Capítulo 5. Planes y disculpas.

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Mis ojos lo buscan, no puedo evitarlo. Mi mirada se regala de su sonrisa, amo verlo feliz. Justo ahora sus labios sonríen con alegría a pesar de que tuvo un largo día de trabajo. Sin embargo, eso no parece mermar su energía porque justo ahora se entretiene preparando platillos tradicionales de Bangna al lado de la hermana mayor de Kenji quien es la cocinera en jefe de este lugar.

A Mix le gusta cocinar, eso es un hecho. Ahora mismo luce tan concentrado y adorable que me es prácticamente imposible apartar mis ojos de él mientras bebo un poco de vino especiado al lado de Kenji. Sahaphap es feliz, puedo sentirlo y entonces sus ojos buscan también los míos y cuando me sonríe en la distancia quisiera poder enseñarle ya la joya llena de luz de estrellas que moldeé para él en el bosque. Le devuelvo la sonrisa y le mando un beso al aire haciendo que Kenji y su hermana se rían de los dos.

—Demasiado amor, ustedes dos dan asco y me parece una falta de respeto para la comunidad en soltería que ustedes dos existan—dice mi amigo y yo me encojo de hombros mientras bebo un poco del vino especiado.

—Ahora dilo sin morirte de envidia—digo y Kenji me da un golpe amistoso en el hombro y yo rompo a reír porque vamos, también estoy lleno de felicidad.

Hace mucho que no me sentía así, como si pudiera salir volando en cualquier minuto hacia el techo. Hay demasiada dicha en mi interior y por primera vez en mi vida no tengo miedo de perderla. Porque antes de que viniera a Bangna, la felicidad me asustaba. Para mí la felicidad era solo una tregua pero ahora sé que será el principal componente de mi existencia.

Y no, sé que no tendré un "felices por siempre" como en un cuento de hadas pero sí sé que habrá felicidad en la gran mayoría de mis días. Y eso es así porque Mix estará ahí. Aunque haya una guerra esperando estallar sobre mí, sé que Mix estará aquí para luchar conmigo.

— ¿Es cierto que pronto tendremos la fiesta de Promesa de los dos?— pregunta Kenji y yo volteo a mirarlo y sonrío de nuevo sin poder evitarlo.

—Debo planearla con mi hermana pero sí— digo con calma—. Mi cumpleaños será dentro de dos meses, supongo que será un buen momento para hacer el anuncio oficial de nuestra unión. Antes también debo pedir la aprobación y la bendición del consejo. Los jefes deben estar al tanto de que Mix y yo subiremos al monte Aran apenas los ríos del bosque comiencen con su deshielo.

—¿Te sientes preparado para hablar ante el consejo?— pregunta Kenji de modo apenado y yo suspiro de forma profunda antes de responder.

No lo sé, esa es la verdad. No sé cómo me recibirán en el consejo aunque las visitas de Aof en estos últimos días me han mostrado que mi antiguo protector ha vuelto a ser el hombre amable y cálido que me acompañó después de que mis padres murieran. Pero no puedo cantar victoria aún. Aof siempre ha sido amable conmigo debido a que era el mejor amigo de mi madre y al ser el jefe más joven del consejo, no tiene el mismo nivel de autoridad ni de poder que el jefe Arthit, por ejemplo. No sé qué esperar del consejo. Hasta el momento han respetado mi deseo de no acudir a las audiencias pero supongo que ya no puedo postergar mi encuentro con ellos ni un solo día más.

—Le pedí a Aof que pactara una audiencia con ellos este fin de semana— respondo con algo de pesar—. Le pedí a Mix que fuera conmigo y él aceptó. Sin embargo, no sé cómo van a reaccionar cuando les pida que dejen de pensar en mí como a un traidor. No quiero someterme a su escrutinio nunca más, de hecho, si intentan hacerlo, sé que podría defender mi mente de ellos causándoles un daño irreparable para siempre. Antes se aprovecharon de mi debilidad espiritual pero Kenji, soy muy fuerte ahora.

—Lo sé, Nammon dice que en la familia no ha existido un lobo plateado como tú— dice mi amigo con una reverencia franca que me hace sentir tímido—. No creo que el consejo siga siendo tu enemigo, tú mismo lo has dicho. Ahora tienes un poder enorme, no creo que nadie quiera enfrentarse a ti cuando saben que has cegado a Seedum.

SolitarioDonde viven las historias. Descúbrelo ahora