⚜Norte y sur (2/2)⚜

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Me encontraba junto a Toph, sus alumnos, Sokka y Malina, los segundos habían venido a ayudar con los escombros.

- Creo que debo irme Sokka, mi presencia solo está causando tensión. – dice Malina –

- Malina, tú eres la única que conoce los planes para comenzar esto, te necesitamos aquí. Además, recuerda que papá consiguió que la mayoría de los sureños estuvieran a favor del proyecto.

- Entonces... ¿y eso?

Tras la balla de metal, muchos de los sureños se encuentran con carteles protestando sobre nosotros los extranjeros, quieren que nos vayamos.

- ¿Hablas de los protestantes? Ellos cambiaran de opinión cuando vean los beneficios que esto generara.

Me acerco a ella colocándome a su lado, mientras miro a los protestantes.

- No bajes la mirada y siente orgullosa de lo que estas haciendo, puede que cometieras errores, pero ¿Quién no los ha cometido alguna vez? Ahora estas haciendo lo correcto, no te avergüences y míralos con la cabeza bien alta. – le digo –

Noto como Malina sonríe y asiente un poco más aliviada.

- Sabia que Sokka se había casado con la mano derecha del señor del fuego, uno de los integrantes del equipo avatar que puso fin a la guerra, pero no que podías ser tan excepcional al hablar, haces honor a tu puesto y a lo que cuenta Hakoda de ti.

- Ser excepcional al hablar forma parte de mi trabajo, debo mantener a todos bajo control, además de comandar las tropas, debo mantener un perfil firme, pero gracias por el halago, eres una buena persona.

Antes de que podamos seguir hablando dos aeronaves descienden desde el cielo, una de la nación del fuego y otra del reino de la tierra.

Sokka y yo nos acercamos para saludar.

- ¡Señor del fuego Zuko, rey tierra Kuei! – grita Sokka saludando –

Ambos le dedican una sonrisa y se abrazan.

- ¡Muchas gracias por venir! – les dice Sokka –

- ¡Sokka! Es bueno verte, ¿Qué tal te has tomado la sorpresa? – le pregunta –

Zuko me mira y niego efusivamente con la cabeza para que se calle, lo pilla al segundo sin comprender porque todavía no le he dicho nada y traga saliva.

- ¿Qué sorpresa? – pregunta Sokka –

- La sorpresa de... ¡_______! Claro, el hecho de que haya podido venir a verte.

- ¡Ah! Ha sido genial, la echaba de menos. – me da un beso en la mejilla –

Zuko se acerca y me abraza.

- ¿Por qué no le has dicho nada? – me susurra –

- Solo tienes que mirar a los protestantes para saberlo.

Nos separamos y saludo al rey de la tierra, quien tiene a su oso abrazándolo por el frio.

- ¿Estas seguro de que puedo estar aquí? No quiero causar problemas. – dice Zuko mirando a la gente tras la verja –

- Ah, no te preocupes por ellos. – responde, mientras comenzamos a caminar hacia ellos para salir del recinto – Cuando vean lo que estamos haciendo ellos cederán.

- Haciendo amistades con extranjeros, has estado lejos mucho tiempo. – comenta uno de ellos –

- Incluso se ha casado con una cenicera, has olvidado donde perteneces Sokka. – comenta otro –

Embers (Sokka x tú) Donde viven las historias. Descúbrelo ahora