Me senté y ella me siguió, tomando asiento en el descansa-brazos de esta, a mi lado derecho.
Con mucha dificultad tome el sobre y pase los dedos por su letra antes de abrirlo, la carta como era de esperarse estaba en Italiano, Axel siempre dijo que temas serios o asuntos familiares se debían tratar con su idioma de origen, este no era el mío pero al momento de acogerme en su familia lo tome como tal.
Jess tomaba una de mis manos con fuerza mientras con la otra tomaba la primera hoja de papel tamaño oficio del sobre.
-todo estará bien- dijo ella dándome un beso sobre la frente- Sabes que estoy aquí contigo, para apoyarte pase lo que pase, diga lo que diga esa carta.
Sólo pude levantar una mirada y regalarle una sonrisa antes de fijar mi vista de nuevo en el papel.

" 23 de abril de 2012

Mi pequeña princesa espero que hayas encontrado esto a tiempo.
Te conozco ¿sabes? Y justo en este momento, donde estas leyendo esto con mi voz rebotando en tu cabeza debes de estar preguntando algo como "¿para que diablos es esto?" O "¿cuando carajos hizo esto?", bueno Leah, como sabes vivo con el temor de que algo me pase, y al ser mi única hija y heredera sólo tengo que preocuparme por rendirte cuentas a ti.
Antes que nada quiero darte gracias por ser parte de mi vida, eres mi pequeño ángel sin alas, tu le devolviste sentido a mi vida, y se que te lo dije antes pero te lo vuelvo a repetir, te amo más de lo que amé a Dante o a Christian, sin duda eres la luz de mi vida, y no se dónde este yo para cuando estés leyendo esto, si en prisión o en un ataúd, pero siempre voy a estar cuidándote mi princesita.
De igual manera quiero pedirte perdón, porque a pesar de tratar de ser el mejor padre para ti tuve mis errores, sólo quiero que sepas que quiero que seas feliz, que encuentres a la mujer con la que quieras pasar el resto de tu vida, quiero que se hagan felices mutuamente. Sé que cuando muera (en caso de que leas esto cuando ya lo haya hecho) tu tomarás las riendas de todo negocio, sin embargo..."

Saqué la otra hoja del sobre.

"Quiero que cuando estés segura de que hayas encontrado a la mujer con la que quieras pasar el resto de tu vida le vendas el cártel a mi amigo Carlo, quizá no la leas hasta que ya te haya hecho una oferta o algo parecido por verte con alguna novia, pero tu sabes cuán bruto es. Cuando la encuentres, sólo quédate con Vause W&V y vacía la cartera de Carlo con el precio del cártel.

No será fácil salirte del negocio de las drogas, por eso en este sobre he dejado las escrituras de una pequeña casa en el sur de Italia donde tu y mi nuera pueden pasar un tiempo antes de regresar a América, hay dinero en una caja fuerte detrás de un cuadro con una foto nuestra en la sala de la casa en Italia , la combinación es "100313". Así que no necesitas llevar dinero, procura ser cuidadosa al depositar el dinero en las cuentas, no quiero que te pase nada ni se involucren terceros, te recomiendo que deposites cantidades pequeñas en tus cuentas y el resto lo guardes en la caja fuerte de la casa en Napa.

Por último mi princesita, quiero decirte que te amo Leah, siempre serás mi pequeña hijita, también que eres lo mejor que pudo haberme pasado, te amo. perdón por no haberme quedado más tiempo contigo.

Con todo el amor del mundo, la persona que siempre te va a amar desde donde quiera que este, tu padre y "Booboo", Axel Vause."

Tenía lágrimas escurriendo por toda la cara, me sentía infinitamente contenta al leer de nuevo que Axel me amaba, sin embargo estaba contenta también por que había leído la carta a tiempo, justo en el momento correcto, había encontrado a esa mujer.