18༄Muñeco de cabellos negros

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Cuando la luna llegó a su punto más alto en el cielo, tan resplandeciente como siempre, Yibo en su apariencia de león de piedra daba pequeños saltitos de nerviosismo, sus orejas no paraban de moverse en aquel movimiento que Xiao Zhan denominó como un tic nervioso.

Sus pezuñas causaban crujidos sobre el pedestal de piedra, los "saltitos" que daba el león no eran muy disimulados, el ruido podría ser muy estridente para algunos oídos, pero para Yibo que vivió en esas condiciones por años no resultó como un verdadero ruido.

Yibo supuso que si sería un ser vivo ya debería estar sintiendo las patas acalambradas por todos los que brincos que daba, en algún punto se detuvo y se hecho rendido sobre el pedestal de piedra soltando un gran suspiro, por alguna extraña razón había una sensación fantasma de cansancio en sus extremidades.

Crujiendo los dientes por última vez y sin pensar mucho en el asunto se paró en su posición estoica con dirección al mar y su cuerpo de piedra no se volvió a mover ni un centímetro más.
En su lugar una extraña luz dorada se fue escurriendo del león de piedra para a su lado formar una apariencia traslúcida y brillante en oro del mismo león, pero esta vez su cuerpo se veía tal y como era cuando se volvía suave y esponjoso. Solo que esta vez era más brillante y traslúcido.

Era como el fantasma del león.

Yibo sabía muy bien que no podía definir su estado como el de un "fantasma" después de todo no estaba vivo ni muerto, simplemente estaba en un estado...suspendido(?.
Miró su pata derecha y comprobó el cable de luz dorada que unía su pata traslúcida a la pata de piedra del estoico león demostrando así su conexión con ese cuerpo material.

Cómo siempre que hacia esta acción, tuvo que comprobar que el cable de luz que unía sus dos existencias brillará tan fuerte como debía. Este paso era muy importante, y lo verificaría de manera adecuada cuando se encontrase con Xiao Zhan.

Cómo un gato recién despierto arqueó la espalda para estirar sus articulaciones traslúcidas y batió su cola de manera exagerada soltando un gran rugido de anticipación.

A paso lento y algo inseguro se acercó a las puertas de vidrio para entrar a la mansión.

Yibo se detuvo con una mueca en el rostro.

En este estado suspendido no podía tocar nada material, podría ser una desventaja si las cosas materiales fueran un obstáculo para él, pero si Yibo empujara su pata contra alguna puerta está traspasaría sin ningún problema.

La verdadera razón de su inseguridad de atravesar la puerta se encontraba a dos pisos de distancia, Yibo claramente sentía la presencia del espectro apresado en el tercer piso, este lo odiaba con el alma y Yibo no podía cambiar aquello.

Antes no resultó un problema convivir a poca distancia de él, pero en ese tiempo Yibo jamás se atrevió a poner un pie dentro de la mansión, algo así como un pequeño acuerdo entre estos dos seres.

Sini había mencionado que esté espectro estaba sellado y no había manera de que lo atacará a él o mucho menos que atacará a Xiao Zhan, pero Yibo aún se encontraba inseguro de entrar a la mansión.

Por unos segundos el miedo se apoderó de él y consideró huir, temía que si el espectro descubría su gran relación con Xiao Zhan este haría todo en su poder para poder lastimar a su persona preferida con tal de verlo sufrir. Yibo temía que el espectro descargará su odio en Xiao Zhan por su culpa.

El león traslúcido no se movió ni un centímetro mientras debatía que debería hacer, miró la luna y ahogó un suspiro, bajo su vista y la posó sobre el ventanal de la habitación de Xiao Zhan, crujió una última vez los dientes y cerró los ojos.

༄ིRáscarme La Orejita༄  (YiZhan)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora