Haewon y Bitna ya se encontraban en casa con perfecta salud. Yo procuraba visitarlas casi diario después del trabajo, ya saben, en caso de que se les ofreciera algo o simplemente para apoyar a mi mejor amiga en esta nueva y desconocida etapa.
ꟷMe encanta que vengas, de verdad eres de gran ayuda ꟷdijo mientras yo lavaba algunos trastesꟷ. De verdad estoy muy agradecida contigo. Prometo que cuando tengas un bebé, iré a ayudarte con todo.
ꟷMuy graciosa ꟷexclamé mientras enjuagaba un plato.
Haewon se limitó a reír y luego se disculpó diciendo que llevaría a Bitna a su cuna para que estuviese más cómoda.
Bitna era una bebé tan tranquila que casi no lloraba. Haewon no paraba de decir que había salido igualita a ella, tranquila y dormilona, pero por lo que yo sabía, ella le había causado algunos dolores de cabeza su madre e incluso a la mía.
ꟷAl fin, un descanso para mis brazos ꟷvolvió a la cocina al mismo tiempo que movía sus hombros hacia atrás y hacia adelante repetidamenteꟷ ¿Cómo has estado? ¿Qué dice la escuela? ¿Jabeom?
En realidad todo estaba bien, no había mucho que reportar. Todo marchaba bien en la escuela, pronto tendríamos un pequeño descaso por Chuseok así que nos encontrábamos en periodo de evaluaciones y hasta ahora todos había obtenido buenas notas. Sobre mi estado físico, nunca había estado mejor. A pesar de que últimamente me estaba desvelando un poco por los exámenes, sentía que estaba descansando al máximo esas 4 o 5 horas de sueño que lograba conseguir al día. Trataba de alimentarme bien y también había comenzado a tomar unas vitaminas por si acaso.
ꟷ¿Y Jaebeom? ꟷsonrió.
Las cosas entre Jaebeom y yo solo iban. Y no me mal interpreten, no me refiero a un ir de mala manera. Estábamos yendo paso a paso y eso me gustaba. Por alguna razón no me sentía impaciente de que me pidiese ser aquello que Yugyeom tanto tardó en pedirme. No sentía esa apuración a pesar de que nos veíamos unas 3 o 4 veces por semana y que cada 2 semanas alguno se quedaba en la casa del otro. Se había vuelto un hábito y me gustaba.
Estar con Jaebeom era algo increíble, podíamos estar teniendo una conversación seria y a los pocos minutos nos estábamos riendo de alguna cosa sin sentido. Durante todas estas semanas descubrí que Jaebeom era una persona que se preocupa mucho por los demás, y también era muy juguetón cuando se lo proponía. Descubrió que molestarme era su nuevo pasatiempo favorito y aunque a mí no me encantaba porque yo era su víctima, no podía enojarme con él.
También se le había hecho costumbre llevarme al trabajo de vez en cuando, y a mí se me había hecho costumbre visitarlo en el estudio.
ꟷAy amiga ꟷexclamó Haewon y se dejó caer en el sillónꟷ. ¿Al menos se besan?
ꟷ¡Haewon! ꟷgrité y me dejé caer a su lado. Luego me reí.
ꟷ¿Sí o no?
No dije nada, ella iba a matarme si le decía la verdad.
ꟷ¡Amigaaa! Eres... ꟷno terminó su frase, pero había muchos adjetivos que podían encajar a la perfección. Inhaló y exhaló un par de veces.
ꟷ¿Él habla sobre mí con Youngjae?
ꟷ¡Claro que lo hace! Pero no te diré nada porque Youngjae me lo pidió y no quiero entrometerme en su relación, tómense todo el tiempo que quieran ꟷcruzó las piernas arriba del sillónꟷ. Me da gusto verte feliz. Se ve que se llevan muy bien y eso importa mucho.
Pasé toda la tarde con ella platicando sobre Bitna y lo bien portada que era, fue una tarde tranquila. Después llegó Youngjae y supe que era hora de irme.