Nuestra Vida |Supercorp|

Prevalece

A/n:

Universalismo, utilitarismo, ambos tienen buenos puntos.

Julia = Pureza = worldkiller

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Lena estuvo días enteros experimentando con la kriptonita y diversas sustancias, hasta que finalmente creó una especie de piedra  se color negro. La cual no le daba mucha confianza, por así decirlo.

Al terminar de leer el dichoso libro sagrado, tiene una nueva forma de detener a Reign.

— Lee… traje el almuerzo. — Anuncia Kara, ingresando al laboratorio con su traje de Supergirl.
Mira alrededor y no hay señales de Lena pero puede ver a Reign mirándola desde la celda de contención. — Hmm, Hola.

— Oh, ¿Qué veo? Supergirl… — Reign sonríe desde su posición, su tono lleno de burla. — La heroína con complejo de Dios.

La kryptoniana resopla al escucharla.

— Okey, voy a ignorarte y fingir que no dijiste eso.  — Kara deja la comida en la mesa de trabajo de Lena ¿Dónde estaba su esposa?  Nota la piedra oscura en la mesa y le da mucha curiosidad, no había visto algo así antes… Sólo un pequeño vistazo de cerca no haría daño.

Lena ingresaba al laboratorio revisando su tablet y cuando levanta la mirada ve a Kara tratando de tocar su último descubrimiento.

— No la toques.

La advertencia de Lena llegó muy tarde, Kara ya había tocado la piedra e instintivamente retrae la mano, como si se hubiera quemado.

— Auch.

Reign se ríe al ver la mueca en el rostro de la rubia.

— ¿Qué es eso? — Pregunta Kara, mirando la piedra con el ceño fruncido.

Lena le hace una seña para que espere un segundo, mientras tomaba el control e insonorizaba la cámara de contención para que Reign no pudiera escucharlas.

Se acerca a su esposa y toma su mano, revisando que no tuviera cortes, ni abrasiones. También evalúa que Kara no estuviera con algún tipo de dolor.

Suspiró y se colocó un par de guantes para tomar la piedra.

— Es algo que creé mientras jugaba con la kriptonita. Según la teoría del libro, podría usarse para separar a Reign de Sam. — Explica Lena, mientras la guardaba en un maletín especializado. — Pero eso parecía ser a costa de la energía vital de Sam, así que encontré una mejor forma de resolver esto o eso sugiere el bendito libro. ¿Te sientes diferente?

Kara se encogió de hombros, después de ese pequeño ardor no se había sentido diferente. — Nop.

— Ok, parece que no funciona. — Murmura Lena, aliviada. — Eso es bueno.

— Entonces…. — Kara pasea por el laboratorio, viendo todos los cables y las sustancias, que incluso parecían de origen alienígena, dispersas por el lugar. Esta vez sin tocar nada, por supuesto. — ¿Cómo sigue el plan?

— Voy a proyectarme en el subconsciente de Sam y decirle cómo puede vencer a Reign. — Afirma Lena, abriendo la bolsa de comida que había traído Kara. — Sólo ella puede hacerlo. Pero no ha vuelto a tener el control de su cuerpo, así que no he podido hablar con ella. Por eso tengo que meterme en su cabeza.

— ¿Lo de la proyección sigue siendo igual de peligroso, cómo lo que hablamos anteriormente o es una especie de realidad virtual? — Cuestiona Kara, sentándose en la mesa de Lena y robándole un bocado de su comida.