CAPÍTULO 4.
Michelle- Sir Chloe
¿Qué estaría pensando de mí?
Es lo primero que me pregunto cuando pierdo sus ojos de vista. Sé que me odia, Troy es muy rencoroso. Pero yo también lo odio, odio lo que me hizo y como me rompió el corazón en pedazos.
—¿Estás bien?—Jackson pregunta—Estás pálida.
—A lo mejor ha sido la bebida—no creo que sea mentira del todo, al fin y al cabo.
—¿Pero crees que...?—el coche se detiene, levanto la vista de mi regazo y veo que estamos delante de uno de los hoteles más lujosos de Manchester. Abro los ojos sorprendida, girándome hacia él.
—¿Es aquí dónde estáis alojados?
—Sí, ¿pasa algo?
Sacudo la cabeza.
—No, no. No sabía que...Da igual—suspiro y me llevo una mano en la frente.
Jackson abre la puerta y segundos después la mía, me hace bajar y me agarra de la cintura. Empezamos a andar hacia la entrada del hotel, traspasamos las puertas y miro a mi alrededor, la última vez que estuve aquí es porque tenía la fiesta de graduación en el restaurante.
Subimos al ascensor y las puertas se cierran en nuestras narices, nos quedamos en silencio.
—¿Cuántos pisos son?—pregunto.
—Trece.
—Vale—asiento sin saber qué hacer. Miro la pequeña pantalla que indica los pisos que vamos subiendo. Número cinco—. Jackson...
Me callo cuando sus labios atrapan los míos. Le sigo el beso y pronto siento sus manos recorrerme la cintura, mi espalda impacta con la pared del ascensor y siento un escalofrío por el metal.
Acaricio el vello de su nuca mientras él empieza a bajar sus manos, aprieta mi trasero, mantiene ahí las manos y yo hago viajar las mías por sus bíceps.
"Ding"
Ese ruido nos hace separarnos.
El ascensor se abre y recorremos de la mano el pasillo hasta que Jackson me indica la habitación. La abre y nada más se cierra nos volvemos a besar.
Aterrizamos como podemos en el colchón, mi espalda agradece la textura blanda, mi cuerpo empieza a relajarse. Jackson se quita la camiseta negra que traía mientras yo apoyo mis codos en la cama, observándolo.
Sus pupilas dilatadas, unos ojos oscuros, y una sonrisa provocadora.
Se inclina hacia mí y baja los tirantes de mi vestido.
Deja húmedos y calientes besos por mi cuello y mandíbula, haciéndome echar la cabeza hacia atrás para darle mejor acceso.
Su mirada fría y azulada aparece en mi mente. Frunzo el ceño y trato de deshacer esos pensamientos.
Las manos de Jackson se deslizan por mis muslos, hacia mi sexo.
Su lengua mojando el papel del cigarrillo mientras no dejaba de mirarme.
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Después de aquel día © [#2] (Pausada)
RomanceAngélica y Troy no se ven desde hace más de dos años. La última vez que se vieron, ella tenía dieciséis años y las cosas no terminaron de la mejor manera. Ahora Angélica debe empezar la Universidad, y con ello debe solicitar una plaza en la residenc...