༄ིRáscarme La Orejita༄ (YiZhan)

10༄Recuerdo amargo

Cuando la pequeña carcajada de parte Xuan Lu se escuchó, Xiao Zhan salió de su ensoñación y le brindó una sonrisa nerviosa a Bowen.

ーYo-o... Iré a dejar las compras a la... segunda planta... ¡Si!ーBowen prácticamente corrió hacia las escaleras y las subió saltando un escalón de por medio, no fue un gran problema. ¡Ahora más que nunca Bowen agradecía el largo de sus piernas!

Después de una amena sesión de risas bajas por parte de xuan Lu, Xiao Zhan quiso preguntar por las reacciones de ambas personas.

ーShi...

ーA-Zhan, que haces aquí ¿Mhm?ーXuan Lu evito cualquier tipo de pregunta de parte de Xiao Zhan. El tono divertido aún se podía discernir entre sus expresiones y voz, pero a media que la mujer se acercaba con pasos delicados en dirección al pelinegro, está expresión fue cambiando a una de seriedad.

ーA... Estaba ¿...aburrido...?ーEl pelinegro estaba empezando a impacientarse por la segura futura reprimenda.

ー¿Ajá?

ーSi...ーXiao Zhan volteó la mirada nerviosamente.

ーNo voy a preguntar cómo bajaste las escaleras, sé que puede que me enoje bastante al saber cómo te arriesgarse de esa maneraーXuan Lu soltó un suspiro pesado.

ーSimplemente...no quiero que lo vuelvas a hacer si te encuentras solo en la mansiónーPronunció la mujer mientras soltaba sin cuidado sus llaves dentro de su bolso de tela provocando un desagradable sonido de choqué entre todas las pertenencias dentro del mismo. De nada sirvió su ademán anterior por buscar el bolsillo dentro del bolso.

ー...Shijie...

ーA-Zhan sabes que no lo digo por qué no tenga confianza en ti, o por que piense que no podrás hacerlo. Lo digo por qué... Aún tengo miedo que vuelvas a caer de las escaleras como cuando pequeñoーXuan Lu sintió que un nudo se formó en su garganta, el temor de volver a ver a su pequeño Xiao Zhan empapado en sangre aún la atormentaba por las noches. El miedo era tanto para ella, que hubo noches en las que sus pesadillas la alteraron a tal punto que solo corriendo a la habitación del pelinegro y verificando que este se encontraba durmiendo la hacía entrar de nuevo en razón.

Xuan Lu solo entonces estaría tranquila y podría regular su respiración repitiéndose mentalmente

"Él está bien"

"Él está a salvo"

"Tú lo mantuviste a salvo"

"Si el vuelve a caer tu estarás ahí siempre para ayudarlo a levantarse"

"Siempre estará a salvo mientras tus vivas"

Xuan Lu no recuerda cuando adoptó a Xiao Zhan en su corazón como su propio hijo, a tal punto de enloquecer si este se hacía algún daño. Ella sospecha que fue después de encontrar a su pequeño sobrino moribundo tendido en el suelo.
La escena era digna de temer, pues la sangre estaba esparcida por todo el recibidor, como si hubieran arrastrado un cadáver brutalmente apuñalado hacia la puerta.
El pequeño niño yacía en medio de un lago de sangre, su piel competía con el color de las blancas paredes de aquella mansión. Aquellos pequeños labios tornándose de una tonalidad morada ofreciéndole una sonrisa rota solo lograron hacer que el corazón de Xuan Lu doliese de maneras inimaginables, tentada a maldecir a su hermana por dejar que tal atrocidad se suscitase ante sus narices.
Aquel día, ella ni se atrevió a alzar la voz y pronunciar el nombre de su hermana, más bien cargó a su pequeño sobrino y corrió con todas sus fuerzas hacia la calle, el hombre al que antes ella había prácticamente exigido que llamara a emergencias ya había terminado de dar las indicaciones de la situación.
Xuan Lu no quiso esperar a que una ambulancia se dignara en aparecer así que ignoró los gritos de aquel hombre incitándola a detenerse.
Pero antes de emprender su carrera, el hombre la tomó por el hombro y le indico que se subiera al auto negro estacionado a unos metros de ellos. En su mente alterada Xuan Lu no logro entender sus intenciones, por lo que el hombre tuvo que explicar con más calma.