Capítulo 25: Un día casi tranquilo

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“este… yo…”

No sabía que decirle a Alanna, no podía decirle que le había hecho daño a uno de los miembros de su gremio.

“fue un pequeño accidente Alanna, Leoni no hizo nada malo”

La voz calmada de Asuna llego hasta mis oídos, las palabras de ella habían calmado un poco a Alanna, su rostro se relajo un poco y tomó mi mano entrelazando nuestros dedos suavemente.

“pero de igual manera, ese cursor será un problema y a estas alturas del castillo no podemos despertar sospechas de que hay un criminal entre nosotros” dijo Lis con una voz seria. Recuerdo que la última vez que tuve mi cursor naranja termine aislándome y retando a un jefe por mí mismo.

“entonces que sugieren, ¿Leoni, alguna sugerencia?” me pregunto Klein

“bueno… la ultima vez termine alejándome de todos ustedes, así que…”

Alanna apretó el agarre en mi mano recordando lo que paso en ese entonces, ella me miraba con un poco de tristeza en su rostro, sabía lo que estaba pensando. Lleve mi mano derecha hasta su mejilla izquierda y con nuestras manos entrelazadas lleve ambas hasta mi rostro, besé la mano de Alanna para tratar de calmarla un poco.

“no te preocupes, esta vez no me iré”

El rostro de Alanna se calmo un poco y mostro un sonrisa muy bella.

No sé cómo podría seguir adelante si no fuera por ella

 

“Así que ella es la chica que logró domarte, Leoni, por algún motivo me lo esperaba”

“¡LIS!” gritó Alanna al ver a su vieja compañera de gremio, rápidamente se levantó alejándose  de mi lado hasta llegar a la chica de ojos cafés. Ambas se vieron en un cálido abrazo durante varios segundos dejándonos a todos con la incógnita de mi problema.

“Con respecto a mi problema, creo que será mejor que vayamos a mi habitación en el piso 66, para poder aclarar mejor las cosas”

“espera ¿Por qué tu habitación, no sería mejor un café o una posada, no se , algo donde si nos pasa algo hayan testigos”

“de acuerdo, vamos a la posada del pueblo más cercano”

Comenzamos a caminar hacia el pueblo más cercano, básicamente a unos pasos de la herrería de Lizbeth, caminamos por más de 10 minutos dirigiéndonos hacia una posada, las miradas de las personas se posaban sobre mí como un montón de gaviotas que esperan un pez con ansias. Llegamos a la posada con algo de dificultad pues la gente nos detenía constantemente preguntando cosas como: “¿por que viajan con un criminal?” o le hablaban a Alanna directamente “porque no dejas a ese criminal y vienes con un tipo honesto como yo” simplemente los ignorábamos, desde la puerta de entrada del pueblo me puse una capucha de color rojo en vez de mi abrigo de cuero usual así que no se podían ver mis ojos por la sombra de la capucha. Entonces un chico de pelo negro y ojos verde oscuro tomo la mano de Alanna y la sujeto por la cintura atrayéndola hacia él.

Sword Art Online: Fuerza Incontrolable (SAO Fan Fiction volumen I) Donde viven las historias. Descúbrelo ahora