Verdad involuntaria

Capitulo 18 (P-2)

- Eruhaben-nim.

- ¿Que sucede? Choi Han.

Choi Han no le dijo nada a Eruhaben y en su lugar miro a Raon con una expresión significativa. El rostro de todos se endureció porque entendieron lo que Choi Han pretendía. Aun había muchas cosas que no comprendían de este mundo y la relación de Choo Han y esta versión de Cale, pero confían en el juicio de Choi Han.

Eruhaben tomo nuevamente a Raon en brazos que flotaba junto a ellos.

- ¿Qué haces Goldie Gramps?

-Solo será un momento, lo prometo.

Mientras tanto, una feroz batalla en contra del monstruo de grado 1 se desato.

- ¡Ataquen! ¡Usen las rutas que predijo Kim Rok Soo!"

Todos sus compañeros de equipo habían comenzado a cargar hacia el monstruo.

- ¡Líder del equipo, la dirección de las tres en punto! ¡Dos de ustedes van al norte mientras que tres van al noroeste!

Kim Rok Soo apoyo desde atrás, gritando constantemente indicaciones y dando respaldo a su equipo. Pero aun con su apoyo y su información el monstruo era demasiado fuerte, algunos de sus compañeros ya estaban muertos y otros estaban heridos de gravedad.

Una fuerte explosión lleno el área cerca de Choi Jung Soo.

- ¡Choi Jung Soo!

"¿Que está haciendo ese idiota distrayéndose en medio de una batalla?"

Al ver que Choi Jung Soo no pudo reaccionar a tiempo, Kim Rok Soo tomo un enorme pedazo de metal de los escombros y la uso para bloquear un pedazo de pared que voló hacia él.

- ¡Oye! ¡Choi Jung Soo!" ¡¿Quieres morir?! ¡¿Por qué te estás perdiendo de repente?!

- ... Kim Rok Soo.

El monstruo lanzo un ataque de nuevo, Kim Rok Soo fue arrojado a un lado y rodó por el suelo, su brazo se había torcido, estaba roto y él estaba sangrando por su boca.

Eruhaben quiso cubrir a Raon una vez más con sus ropas, pero esta vez Raon no lo permitió.

- Goldie Grams, no voy a intervenir.

- No es eso, pequeño niño.

- Yo quiero ver a mi humano... incluso si es doloroso.

Choi Jung Soo viéndolo en ese estado, se dio así mismo una palmada en el rostro y se dirigió hacia Kim Rok Soo

- ¡Solo apóyanos desde la retaguardia!

Choi Jung Soo tomo al herido Kim Rok Soo y lo saco del lugar.

- ¿Por qué estás empujando?¡¿No ves que mi brazo está roto?!

- ¿Quién le dijo al apoyo de la retaguardia que viniera hasta aquí?

- ¿Quién te dijo que te pusieran a pensar en otras cosas en medio de la batalla?

Kim Rok Soo vio a Choi Jung Soo dirigirse una vez más hacia el monstro, uno a uno sus compañeros caían, entonces los vio a ellos, primero vio caer a su líder de equipo Lee Soo Hyuk y luego a su compañero de equipo Choi Jung Soo que estaba de rodillas respirando con mucha dificultad.

- ¿Líder de equipo?...

En medio del peligro y mal herido Kim Rok Soo se adentró hacia ellos, el primero en alcanzar fue Choi Jung Soo.

- Oe, Choi Jung Soo, levántate, voy a sacarte.

El débil y gravemente herido Choi Jung Soo, alzo la mirada para encontrarse con los ojos pávidos de Kim Rok Soo, entonces le dio una débil sonrisa.

- Me siento aliviado, al menos tú sobrevivirás.

En ese momento el cuerpo de Choi Jung Soo cayo completamente.

- ¿¡Choi Jung Soo!? ¡Choi Jung Soo! ¡Choi Jung Soo!

La voz de Kim Rok Soo comenzó a sonar diferente con cada llamado a su amigo, los que ahora son gritos, parecían más una suplica.

- ¡No! ¡No! ¡Choi Jung Sooo!

*Drop. Drop. *

Al igual que la primera vez que Choi Han presencio este acontecimiento, estaba llorando, cada que recordaba esta tragedia y la expresión en el rostro de Kim Rok Soo, su corazón se apretaba. Junto a él, Rosalin, Raon e incluso Mary, también lloraban, mientras los demás evitaban la mirada con expresiones indescriptibles.

Alberu que conoció a Lee Soo Hyuk y Choi Jung Soo como el tigre negro, supo el aprecio y cariño que Cale les tenia, por eso pudo imaginar lo que él estaba sintiendo justo ahora. Él, al igual que los demás contenían desesperadamente su deseo de ir hacia Cale.

Verlo en ese estado era tan desgarrador, tan injusto, ninguno entendió porque un hombre tan bueno tenía que pasar por el dolor de perder lo que amaba una y otra vez, ciertamente es un dolor que la mayoría ha experimentado, por eso temen imaginarse pasando por ese terrible momento tantas veces.

El deseo de proteger, la característica más arraigada a la personalidad de Cale y para ellos la más alarmante, tanto es ese deseo que no le importa arrojarse a sí mismo al peligro para lograrlo, incluso si termina seriamente herido, enfermo e incluso moribundo. Él lo hará las veces que sean necesarias, el soportará cualquier tipo de dolor y tormento, demostrando que el dolor de sus heridas nunca será comparable al dolor que guarda en su alma.

Alberu recuerda que la razón porque la que están aquí, comenzó justamente por lo que él llamó en ese momento, una de sus típicas imprudencias. La corona que debió posarse su cabeza, sabiendo que estaba maldita por la advertencia de Raon, él no dudo en tomarla. Alberu pone su mano en su pecho con la intención de aligerar el dolor que siente, pero no tiene éxito.

Ron, incluso si en el principio dudó de las palabras de Choi Han y de su Alteza, ahora está seguro. Este hombre frente a él es su joven cachorro, el cachorro terco e imprudente que lo mira con recelo pero que sabe que lo aprecia, el mismo cachorro que le salvo y le dio un brazo nuevo, también él que le ayudo a lograr su anhelada venganza y recuperar parte de lo que le había sido quitado. Por eso, a pesar de que hay muchas cosas que no entiende, Ron, justo como los demás, siente profunda amargura al ver a su cachorro en ese estado.

Cuando la angustiada voz de Kim Rok Soo no puede ser escuchada más, ven que sus labios aún siguen moviéndose y de ellos sale apenas un susurro, él no para de mirar impotente el cuerpo de su amigo con ojos nublados y vacilantes, como aquel que se niega a creer lo que ve, por eso continúa pronunciando su nombre, pero sus cuerdas vocales se niegan a seguir funcionado correctamente.

Había tantos sentimientos en su interior, sentimientos que nadie desearía experimentar jamás y de entre ellos, dos prevalecieron y lastimaron más que los demás, el sentimiento de pérdida y la culpa. Por eso Kim Rok Soo no lloró, sus ojos permanecieron secos, sus lágrimas estaban allí, ahogando su corazón, pero no salían, él no lo permitió, se quitó a si mismo el derecho a llorar, el derecho de ser consolado y el derecho de ser perdonado, dejando todo para sí mismo.