Capítulo 3

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Stella, se encontraba en su estudio buscando inspiración para sus nuevos diseños, desde el día que la salvaron (hace dos meses) no paraba de pensar en ese valiente soldado que le salvó la vida, era una lastima que no alcanzo a ver su rostro, pues él estaba cubierto de pintura (su camuflaje) y no pudo ver con claridad, lo único que recordaba de él era el color café claro de sus ojos.

— Señorita Solei, he reservado su vuelo para la próxima semana ¿Está bien?— preguntó su secretaria entrando al estudio.

— Está bien, ¿Te has comunicado con la revista Belivix?— preguntó mirando la hoja en blanco donde aún no dibujaba nada

— Sí señora, esperan poder tener la sesión exclusiva de fotos de su nueva línea dentro de dos meses, justo antes de su lanzamiento.

— Bien, ¿Has comprado el regalo de cumpleaños de mi madre?— preguntó de nuevo y esta vez su secretaria se puso un poco nerviosa.

— Sí señorita, pero...— Trago saliva bajando la mirada— Su padre le envió una invitación a una cena, para el mismo día de la fiesta de su madre— Le dijo.

Stella la miró por primera vez desde que entró a la sala. Sus padres se separaron hace 15 años, cuando ella tenía solamente 10, y a pesar del tiempo transcurrido aún la afectaba mucho eso, no podía pasar un rato con uno porque el otro irrumpía en su planes, por eso hablaba muy poco con ellos.

— Cancela con mi padre, prometí a mamá que esta vez iría— le dijo ella después de un momento.

— Pero la invitación decía que hay algo importante que le quiere decir.

— Lo llamaré más tarde para reprogramar entonces— Contestó ella simplemente— ¿Hay algo más?— Preguntó.

— No, yo me retiro— Salió del estudio dejando a Stella sola.

Miro la invitación que le envió su padre, no hablaba con él desde hace casi medio año, tal vez debería ir... Pero a su madre llevaba más tiempo aún sin verla. Cuando estuvo secuestrada el que reportó su desaparición fue su primo Sky, si no nadie lo hubiera notado posiblemente.

Tomó su teléfono con pereza para marcar a su padre.

— Habla con Radius Solei, ¿Que se le ofrece?— Escucho la fría voz de su padre en la línea.

— ¿Papá? Soy Stella— Saludo ella.

— Stella hija, que bueno escucharte— Su voz ya sonaba más cálida— Supongo que haz recibido la invitación.

— Si, de eso quiero hablarte, no podré ir, no sé si lo recuerdes pero ese día será el cumpleaños de mi mamá, y no quiero volver a quedar mal con ella— le explicó.

— Pero querida tengo algo importante que decir— insistió.

— Papá, quiero acompañar a mi madre ese día, no podré ir contigo, puedes decirme eso tan importante otro día— Replicó Stella.

— ¿Qué te parece entonces vernos antes?— le pregunto de nuevo.

Stella guardó un momento en silencio, ¿Que podía ser tan urgente que pedía verla para decirle? Revisó su agenda una vez antes de contestar.

— De acuerdo, hagámoslo... ¿Qué te parece si voy a tu casa hoy a cenar?— preguntó.

...

Stella estaba en su casa preparándose para ir donde su papá. En eso alguien llamó a su teléfono. Al mirar la pantalla estaba el nombre de Sky, su primo, contestó.

— ¿Stella?¿Estás allí?— preguntó, su voz sonaba agitada.

—¿Qué pasa Sky?— contestó mientras se maquillaba.

EL MISTERIO DE LAS WINXDonde viven las historias. Descúbrelo ahora