HASTA QUE TU MUERTE NOS SEPARE

Omega03

La peli-negra se encontraba en un sillón enfrente del británico, el cual la miraba de manera dulce, una mirada que la tranquilizaba desde que tenía memoria, de cierta forma le tranquilizaba que la USSP mandara al mayor de sus hermanos para eliminarla y es que al contrario del castaño, Alfa era más cariñoso y compasivo con ella, era una de las pocas personas a las que le tenía confianza.

-Cómo has estado Omega...sabes porque me enviaron verdad- como siempre el rubio tenía un tono calmado y tranquilo.

-Estas aquí porque eh fallado...o estás aquí porque ya se ha acabado mi tiempo- sus palabras eran calmadas, Suzuki sabía que cual sea la opción era mejor que regresar a ese lugar donde creció.

-Estoy aquí porque logre que el doctor Gonzales reconsiderara la opción de...matarte, pero no logre nada...lo lamento Omega, pero debo eliminarte- los ojos azules del mayor empezaron a aguarse.

-Gracias...pero creo que los dos sabemos que es mejor de esta forma- la joven ya estaba resignada, sabía que lo mejor para ella era aceptar su final- tienes un arma o tu objetivo era evitar que consumiera cualquier energía- al ver la mirada de su hermano supo que le dolía el hecho de tener que verla morir de la forma más cruel que había-¿puedo pedirte un favor?

Mientras que la mestiza y el británico platicaban en la residencia Saiki llegaba el menor de la familia con un semblante que demostraba su cansancio y esto no fue desapercibido por Kurumi, por lo que este día si o si la mujer hablaría con su hijo, ya que este no había querido hablar con la mujer desde que esta había observado el cambio de humor tan deprimente que había adquirido su hijo. Tan solo fue necesario que el peli-rosa cruzara la puerta principal para tener cara a cara a la mujer que le dio a luz, la cual tenía una mirada seria y preocupada, Kusuo sabía que su madre quería hablar con desde hace tiempo, pero este no había querido tener esa charla con la mujer por la simple razón de no sentirse listo para aquella conversación con esta.

-Kusuo necesitamos hablar...no puedes seguir huyendo de lo que sea que te esté pasando, soy tu madre y me preocupas- la voz de la mujer reflejaba angustia pura por el menor de sus hijos.

-Lose...perdona por no haberte dicho nada...pero no sabía cómo explicártelo, siento que podría haber hecho algo mal...pero Kusuke me mostro que ella no era lo que pensaba...bueno si sabía que era ella hasta cierto punto...pero nunca creí que fuera capaz de ello, pensé que yo era el primero- en ese momento el menor de los Saiki había sacado todo lo que había estado atormentándolo.

En ese momento Kurumi se asombró por ver como el rostro neutral que siempre portaba su hijo, se transformó en una cara de frustración, al parecer el joven psíquico estaba presentando su primera crisis de adolescente...claro que como todo lo que rodeaba a Saiki esta se presentó de una forma desastrosa y para nada normal.

-Ven cariño lo mejor será ir a sentarnos- y así es como una plática entre madre e hijo se llevó a cabo, donde el menor de los Saiki le conto todo a su madre de principio a final, desde su predicción hasta el momento donde había confrontado a Suzuki por lo que su hermano le había mostrado. Kurumi solo escuchaba a su hijo en silencio, no creía como su pequeño Ku había tenido su primer amor y junto a todo eso su primera desilusión.

-Estas muy seguro que ella era la del video o por lo menos si lo fue porque lo hizo, además Ku debes tener en cuenta que esto que estás haciendo no es un castigo es una tortura- la voz de la mujer era seria, pero no por eso dejaba su tono dulce de siempre.

-Estoy seguro, cuando viaje al pasado era ella la niña que estaba cerca de las flores- el joven decidió ignorar la mención del castigo de la joven.