25 Dolor y felicidad

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Lawrence miró a Bryan algo sorprendido, pero luego sonrió y dijo: - Muy bien, vamos de nuevo. - E inmediatamente volvió a cargar, apareciendo delante de Bryan en menos de un parpadeo. Acto seguido le dio una violenta patada a la velocidad del rayo, todavía apuntando hacia su estómago.

Bryan estaba sufriendo una cantidad excesiva de dolor por el último golpe y ahora entendía que el poder, velocidad y fuerza de un Sargento Caballero como Lawrence no eran algo de lo que él (quien ni siquiera había superado el Reino Sólido de la Magia Demoníaca) pudiese defenderse por completo.

Pero aun así Bryan no se sentía preocupado e incluso comenzó a sonreír con emoción. Eso se debía a que sentía claramente como la Esencia Mágica fluía en su interior cada vez más rápido, trabajando para restaurarlo, fortalecerlo y reduciendo los daños que recibía. Así que se esforzó como nunca antes para mantenerse sereno y se preparó para recibir la siguiente serie de ataques.

Justo cuando Lawrence comenzaba a ejecutar su patada, los pies de Bryan ya se habían alejado para retroceder a toda prisa, evadiendo el ataque como un relámpago. Sin embargo, Lawrence no se sorprendió en lo más mínimo y su postura no vaciló. A su patada inicial le siguieron una serie de feroces combinaciones de ataques con puños y piernas. Iba siempre detrás de Bryan e impidiendo que se alejara demasiado.

Lawrence podía aumentar sus habilidades físicas más allá de los límites de lo que los músculos podrían lograr empleando su Aura de Batalla para incrementar su poder de ataque. A pesar de la enorme agilidad que Bryan había adquirido recientemente, no pudo evitar que lo golpearan repetidamente en el cuerpo, hasta que no le quedó más opción que protegerse con los escudos. Los golpes resonaban por la sala de entrenamiento y la única parte que se las arregló para defender completamente era su cabeza, porque recibió dolorosos impactos en su pecho, cintura, estómago, brazos y piernas libres.

A medida que los ataques se incrementaban también lo hacía el dolor. Su velocidad de evasión se volvió comenzó a reducirse por la acumulación progresiva de daños, lo que aumentó todavía más el número de golpes que recibía directamente. Finalmente llegó a un punto que sintió como si sus piernas demasiado pesadas, casi como estuvieran hechas de plomo, de modo que cada movimiento le costaba una cantidad monumental de esfuerzo.

Si no fuera porque había estado practicando constantemente su magia y fortaleciendo su cuerpo todos los días, entonces Bryan se habría muerto en menos de un minuto bajo esa tormenta de ataques.

Cuando había enfrentado a Claude o Erick, ambos habían usado su Aura de Batalla directamente sobre su cuerpo para matarlo. Y en todas esas ocasiones, ese poder salvaje y dañino había terminado absorbido por la Esencia Mágica en el mismo instante en que entraba en contacto con su organismo, impidiendo que sufriese de demasiado daño.

En todas esas ocasiones no había sido realmente herido por el Aura de Batalla o quizá simplemente fue incapaz de apreciar cuan terribles eran los daños en su momento. Pero ahora le parecía muy evidente que había subestimado el poder de los Guerreros y los Caballeros. La terrible paliza a la que Lawrence lo estaba sometiendo le permitió entender cuan equivocadas habían estado sus estimaciones iníciales.

Si hasta el momento conseguía mantenerse en pie se debía únicamente a los efectos maravillosos de la Esencia Mágica en combinación con la Armadura Textil, que resultaba sorprendentemente efectiva a pesar de ser únicamente capas superpuestas de distintas telas. De no ser por eso, sus órganos internos habrían sido completamente destruidos en el instante en que el primer golpe impactó sobre su cuerpo. Ahora entendía por qué Claude había estado tan desconcertado cuando su ataque no le causó lo que debía haber sido una espelúznate y dolorosa muerte. También explicaba el por qué Erick ni siquiera dudó que lo había matado en cuanto recibió de lleno uno de sus golpes y no se molestó en comprobar sus signos vitales.

The Great Demon King I - Libro Primero El Bosque OscuroDonde viven las historias. Descúbrelo ahora