(Cap. 6) Viaje a Crizxell.

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NOTA IMPORTANTE.

Hola hermosas/hermosos lectores y lectoras, con la novedad de un nuevo capítulo.

Es hasta ahora mi favorito:')
Me encanta! Espero que a ustedes también.

Estoy muy felíz porque ya tengo toda la historia en mi cabeza♡ Solo falta irla desarrollando, les va a gustar yo lo sé pero les quiero pedir algo.

Algo muy simple la verdad: ¡Comenten! Comenten mucho, Encerio me ayuda mucho ver sus opiniones respecto a cada capítulo. Gracias a las bonitas que lo hacen!:D

Y q los nuevos lectores: no entienden algo de la historia, preguntenme procuro responder rápido:)

Bueno, también les aviso que este capítulo es más largo de lo acostumbrado:') les gusta eso?:3

Creo que tiene un poco de suspenso y sorpresas.

Okay sin más plática les dejo el cap, pero no olviden lo que les pedi e.e" los quiero♡ Gracias por todo su apoyo.

Mariely♥

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CAPÍTULO 6.

VIAJE A CRIZXELL. 

―Gracias por traerme ―murmuro cabizbaja, Darío no responde y en cambio me cede el paso.

Apenas entramos, un pequeño ser encantador corre en mi dirección con una sonrisa deslumbrante en el rostro. Sus ojos turquesas resaltan en el ambiente descolorido, monótono y aburrido.

―¡Ces! ―grita con entusiasmo e irremediablemente sonrío, sus risos dorados se arremolinan en su espalda y en conjunto con su traje blanco forman una belleza espectacular y conmovedora.

―Brisa ―deslizo con suavidad su nombre entre mis labios y estrecho su pequeño cuerpo entre mis brazos.

―¡Te extrañe tanto! ―grita. Me abraza con fuerza y me pongo de pie para cargarla.

La escucho gritar de nuevo, beso su frente con dulzura antes de bajarla y dar inicio a una comprensible sesión de besos y mimos.

Me invade la agradable sensación de felicidad y calidez familiar por lo que sonrío con serenidad. Es un momento corto pero en el que me siento muy bien y olvido todo lo malo.

Mi Brisa; hija de la mujer que casi asesina a mis seres queridos y casi destruye mi planeta (Ciska), su hija Brisa merece ser feliz y actualmente la cuidan en el planeta Crizxell.

Pero Brisa es solo dulzura e inocencia, ¿cómo no quererla tanto? Ella me obsequia la tranquilidad y paz que Mike me ha robado.

―Mi niña, me gustaría tanto llevarte conmigo ―digo, mi mano se posa en la suave piel de su mejilla sonrojada y la acaricio con lentitud.

―¡Llévame Ces! Aquí son muy buenos pero extraño mi casa y te extraño a ti, llévame al centro galáctico ¡por favor! ―pide con entusiasmo, su voz no se vuelve mimada pero si infantil y hace juego con sus manos juntas en su pecho.

Darío me observa desde atrás con advertencia murmurando un no con voz apenas audible para un kadrox. Soy incapaz de mantenerle a mirada a Brisa cuando reproduzco de mi boca las palabras que antes ya me habían dedicado.

―Es peligroso, lo mejor para ti es que estés al margen de todo, mi vida ―digo triste y la vuelvo a abrazar antes de que pueda oponerse, suspira resignada y me corresponde el abrazo.

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