Nuestra Vida |Supercorp|

El odio que dan

Al día siguiente Kara se despierta sola, frunce el ceño al extender el brazo en una cama vacía.

Se levanta y se frota los ojos para quitarse el sueño, revisa a Luka y ve que está bien, pero aún sin señales de Lena.

Sube las escaleras y al abrir la puerta, ve a Lena durmiendo con Linda.

— Genial, ya empezó su malvado plan para robarse a mi esposa. — Murmura Kara, antes de volver a cerrar la puerta y darles unos minutos más de sueño.

Bajó y empezó a preparar el desayuno, como era sábado, podía tomarse su tiempo.

Prepara tostadas, pone el café y exprime un poco de jugo.

Colocando todo en la mesa junto a la mermelada y el queso, está orgullosa de sí misma, solo había quemado tres tostadas... no estaba mal.

Va a despertar a Luka.

Se sienta en el borde de su cama, frotando su cabello suavemente.

— Aonah.

— Jeju. — Luka sonríe con los ojos medio cerrados, estirándose y dejando escapar un bostezo. — ¿Ya es de día?

— Sí, ven vamos a lavarte la cara. — Kara lo ve extender los brazos y lo levanta, poniéndole sus zapatos.

— okhahsh (dormir) — Murmura Luka.

Kara lo lleva al baño, riendo por las palabras en kryptoniano que suelta estando medio dormido.

Luego de lavarle la cara, su hijo estaba completamente despierto.

Ella besa su mejilla. — ¿Qué quieres desayunar?

— Cereales. — Responde Luka.

— Gran elección. — Felicita Kara, sirviendole yogurt con cereal en un tazón.

Ve a Linda bajar con Lena.

— El desayuno está listo. — Anuncia Kara.

Lena se desliza por su costado, atrayéndola por la cintura para besarla. — Gracias, cariño.

Linda le sonríe. — Buenos días.

— Buenos días. — Responde Kara, esto de verse en el espejo dejaba de parecerle raro de a poco.

Luego de desayunar, Kara y Lena estaban en su cuarto, preparándose para el trabajo.

— Te extrañé esta mañana. — Se queja levemente Kara, mientras cerraba los botones de la camisa de Lena.

Lena se burla, ¿su esposa estaba haciendo puchero? — ¿Celosa, Danvers? Ella es tú.

— Ella no es yo- bueno sí, pero no es así. — Se queja Kara, sabe que Lena entiende que aunque sea una parte de ella no es ella y solo lo dice para molestarla.

— Ella estaba asustada por los truenos. — Explica Lena, poniendo sus manos sobre las de Kara que aún seguían en su camisa. — No podía dejarla sola...

La expresión de Kara cambia al entender. — Linda es...

— Lo sé. — Lena la abraza lentamente y le besa la mejilla.

Recuerda cuando Kara le contó lo aterrada que estaba de los truenos cuando había aterrizado aquí en la Tierra. Cómo Alex la había ayudado a superarlo y gracias a eso, hoy en día podía dormir ignorando el estruendo de los truenos. Linda era como una versión joven y asustada de su esposa.