Cabe aclarar que este episodio no afectara en nada a la historia, es mas podría considerarse como una realidad similar, ya que la historia trata de seguir la continuidad de la serie. Con todo esto felicidades a nuestro psíquico favorito.
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Esta mañana el peli-rosa se encontraba arreglándose para ir al punto de encuentro donde todos los días veía a la joven de estructura delicada e irse a la escuela juntos, de hecho esa era una de las razones por las que su humor se veía más flexible a la hora de relacionarse con sus compañeros, después de todo a la joven peli-negra le encantaba el salir con sus amigos ya sea con la compañía del psíquico o no, aunque los jóvenes se encontraban más cómodos al estar juntos.
Saiki ya estaba enlistado cuando su teléfono sonó, tal vez antes no le tomaba la mínima atención a los mensajes que llegaban, pero ahora este era el método por el cual se comunicaba con Alis para reunirse a ayudar a la joven a recargarse, por desgracia para el joven peli-rosa el mensaje no venía con las intenciones con las que usualmente venían.
*Alicia*
-Lo lamento Saiki pero hoy no asistiré a la escuela, estaré terminando algunos encargos del café Mami con Chisato-
-Lo entiendo...pero que pasara cuando te descargues-
-No te preocupes, estaré bien, me inyectare una de las dosis de emergencia-
-Está bien-
Y con eso el joven daba perdido su buen humor. No es que fuera una persona posesiva con Alis, pero el hecho de que el fuera conocido por "su gusto a la tranquilidad", así que la joven evitaba el molestarlo y sofocarlo, aunque la presencia de la joven le agradaba, ya sea el tiempo que sea. El peli-rosa decidió desviar sus pensamientos relacionados con la joven y bajar de su cuarto para tomar su desayuno.
-Buenos días Kuu, awww miren a mi pequeño niño, parece como si fuera ayer que naciste- la voz y los pensamientos amorosos de su madre lo despertaron del todo, el peli-rosa solo asintió como de costumbre mientras que Kurumi le servía su desayuno junto con una gelatina de café especial.
El psíquico término su plato de Wafles junto con su gelatina de café especial, después del desayuno se despidió de su madre antes de que su padre le pidiera llevarlo a su trabajo. Ese último pensamiento de su madre le recordó que el día de hoy era su cumpleaños, al parecer se habia encontrado demasiado distraído como para recordarlo.
-Oh compañero que sorpresa verte- al parecer se había tardado tanto en salir de su casa que sus amigos lo habían interceptado.
-Pensamos que te irias con Alicia como de costumbre- y Kaido no exageraban desde que el psíquico y la mestiza habían empezado a irse juntos, era difícil el verlo a esta hora sin la compañía de la joven.
-No me digas que han peleado- tal vez Nendo lo había dicho en forma de broma, eso había dejado al peli-rosa pensando si había hecho algo para molestar a la joven.
-Eh, no digas tonterías Nendo, sabes que ellos son lo más maduros de todos nosotros, además si Alis se hubiera molestado con Saiki me lo diría verdad- en ese momento el peli-rosa no sabía si agradecer o golpear al ex pandillero por su pensamiento.
El resto del día paso lento para el psíquico, la presencia de la joven lo distraía en ocasiones, por no decir que se divertía cuando esta reaccionaba o hacia destacar su personalidad fuerte, era como ver a un animalito tierno ser valiente, o en el caso de Saiki era ver a la pequeña chica ser tan brava mientras portando una apariencia tierna.
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HASTA QUE TU MUERTE NOS SEPARE
Fanfiction-Dime cómo te llamas-le pregunto el niño de cabellos rosas. -No lo sé...nunca me han dado un nombre- le respondió la niña vestida de harapos. El joven solo se dedicaba a ver a la joven, a simple vista la podría confundirla con una muñeca de porcelan...