Obsession ||Yoonmin||

17

Kitty se encontraba sentado en el sillón de aquella habitación, mientras que Agust besaba su cuello, dejando una que otra marca.

Kitty obligó a Agust arrodillarse frente suyo y el pelirosa abrió sus piernas, para que Agust se posicionara entremedio de estas.

— ¿Y si me hace un oral?— Preguntó Kitty, mientras tomaba la nuca de Agust y hacia que este recostara su cabeza en su entrepierna.

— No soy de eso, cariño. Así que olvídalo — Dijo Agust, mientras sentia como Kitty acariciaba sus hebras— Sácate aquello de la cabeza, porque es lo único que no se va a cumplir.

— Nadie sabe— Dijo Kitty con una sonrisa ladina.

Agust se posicionó nuevamente y después se levantó del suelo, para sentarse al lado de Kitty, este se sentó en su regazo con sus dos piernas a los lados de Agust.

Kitty pasó sus brazos por el cuello de Agust y relamió sus labios deseoso.

— Al menos vamos a mi departamento— Dijo Agust— No vamos a hacer nada, pero estaremos mas cómodos.

— No quiero. Aquí empezó nuestra historia de amor— Dijo Kitty, mientras besaba el cuello de Agust y movia sus caderas, haciendo que el miembro de Agust rozara contra su trasero.

Agust gruñó ante eso y después tiró su cabeza hacia atrás, mientras sentía los movimientos del menor, sobre su miembro.

— ¿Le gusta?— Preguntó Kitty.

— Cállate y sigue— Gruñó Agust y Kitty sonrió travieso, mientras seguía con sus novimientos.

Pequeños jadeos salían de su boca, mientras que Agust maldecía por lo bajo. Kitty escondió su rostro en el cuello de Agust y comenzó a gemir sobre este, mientras hacía sus movimientos más placenteros.

— Mierda— Gruló Agust y junto al gemido de Kitty, ambos se vinieron sobre sus ropas. Kitty descansó su cabeza sobre el hombro de Agust, mientras que este ultimo tiraba su cabeza hacia atrás y cerraba sus ojos, para tratar de regular su respiración.

Kitty soltó una risa traviesa después de unos largos segundos.

— Si así nos corrimos, imaginese cuando estemos follando— Dijo Kitty y Agust lo miró con una sonrisa ladina.

— No pierdes el tiempo— Dijo y Kitty negó— Será divertido, Kitty.

— Ajá.

Kitty se salió de encima de Agust y se fué al baño, para darse una ducha caliente.

— Niño, de verdad, quiero ducharme— Dijo Agust— Me siento asqueroso.

— Es solo su semen, Agust.

— Es pegajoso, niño. Sueltame, quiero darme una ducha— Dijo y Kitty lo miró travieso.

— Tengo una idea— Kitty se acercó a Agust y abrió las piernas de este, para despues arrodillarse.

Agust no dijo nada, solo lo observó.

Kitty llevó sus manos hasta el cierre del pantalon de Agust y lo desabrochó, para después meter su mano dentro de este y sacár el miembro de Agust.

— ¿Sorprendido?— Dijo Agust con una sonrisa ladina, mientras veía como el menor tenía sus ojos bien abiertos.

Kitty no dijo nada y solo besó la glande del pene de Agust, para despues comenzar a dejar un camino de besos por toda la extencion del pene.

Agust mordió su labio inferior, mientras miraba a Kitty, este último sacó su lengua y metió el pene de Agust dentro de su boca, haciendo que el rubio gruñiera.

— Maldición, lo haces perfecto— Gruñó Agust, mientras sentía como Kitty succionaba su pene dentro de su boca, dándole aún más placer.

Kitty puso sus manos sobre los muslos de Agust y cerró sus ojos, cuando estos comenzaron a cristalizarse. Agust apretó sus manos con fuerza, mientras tiraba su cabeza hacia atrás y jadeaba ronco.

Agust alzó sus caderas, haciendo que su glande chocara contra la garganta de Kitty y a este le dieran arcadas, pero solo sonrió travieso.

Kitty apretó sus labios con fuerza, sobre el pene de Agust y comenzó a subír hasta que llegó a la glande de Agust y el semen del rubio comenzó a salir, manchando toda su boca y parte de sus labios.

Kitty miró a Agust y relamió sus labios, haciendo que el rubio mordiera su labio.

— Eso y mucho más le espera, Señor Agust.