Etéreo | Eva & Hugo.

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Narra Eva

Habían pasado varios días desde ese día. Hugo y yo supongo que estábamos mejor que nunca, nos enrollábamos por las esquinas como dos niños que quieren esconderse de sus amigos al jugar al escondite, y nos la pasábamos bien, nos lo pasamos bien.

Esta noche había preparada una fiesta en un local que había alquilado el delegado de mi curso y el de segundo. No tiene ningún motivo claro, pero estamos todos invitados y supongo que lo que me vendrá bien es ir.

Anne está súper entusiasmada con esa fiesta, y no iba a ser yo quién le dijera de no ir a acompañarla.

- ¿Qué te vas a poner? - Me dijo mi amiga sonriendo mientras miraba mi armario con ilusión.

- No lo tengo muy claro... Supongo que ese vestido. - Señalé uno celeste, algo corto y de volantes. Bastante bonito, la verdad.

- Pues es precioso. - Anne sonrió y lo sacó agarrando la percha. Le dio un repaso a la prenda y me lo pasó. - Con estos tacones quedaría genial. - Cogió unos transparentes y los colocó sobre mi cama.

Yo asentí e hice una mueca de conformidad.

- No te apetece mucho, ¿no? - Me preguntó mi amiga al notar mis muecas y mi poco entusiasmo por elegir el vestuario.

- ¿Eh? Sí, bueno, no mucho, ya sabes, pero si a ti te hace ilusión, voy. No creo que lo vaya a pasar tan mal, o eso espero. - Solté una pequeña risa simpática y empecé a cambiarme. Delante de Anne no tenía por qué tener tapujos para eso y no me daba vergüenza.

Acabé de cerrarme el vestido azul y agarré mi pequeño bolso colgándolo en mi hombro.

- Podemos irnos. - Sonreí y salí con mi amiga de casa.

Al poco, llegamos al local.

Estaba bastante ambientado. Muchas luces, música a toda voz y gente bailando tanto fuera como dentro.

Conocí la mayoría de las caras así que esa parte me tranquilizó.

Ambas entramos y nos adentramos entre la muchedumbre hasta llegar a la barra. Yo me pedí un puerto de indias con tónica y Anne un mojito.

Nos sentamos en unos taburetes, algo incómodos para la ropa que llevábamos en el momento pero nos adaptamos bien.

Busqué con la mirada al rubio que vivía en mi casa disimuladamente, sabía que venía pero no sé ni con quién ni para donde habrá tirado.

- No sé donde están los del insti, eh. - Me dijo Anne alzando la voz, yo negué.

- ¡Yo tampoco! - Me levanté. - ¿Te vienes a buscar?

- Vamos a buscar a Rafa, fijo que está por ahí.

Agarré la mano de mi amiga para no perdernos ni una ni la otra y avanzamos entre las multitudes para buscar a Rafa y sus amigos, aunque yo aún intentara buscar al rubio.

Hasta que les vimos.

- ¡Hola, chicas! - Rafa sonrió felizmente y abrazó a la de rizos y me dio un par de besos a mí. - ¿Qué tal vais? ¿Todo bien?

- Sí, todo genial. - Sonrió Anne.

- Ahí está Gèrard, me ha preguntado por ti.

- A-ah... Em... Sí, ahora voy a verle. - La sonrisa de Anne se apagó un poco y se removió incómoda dándole un trago a su bebida. Yo torcí el labio en una mueca de incomodidad al tener en cuenta que el moreno alto y de gafas estaría acompañando a su amigo, y no era algo que me resultaba especialmente agradable.

La noche avanzó bien, aunque al final yo me acabé quedando con Rafa y sus amigos y sin Anne, no sé para donde habría ido, pero no la volví a ver más en toda la noche.

Al final le acabé dejando un mensaje en su chat y salí del local con los chicos.

- ¿Necesitas que te lleve a casa? - Me preguntó Jesús amablemente. - No es plan de que te vayas sola, hay gente con mala ostia.

- Pretendía irme con mi hermanastro pero no le veo.

- Hugo está... Por ahí. - Expresó Samantha. - Entretenido.

- Entretenidísimo. - Vaciló Rafa frunciendo el ceño.

Ladeé mi cabeza sin entender el mosqueo repentino de Rafa y el comentario de Samantha, Jesús negó sonriente y me acarició la espalda.

- Pasa de ellos. Ya volverá. ¿Nos vamos?

- Sí... Claro, vamos.

- Pero Eva, no te vayas aún, tía. - Añadió Samantha. - Vamos a quedarnos aquí fuera.

- Bueno... Como digáis, no sé qué más hacer aquí.

- Cuéntanos algo. ¿Cómo es mi primo en casa?

Suspiré. - Peculiar.

La rubia soltó una risa leve y asintió.

- Lo sabía, siempre es así. No te dará mucho coñazo, ¿no?

- No, no demasiado. Tiene sus días, digamos. - Sonreí levemente de medio lado mientras daba toquecitos con mis uñas en el banco de madera que tenía justo al lado.

- Bueno, me alegro pues. - Samantha dejó una caricia en mi pelo sonriente. - Que pelo más bonito.

- Muchas gracias. - Seguí sonriendo sincera y miré a los dos chicos. Jesús permanecía con su sonrisa radiante como siempre y Rafa miraba su móvil mientras movía su pierna con nerviosismo. Me daba curiosidad saber que pasaba.

- Vámonos, estoy harto. - Expresó el moreno de rizos.

- ¿Pero te puedes relajar? Tampoco es para tanto. - Comentó Samantha rodando los ojos.

- No lo entiendes, Sam.

Jesús hizo un gesto de parar con su mano y fue hacia su coche. No había bebido así que podía conducir con tranquilidad.

Nos subimos los 4 al coche y volví a mirar el móvil por si había alguna señal de vida por parte de Hugo o de Anne. Ninguna.

Suspiré levemente por no hacer ruido y miré por la ventana mientras el paisaje avanzaba.

Cuando llegamos a casa me bajé del coche y sonreí a Jesús de forma sincera por haberme traído. Me despedí de la mano de los 4 y entré en casa.

Al ir subiendo las escaleras, empecé a escuchar ruidos de una cama y algunos gemidos. Resoplé al dar por hecho que era Hugo, otra vez, así que negué con la cabeza y me fui a mi habitación.

Cerré la puerta y me senté en mi cama.

- Ya nos veremos.

- Sí, te llamaré.

La voz femenina me resultaba familiar, y no era precisamente porque fuera Anaju. Intenté ignorarlo y le puse los auriculares a mi móvil. No soy quién para meterme en la vida de Hugo, solo han sido dos besos. Fin.

★

Siento si este capítulo es más cortito, pero he plasmado todo lo que quería hacer y espero que os guste.

Decidme, ¿quién pensáis que es la chica con la que ha estado Hugo?

¿Pensáis que verdaderamente a Eva le da igual lo que haga Hugo con otras chicas?

Os leo <3

Tw: @noerasfeliz