• Oscura Realidad •

Capítulo 3

Todo el verano había transcurrido normal, después de que aquella noche los amigos de mi tío Lucius vinieran a hablar con el estuvo ausente y no lo he vuelto a ver por aquí, mi tía está un poco más nerviosa de lo normal pero en realidad no es algo tan fuera de lo común.

La mayor parte del tiempo la pasé con Draco platicando acerca de cómo era Durmstrang y el me platicaba todo lo que debía saber para sobrevivir en Hogwarts que al parecer era un colegio mucho más interesante.

-Estas jodiendome Draco? Es que enserio, una serpiente gigante que te mata si la ves a los ojos se me hace algo imposible de creer_Dije soltando risitas entre cada una de mis palabras.

-No es broma, así como lo escuchas y no era una serpiente gigante era un Basilisco_Dijo el mientras soltaba una fuerte carcajada.

-De acuerdo pido una disculpa, un Basilisco_Dije riendo mientras el sonreia_Y aparte no puedo creer que un pollo gigante te atacará, pues que hiciste para que eso pasará?

-En realidad no fue mi culpa, todo fue culpa del idiota de Potter siempre quiere ser el centro de atención_Dijo el bajando la mirada.

Note que que eso le molestaba un poco a Draco el hecho de que alguien siempre tuviera la atención de todos por lo que decidí cambiar de tema.

-Vaya que en esa escuela pasan cosas muy raras, en Durmstrang realmente nunca pasó nada así de interesante o al menos no de esa magnitud_Dije a modo de reproche.

-Pues verás que estando juntos en Hogwarts vamos a vivir muchas aventuras así_Dijo mientras me dedicaba una gran sonrisa.

Debo admitir que vivía por estos momentos el hecho de ver a Draco feliz era por aquello que siempre me había esforzado, sabía que su padre le hacía miserable la vida cada que estaba en casa y el tiempo que no estuve yo para él debió haber sido sumamente difícil, no es como que mi madre me hiciera la vida fácil pero al menos yo estuve lejos unos cuantos años y tampoco era que me importara mucho a comparación de el.

-En fin me alegra que ya mañana sea primero de septiembre y podré conocer la famosa escuela de magia y hechicería Hogwarts_Dije mientras sonreía.

-Se que te gustara estar ahí es un lugar bonito fuera de las cosas raras que no se porque pasan cada año, en fin veremos que loca aventura nos toca vivir este año_Dijo mientras ponía un mechón de cabello detrás de mí oreja.

Por un momento nuestras miradas se quedaron clavadas fijamente la una en la otra, sus ojos grises eran bellos eran tan hipnóticos, por un momento me sumergi en su mirada y mi mente quedó totalmente en blanco, sin percatarme que al mismo tiempo que lo veía fijamente sonreía como una tonta.

El sonido de alguien tosiendo fue lo que me hizo regresar a la realidad, fue ahí cuando pude ver a Narcissa recargada en la puerta mirándonos atentamente a los dos y no se porque pero mi primera reacción fue separarme lo más que podía de Draco.

-Bueno niños, lamento mucho haber interrumpido ammm lo que sea que esto fuera pero deben tener sus cosas listas para mañana_Dijo ella señalando las maletas casi vacías que estaban en el piso del cuarto de Draco.

-En ese caso te deseo mucha suerte Draco porque la vas a necesitar_Dije mientras reia y avanzaba hasta la puerta de su cuarto.

-Oye no te vayas ayúdame a guardar mis cosas, ya viste todo lo que tengo que guardar en un par de horas_Dijo quejándose amargamente.

-Si Draco ya vi pero también tengo cosas que hacer así que arréglatelas tu solo_Dije lanzándole una risa juguetona mientras me daba vuelta para salir de su habitación.

Sali de su habitación pero aun podía escuchar su berrinche, mientras le hablaba a uno de los elfos para que hiciera todo por el, mientras tanto entre a mi habitación para terminar de guardar algunas cosas cuando abri uno de los cajones de la mesa que estaba a un lado de mi cama y nuevamente vi el anillo de serpiente y la carta, deje el anillo sobre la mesa y saque la carta del sobre.